Según el informe men­sual de la Asociación Industrial de Con­feccionistas del Paraguay (AICP), las exportaciones del primer semestre del año arrojaron saldo negativo del 21,5%, con US$ 59,5 millo­nes con relación al mismo período del 2018, cuando los envíos alcanzaron US$ 75,8 millones, situación que se vuelve a repetir conforme a los números preliminares del mes de julio, por lo que la situación no es nada alen­tadora con la crisis política desatada.

Es lo que manifestó el pre­sidente de la AICP, Diego Daud, quien mencionó que el panorama para las expor­taciones se vuelve aún más complicado, con los últimos movimientos electorales de la Argentina que arrojan consecuencias financie­ras como la suba del dólar, el riesgo país y los impues­tos que se pretenden cargar, teniendo en cuenta que en los últimos años ese mer­cado había caído y recien­temente se estaba logrando levantar un poco.

“Lastimosamente los núme­ros de julio que estamos recopilando aún mantie­nen esta tendencia a la baja en torno al 20% de lo que ya vimos hasta junio con res­pecto al primer semestre del año anterior, y siendo sin­ceros no hay muchas espe­ranzas de que se revierta la situación porque está muy complicada”, sostuvo.

El titular del gremio indicó que se debe tener en cuenta que en las exportaciones del rubro confecciones y texti­les, se encuentran por un lado las empresas paragua­yas que están bajo el régimen de la maquila, cuyos envíos son en gran parte al Brasil, que probablemente man­tendrán un equilibrio por el mercado destino, y que por otro lado están las empresas propiamente nacionales que exportan bajo los regímenes normales y que incluso esta­rían resintiendo las ventas externas en un 50%, dijo.

Por otro lado, habló acerca de las ventas en el mer­cado interno, que tampoco están con cifras alentado­ras, porque se registra un bajón en un 30%, situación que lamentó igualmente, ya que se estaba logrando repuntar con esfuerzos del empresariado más acciones de Aduanas para frenar la importación a gran escala de prendas, pero que la cri­sis actual repercutió y todo se vuelva a parar.

Ante la caída de los envíos del sector de confecciones, el con­sultor Stan Canova señaló que la manera de subsistir del rubro será la de ofrecer productos diferenciados y seguir con la diversificación de mercados.

Agregó que la Red de Inversio­nes y Exportaciones (Rediex) debería extremar esfuerzos con el sector de manera a que la industria no sienta la situación actual de la Argentina, ya que la misma puede afectar en cierta medida. Sobre el punto, indicó que se debe apuntar a mercados más estables y no complicarse la vida con economías inestables.

“Lo óptimo será que la situación mejore en el corto, mediano y largo plazo”, expresó. El sector de confecciones está pasando por un momento complicado, con­secuencia de los embates, en términos de costos, de China y la India. “Creo que las industrias del sector deben estar presentes en ferias internacionales para llegar a esos mercados de consumo, de manera a conocer posibles nuevos destinos”, dijo Canova.