En el 2026 el Gobierno nacional destinará más dinero en la gente para que los grupos sociales que están en la pobreza puedan mejorar su situación y alcanzar mejores niveles de existencia. Prevé invertir mayores proporciones de recursos financieros para diferentes proyectos de alcance social. Por esos gastos y otros tipos de erogaciones se prevé un aumento del 12 % en el proyecto de Presupuesto General de la Nación para el año entrante sobre el plan económico que se está llevando a cabo.
Así explicó el ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, cuando entregó el lunes último al presidente del Congreso Nacional, Basilio Núñez, el proyecto de ley que regirá las finanzas públicas el año venidero. Detalló que habrá más dinero para los ministerios de Educación y de Salud, además de los organismos de seguridad, como también para Jubilaciones. Habrá énfasis en los programas Hambre Cero en las Escuelas y Adultos Mayores, que juntos proporcionarán ayuda a cerca de 1.500.000 de personas.
El proyecto financiero alcanza 149,2 billones de guaraníes, la mitad de los cuales, 74,7 billones, es para el Gobierno central, que se financiarán con los ingresos tributarios. La otra porción, 74,5 billones está destinada para los organismos estatales descentralizados, que se manejan con fondos propios.
Un detalle importante es que en el presupuesto venidero se pretende alcanzar el tope del déficit fiscal establecido para la Ley de Administración Financiera, que es del 1,5 % del producto interno bruto (PIB). Será un logro para el equilibrio de las finanzas públicas que no se pudo cumplir en los años golpeados por los desequilibrios ocasionados por la pandemia. Como dijo el ministro Fernández, “esta es una señal de compromiso no solo del Gobierno, sino del país con la sostenibilidad macroeconómica”.
Debido a su preocupación social, el Ejecutivo propone un aumento del 29,3 % para el programa Hambre Cero en las Escuelas, que asciende a 657 millones de guaraníes más, en tanto que el programa de Pensión para Adultos Mayores recibirá un incremento de 383 millones de guaraníes, que constituye un alza del 13,6 %.
Teniendo en cuenta que los escolares beneficiados por Hambre Cero ascienden a 1.050.000 alumnos y que los adultos mayores a quienes se quiere llegar con la ayuda especial son 370.000 ancianos, totalizarán 1.420.000 el número de personas beneficiadas con el aporte del Estado, en esta área. A los que hay que sumar los beneficiarios de otros programas de interés comunitario existentes.
Para mejorar la atención de la salud de la gente que no tiene buenos ingresos, se hará una asignación adicional de 197 mil millones de guaraníes al Instituto Nacional del Cáncer para mejorar la atención oncológica.
Aparte de los recursos destinados a los sectores de inversión social, el proyecto prevé aumentos en el área educativa para financiar el escalafón docente y el reajuste salarial por inflación. Haciendo un análisis rápido de las cifras del proyecto de presupuesto que se está por comenzar a estudiar en el Congreso, se nota un elemento importante. Es la alta preocupación social que demuestra el Gobierno nacional en el aumento de los gastos futuros y el sostenimiento de programas fundamentales para la gente más necesitada.
Haciendo comparaciones, se puede observar que en años anteriores era muy fuerte el porcentaje de recursos públicos que se destinaban a los salarios y otros gastos en desmedro de la inversión social, que en la actualidad tiene una mejor atención por parte del Estado. Faltan aún más beneficios, por lo que en el presupuesto venidero se destinarán más recursos para la atención social, como parte de la política del gobierno actual. Porque el plan de las autoridades es garantizar la continuidad y el fortalecimiento de programas que impactan con fuerza en la calidad de vida de la población, en especial de los sectores menos protegidos.
El Gobierno tiene la ventaja de que las recaudaciones impositivas han aumentado fuertemente y se mantienen en crecimiento mediante la buena gestión de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios. Eso está posibilitando crear programas con más inversiones en la gente y obtener más recursos para hacer frente a los requerimientos sociales. Con el buen crecimiento de la economía y el constante aumento de los ingresos del Estado habrá dinero suficiente para encarar con éxito las necesidades y continuar en alza los proyectos sociales del Gobierno.