Paraguay no puede seguir en un escenario de incertidumbre, necesita y debe definir a qué quiere apuntar con un modelo de desarrollo económico, por lo que es imperante una toma de decisión y contar con reglas claras para lograr avanzar y ser un país más competitivo, según opinaron economistas con relación a la polémica situación del acuerdo automotor.
El consultor Enrique Varela, de Avantgarde Consulting Group, recordó el plan industrial desarrollado por el anterior gobierno, en el que ya se estipulaba el impulso de una industria automotriz con base en la visión y crecimiento del sector que se fue evidenciando en los últimos años en el régimen de la maquila, que aglutina a las industrias autopartistas.
“Si la decisión es trabajar en el desarrollo de las autopartes, que es un segmento muy importante, entonces Paraguay necesita negociar y firmar acuerdos bilaterales para que se establezcan reglas claras y que los productos paraguayos, en este caso cableados, puedan ingresar a los mercados intrazona del Mercosur y avanzar competitivamente”, expresó.
No es posible desarrollar una industria sin que estén resueltas las condiciones y las relaciones comerciales, y es por ello que el país debe seguir una estrategia para que también la inversión extranjera encuentre esa confianza y un panorama claro, y quiera apostar a dicha industria que forjará el desarrollo deseado.
Para el analista económico Amílcar Ferreira, la situación es clara, existe un régimen automotor dentro del Mercosur, en el que Paraguay quedó fuera al no tener una industria automotriz cuando se estableció el bloque, por lo que quedaron estos temas pendientes, situación que se revirtió con la maquila, cuyas exportaciones llegaron a los US$ 600 millones en el 2018 y con la participación de más del 50% de autopartes.
“Paraguay debe tomar la decisión de si ingresa al régimen del Mercosur o renuncia a ello para mantener la libre importación de vehículos. En caso de la segunda opción, será vital regularlo con controles más técnicos y estrictos para el caso de los procedentes de Chile o los usados”, advirtió.
Al efecto, dijo que al no tomar la decisión de acoplarse a un acuerdo automotor, al igual que los demás países del Mercosur, renunciaría al desarrollo industrial automotor.