El sector de la fluvial es uno de los segmentos que más oportunida­des de progreso brinda al Para­guay, teniendo cuenta que es un importante dinamizador de la economía, gracias a su constante servicio en la logís­tica y el transporte de cargas.

Robert Bosch, quien se desem­peñan como uno de los refe­rentes del sector, es una de las personas que quiso, desde siempre, estar ligado al mundo de ámbito de los servicios en el comercio internacional y, en virtud a ese objetivo, desa­rrolló su vida y su trabajo en diversas actividades. Comentó acerca de sus vivencias, sus ini­cios, los problemas y sus objeti­vos que tuvo en el marco de lo que él lo considera como una pasión.

– ¿Cómo inició su carrera en el sector empresarial?

– La verdad que inició con los entrenamientos en Europa, luego pasé a una linea marí­tima holandesa que hoy en día ya no existe. Luego de hacer todo ese proceso de capacita­ción, formación, hace que esté ya hace 20 años en el Paraguay frente a la Compañía Marítima Paraguaya.

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Estoy concentrado en todo lo que se refiere la parte logística y servicios. Estoy al frente de la que son las terminales de combustibles, con los buques portacontenedores y de las ter­minales o puertos de contene­dores como es Terport Saque, ubicado en la ciudad de San Antonio. Estoy al frente de la empresa de transporte de camiones.

– ¿Qué fue lo que le impulsó a incursionar en este ámbito comercial? Un motivo espe­cial?

– Siempre me gustó el mundo del transporte. Creo que junto a los servicios, son estratégicos para el país porque el 85% del comercio del Paraguay entra y seguirá así por los siguientes 100 años, mediante el río Para­guaya. Ni los servicios terres­tres, aéreos ni con trenes no van a superar lo competitivo del servicio fluvial, simplemente por los costos y el tiempo que se manejan.

Al terminar mi servicio mili­tar en el Paraguay, en lugar de quedarme acá, mis padres me enviaron como marinero en los buques de una empresa holandesa y estuve trabajando ahí en varias partes. Los via­jes de este tipo duraban como tres meses y como desde muy joven estuve en ese mundo, me formé y me gusta estar dentro de este rubro. Afortu­nadamente, mi padre me hizo recorrer todas las áreas de la empresa, conozco todos los detalles y eso me da mucha confianza a la hora de solucio­nar los problemas que se pre­sentan en el día a día. Actual­mente ya estoy gerenciando, pero conozco todo lo que hay en la compañía Marítima Para­guaya.

– ¿Cuáles son los objetivos que tiene como empresario?

– Unos de los objetivos que tengo es seguir compenetrado en la formación de mis per­sonales en materia de salud, educación y cuestiones socia­les que incluyen los familiares de ellos. Entre las empresas que conforman el grupo, contamos con aproximadamente 500 a 600 personas que trabajan. También es trabajar en un solo bloque. El trabajo en equipo es la base del éxito que tiene una empresa.

– ¿Se considera una persona exitosa? Por qué?

– A esta altura ya estoy muy conforme a lo que ya he lle­gado. No se si eso es ser exitoso, pero ya llegue a varias metas que tuve en mi vida y sigo para rato. Realmente me siento muy confortable con lo que ya hice. En todo esto, me ayudó el com­portamiento de mi padre que no fue blando conmigo, eso me ayudó a encarar de una manera diferente la vida misma y mis actos. Hoy soy una persona que saca frutos de esa manera de educación al cual fui inculcado.

– ¿Cuál fue el inconve­niente que tuvo que supe­rar durante su vida laboral?

– Realmente lo que cuesta y no es fácil, mas todavía en una empresa familiar en el que estoy, es el paso de una gene­ración a otra. Cuesta mucho el tema generacional por­que mi familia viene de una manera diferente de vida, yo soy parte de la generación de la tecnología. Entonces las cosas se generan en 5 minu­tos y en ese tiempo también empiezan los problemas. Así también en 5 minutos debes solucionar los mismos antes que inicien otros y se acu­mulen los mismos. Mi padre es más conservador y tiene su manera de trabajar. No es fácil el tema generacional. Obviamente adopté también esa manera de trabajar, pero como los tiempos cambian, fui obligado a actualizarme y aprender también cosas por el camino, hasta hoy.

– ¿Qué debe tener en cuenta un profesional para llegar al éxito?

– Para hacer negocios en este mundo, hay existe nada impo­sible. Lo que yo veo es para tener éxito en una empresa que maneja muchas personas es la parte de Recursos Huma­nos. Eso es lo mas difícil que hay en una empresa. En general somos 500 personas, 500 mun­dos diferentes, 500 maneras de pensar. Cada familia tiene su problema y eso repercute mucho en el rendimiento que pueda tener una persona. Acá estamos 10 a a 12 horas juntos. El tema de los RRHH y tener un Psicólogo en la empresa es la manera ideal de llegar los obje­tivos, por ende al éxito.

– ¿Cuáles son las virtudes y los defectos que tiene?

– En cuanto a mi virtud es que cuando me fijo una meta, no largo hasta llegar a ese objetivo. Voy a a seguir insistiendo, mas aún si se que se puede o tengo la razón, hasta que lo logré, no me rindo fácilmente. En cuanto a mis defectos: me falta más organización, trabajar en menos cosas y no estar concen­trado en muchas cosas porque de repente te puede pasar una mala jugada, cuando estás con la cabeza con cientos de cues­tiones que ver, solucionar, negociar, entre otras cosas.

PERFIL

ROBERT BOSCH

Profesión: Técnico en Economía Marítima

Cargo actual: Dtor. Gte. Com­pañía Marítima Paraguaya

Edad: 50

Estudió la carrera de Econo­mía Marítima en la Univer­sidad de la Marina Mer­cante de Buenos Aires. En 1992 entrenó en Londres en una línea marítima Ned­lloyd, luego en terminales portuarias de Southamp­ton y Felixstowe (Inglaterra). En 1993 trabajó en Genova Costa Container Lines y luego trabajó en Banchero & Costa Brookers de Seguro Marítimo.

Trabajó en Rot­terdam en la empresa ale­mana Haniel Group en la cual estuvo en el área fluvial que tenía buques para containers que hacían el servicio en el río Rin. Se desempeña tam­bién como director de la dis­tribuidora de combustibles TLP, de la firma AST y del ISP.

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