Para el Banco Central del Paraguay (BCP) todavía no se ve un escenario de decrecimiento, pero sí una fuerte desaceleración. Técnicos de la banca matriz argumentan que los datos de Cuentas Nacionales Trimestrales son los únicos que pueden confirmar una caída económica durante dos trimestres consecutivos.
- POR ARMANDO GIMÉNEZ LARROSA
- Periodista
- armando.gimenez@gruponacion. com.py
El panorama económico ya está marcado para los agentes del mercado en lo que va de este 2019, basándose en los datos a corto plazo divulgados por el Banco Central del Paraguay (BCP), pues concluyen que Paraguay ya afronta una dura recesión. Si bien los datos son tomados por el Indicador Mensual de Actividad Económica de Paraguay (Imaep), que sí muestra una caída consecutiva de 7 meses, para el BCP todavía no es un escenario de decrecimiento, ya que aún no se cuenta con los datos de Cuentas Nacionales Trimestrales, correspondientes al segundo trimestre del 2019.
Técnicos de la banca matriz explicaron que para tomar un escenario de recesión se debe contar con dos trimestres consecutivos de decrecimiento económico, y solo se cuenta con datos de los primeros tres meses del año (-2,0%), razón por la cual se debe esperar para saber el resultado real de la economía. En tanto, sí admiten que se presentó una fuerte desaceleración, tomando los datos de la actividad económica.
El economista Manuel Ferreira, de la consultora MF Economía, dijo que la economía sí está en una dura recesión, al tener en cuenta los datos del Imaep. “Los datos trimestrales del PIB en Paraguay no son desestacionalizados, por lo tanto se tiene el problema de que no hay un informe trimestral que es real. A raíz de eso, nosotros esperamos incluso un decrecimiento del 0,4% para el cierre del año”, dijo.
Para el economista de Basanomics, Carlos Fernández Valdovinos, ex presidente del BCP, técnicamente se toman los datos del Imaep para afirmar que ya hay una recesión. “Alguien me dijo que no se podía medir con el Imaep, y yo le contesté que era una lástima que desconozca que el BCP oficialmente no publica números trimestrales del PIB que dejan mostrar una recesión, en el sentido de dos trimestres consecutivos, ya que la retracción debe ser respecto al trimestre anterior; es decir, deben ser datos desestacionalizados. El único número oficial desestacionalizado es el Imaep”, argumentó.
Con respecto a julio había un informe auspicioso, ya que los clientes, especialmente en el banco, afirmaban que fue un mejor mes, relativamente tranquilo. En ese sentido, dijo que el número del séptimo mes podía incluso ser positivo. Sin embargo, se perdió fuerza nuevamente tras 22 días de crisis política en agosto, lo que se resentirá nuevamente en ese mes.
Para la economista de la PwC, Daiana Coronel, la economía paraguaya se estima cerrará el año en 0,8% en el escenario base, siendo probable incluso un escenario negativo para el PIB. Las condiciones climáticas adversas, la menor ejecución de las obras públicas, la situación regional (Brasil y Argentina) y algunos acontecimientos tanto internos como externos fueron causantes de la variación a la baja en las estimaciones del PIB de Paraguay, que inició el año en alrededor del 4%.
“De hecho, los resultados preliminares del producto, como son el Imaep y el Estimador Cifra de Negocios, indican que estamos con dos trimestres consecutivos de resultados negativos, que en conjunto con otras variables muestran una coyuntura atípica a lo que estábamos acostumbrados en cuanto a desempeño económico. Si bien hay anuncios desde el equipo económico de un plan de activación,y en este sentido para el mes de julio se podría esperar una mayor actividad, aunque la misma seguiría por debajo de la registrada en años anteriores”, explicó.
Para la consultora internacional Itaú Macrolatam, en términos desestacionalizados la actividad se contrajo a un ritmo de 5,5% trimestral anualizado a mayo. La caída de la actividad fue generalizada y excedió al magro desempeño de la agricultura y las binacionales. La reciente incertidumbre política en el país posiblemente limitará la capacidad de realizar políticas fiscales anticíclicas en la segunda parte del año, afirma.