A pesar de que la economía mundial atraviesa por una incertidumbre fuerte, producto de la propagación del coronavirus, las perspectivas de crecimiento continúan estables. El análisis mensual de Itaú, en su reporte Macro Escenario Marzo 2020, espera que Paraguay crezca 3,5%, sin cambios desde el mes pasado, impulsado por la normalización de la cosecha de soja, un mayor crecimiento de Brasil y un arrastre estadístico elevado.
Argumentan que hay fuerte expansión de la actividad, registrada en el cuarto trimestre del 2019. De acuerdo al proxy oficial del PIB mensual, marcado por el Indicador Mensual de la Actividad Económica Paraguaya (IMAEP), la actividad se expandió 3,4% anual en el último trimestre (2,7% en tercer trimestre) y 6,2% trimestral desestacionalizado y anualizado. El mismo indicador, pero excluyendo la agricultura y las binacionales, se expandió 3,8% anual en el cuarto trimestre y 5,5% desestacionalizado y anualizado.
El crecimiento fue generalizado entre los sectores a excepción de la energía eléctrica, producto del menor caudal del río Paraná. El arrastre estadístico para el 2020 es de 3%. El estimador de cifras de negocios creció 5,4% anual en la cuarta parte del 2019 desde 5% en el tercer trimestre; esto corresponde al sector telefonía, materiales de construcción y equipamiento para el hogar.
“La baja inflación permitiría al Banco Central del Paraguay (BCP) mantener la tasa de interés sin cambios en lo que resta del año a pesar de la esperada expansión de la demanda agregada. Esperamos un alza de precios de 3,5% en el 2020, mientras que la tasa de política monetaria se mantendría en 4% (4,25% en nuestro escenario anterior)”, señala con base en el estudio de sus analistas.
El Banco Central interviene con ventas en el mercado cambiario. En los primeros dos meses del año, el guaraní se depreció solo 0,7% en términos reales, ayudado por las ventas del BCP (166 millones de dólares). “Esperamos un tipo de cambio de 6.560 guaraníes por dólares a fin de año”, señala el banco.