El problema de la devaluación del peso argentino en el vecino país es preocupante para el Paraguay, porque tiene varios vínculos que unen con el país, afirmó el analista económico, Amílcar Ferreira. “Por un lado está el comercio exterior, las exportaciones de soja, el complejo industrial granelero argentino, que creo que no sufrirá. Luego las exportaciones de textiles, como las de Manufactura de Pilar, entre otras”, dijo.
El analista explicó que con la devaluación del peso, que pasó de 46 a 60 por dólar, incluso más de 60, produce que las exportaciones locales sean menos competitivas.
Por otro lado, se tienen las remesas, del millón de paraguayos en Argentina, que pueden verse afectadas, sumadas al comercio fronterizo, que ante una crisis podría disminuir aún más.
“Por el lado de la inversión extranjera directa, ya que Argentina es fuente principal de inversiones en Paraguay, notablemente fue el único rubro que mostró comportamientos positivos en crisis anteriores.
El capital argentino al verse con mayor riesgo en su propio país hizo que beneficie a Paraguay, especialmente en el rubro inmobiliario”, agregó.