Todo indica que Paraguay terminará otro buen año en este 2018, según reflejan las proyecciones locales e internacionales, ya que la Comisión Económica para América Latina (Cepal) se sumó a los organismos que ajustaron al alza las expectativas de crecimiento del PIB local. Con esto, se confirma que Paraguay cerrará los 5 mejores años de éxito económico, según afirmó el economista Santiago Peña, director de Banco Basa.
Paraguay liderará el crecimiento en América del Sur con 4,4%, según el último informe de la Cepal. De esta forma el organismo revisó al alza, desde el 4% proyectado en abril pasado. Una buena estimación al tener en cuenta que la región solo crecerá 1,5%, según este organismo.
Este buen panorama no se observa en los vecinos, misma conclusión de otras entidades internacionales. Cepal bajó la previsión para los dos principales socios comerciales, Brasil y Argentina. La economía brasileña solo crecerá 1,6% desde el 2,2% previsto antes, mientras que la Argentina se expandirá 0,3%, muy por debajo de los 2,5% previsto antes.
Peña agregó que el número de proyección de crecimiento local es todavía más positivo, ya que el Banco Central del Paraguay (BCP) espera que la proyección del PIB sea de 4,7%. Dijo que ahora en más se debe seguir con la misma línea, la de cuidar la macroeconomía y hacer inversiones que generen desarrollo.
Es más, las expectativas para el crecimiento local aumentaron en todos los ámbitos, contraria para las de Argentina y Brasil, lo que demuestra más desacople, pues esta coyuntura regional parece no afectar a la actividad local. LatinFocus, Itaú, BBVA, entre otros, sostienen esto en sus últimas proyecciones.
En su reciente reporte de FocusEconomics, la consultora internacional que se encarga de hacer análisis económicos del mundo aumentó la proyección de crecimiento del PIB de Paraguay de 4% a 4,1%, mientras redujo para la región latinoamericana. Argumentó que las perspectivas de crecimiento de América Latina para el 2018 se revisaron este agosto con vientos en contra de la incertidumbre política, un contexto global menos favorable y los golpes a la Argentina y las recuperaciones de Brasil influyen en las perspectivas.