A diferencia de como se lo venía tildando al nuevo gobierno de Jair Bolsonaro, del Partido Social Liberal recientemente electo como presidente del Brasil, la visión de André Lahóz Mendonça, director de redacción de la revista Exame de ese país, es que aún se está formando y se dan algunas dudas por ser muy cambiante, pero que en términos económicos será mucho más abierto y antiproteccionista.
“Hay mucho optimismo en cuanto a la persistencia de inversiones brasileñas en el Paraguay que seguirán su curso, y no creo que surjan medidas de protección o algún tipo de impedimento para que empresas brasileñas puedan trasladarse a Paraguay a hacer negocios, sino más bien creo que hay una visión positiva en intercambios comerciales y de las inversiones”, expresó ayer, luego de una conferencia que brindó en la Conmebol, organizada por la Cámara de Comercio Paraguay Brasil, sobre el Futuro Económico y Político de Brasil en manos de Bolsonaro.
Si bien podría darse una tentativa de atacar los costos altos de producción de Brasil, para mejorar la competitividad brasileña, pero para que repercuta en las inversiones brasileñas en el país, solo podría darse en caso de que la energía brasileña se vuelva igual de competitiva como en Paraguay o que el costo fiscal fuese comparable, pero todavía se trata de una agenda que se materializará más a largo plazo y de mucho trabajo para que impacte en las decisiones de los inversionistas, alegó.
Teniendo en cuenta que se trata de uno de los principales destinos de las exportaciones paraguayas y que en caso de darse nuevos aranceles o tasas que sí afectarían al país, no lo cree y que en realidad se daría mayor espacio para las exportaciones paraguayas, ya que la economía brasileña se está empezando a recuperar fuertemente.
Alegó al respecto que los principales indicadores macroeconómicos están alineados, como la tasa de inflación que se está manteniendo baja, en torno del 4 a 4,5%, la tasa de interés también, cuya previsión para mantener ese orden es que se vería la necesidad de aumentar la tasa de interés para el próximo año, pero que las revisiones están informando que no será necesario tal aumento. Y por otro lado, el gran problema o desafío de Abolsar será atacar el rumbo fiscal, con alguna reforma de la previsional o seguridad social de los adultos mayores.