El cumplimiento de la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF) será muy complejo en este 2019, según estiman desde Basanomics. Desde su aprobación, dicha ley fue un ancla fundamental para darle sostenibilidad a la política fiscal. Sin embargo, en el presente año se observa varios puntos en contra, resalta el reporte Macro Trimestral de Basanomics.
“Se observa un aumento fuerte de los gastos corrientes primarios (del orden del 8% acumulado a julio), los cuales son rígidos y difíciles de disminuir en lo que resta del año), así como un aumento de los gastos de capital (del orden del 9%), los cuales no deberían recortarse en vista al desempeño mediocre de la economía ya que ello podría alargar la desaceleración”, explica el reporte.
Agrega, además, que hay un pobre desempeño de las recaudaciones tributarias (con un aumento de solo el 2%), las cuales reflejan la coyuntura económica y, por tanto, hay pocas expectativas que dicha dinámica pueda revertirse en el corto plazo; y una proyección de crecimiento del PIB que estará muy por debajo a lo inicialmente proyectado. “En resumen, existe un riesgo elevado que el numerador (déficit fiscal nominal) sea mayor y que el denominador (PIB nominal) sea menor a lo esperado.
Sería adecuado que el Ministerio de Hacienda reajuste en la brevedad posible su plan de racionalización presupuestaria, tomando en cuenta el decepcionante desempeño de las recaudaciones y evitando en lo posible cortes en gastos que impliquen demorar la recuperación económica”, argumentan los expertos de Basanomics.
A julio, el déficit fiscal alcanzó el límite legal previsto. A finales de julio, la administración central cerró con un déficit de G. 1,5 billones (US$ 255,2 millones), lo que equivale a 0,6% del PIB. Con este resultado el déficit anualizado (i.e. en un periodo de doce meses) alcanzó el 1,5% de PIB, al tope de lo establecido en la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF).
Esto debería constituirse en una señal de alerta para las autoridades. De manera a cumplir con la LRF a finales del año, el déficit fiscal mensual debería ser similar a lo observado entre agosto y diciembre del 2018.
¿EN QUÉ CONSISTE LA LEY?
La Ley de Responsabilidad Fiscal fue aprobada en octubre del 2013 con el fin de ordenar el proceso de elaboración, aprobación y ejecución del presupuesto público.
La misma fija un tope máximo para el déficit fiscal o al exceso del gasto público sobre los ingresos totales de la administración central de hasta el equivalente al 1,5% del Producto Interno Bruto estimado para el año.
También determina que los salarios de funcionarios públicos solo pueden reajustarse al año siguiente de haber sido reajustado el salario mínimo para trabajadores del sector privado y como máximo hasta el mismo porcentaje de este reajuste.
Determina que los gastos corrientes no pueden experimentar un incremento superior al 4% más la inflación proyectada por el Banco Central del Paraguay de un año a otro comparativamente.