El canciller paraguayo, Luis Castiglioni, confirmó hoy que el gobierno del Brasil suspendió la aplicación de todo arancel a las piezas de autopartes que se fabrican en Paraguay. De acuerdo con lo expresado por el secretario de Estado, la posición paraguaya fue que se mantenga actual régimen de exportación de autopartes. Es decir, sin aranceles, según datos brindados por la Cancillería paraguaya.
Brasil, a través de la Receita Federal, pretendía exigir el pago del arancel externo común del 16% por cada exportación, mientras se establezcan las negociaciones para alcanzar un acuerdo automotor amplio.
Castiglioni dijo a Radio 1.000 que el gobierno no ha descansado en los últimos días realizando negociaciones y contactos de alto nivel con las autoridades brasileñas. “Hay que decir que esto fue posible también porque hoy día hay un gran relacionamiento con el Brasil y de esta manera hemos logrado un triunfo porque esta decisión contempla los intereses de todos los paraguayos”, recalcó.
Indicó que a partir de esta decisión, el gobierno paraguayo está confiado y en “situación de tranquilidad” para negociar lo referente al acuerdo automotor, acuerdo que el vecino país tiene con Argentina y con Uruguay, y que solo faltaría concretar con Paraguay.
Castiglioni también refirió que este acuerdo sin dudas también sirve para el sector de los autos usados. “Nosotros nunca dejamos de tener en cuenta los intereses de los diferentes sectores, entre ellos el de los autos usados”, recalcó Castiglioni.
GRADUALIDAD
Sobre este punto, desde el Ministerio de Industria y Comercio, la posición oficial tiene que ver con la aplicación de la gradualidad en cuanto a la importación de vehículos usados. El viceministro Pedro Mancuello indicó que el gobierno paraguayo reconoce que la importación de los vehículos usados permitió que el país supere el flagelo de los autos “mau” y permitió el acceso a muchas personas a un vehículo, generando una cadena de empleos en el sector que hoy se ve amenazado y que se está haciendo escuchar.