El Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) anunció que se concretó por primera vez la exportación de ovinos de la raza Texel a la República Oriental del Uruguay. Con este envío se marca un avance en el posicionamiento internacional de la genética ovina paraguaya y se fortalecen los lazos comerciales de la pecuaria en la región.
Desde el servicio veterinario explicaron que son dos ejemplares provenientes del establecimiento Cabaña La Soñada de San Bernardino los que fueron embarcados al mercado uruguayo. El logro se dio luego de un procedimiento técnico coordinado por el jefe de la Unidad Zonal de Caacupé, doctor Carlos Ortiz.
La raza Texel tuvo una importante evolución por el buen trabajo realizado desde las cabañas. En la actualidad se puede observar un biotipo de animal moderado, con buena línea carnicera y, sobre todo, con precocidad sexual y de terminación.
Posicionamiento de genética
El presidente del Senacsa, José Carlos Martin, había explicado a La Nación/Nación Media que Paraguay pasó de ser un importador de genéticas a un exportador, tras la conquista de varios mercados del continente.
Según explicó Martin, estos logros son el reflejo del compromiso asumido desde la institución desde el 2020. “Fue un punto de inflexión para nosotros como institución porque fue el primer crédito que sacamos del Banco Interamericano de Desarrollo para poder entrar más agresivamente en conquistar mercados”, había recordado.
Desde la Asociación Paraguaya de Criadores de Ovinos (APCO) habían reportado que las razas ovinas más consolidadas y con potencial exportador son Dorper, Hampshire Down, Santa Inés y Texel. El sector ovino paraguayo está en auge, superando lotes de 30 cabezas en exportaciones y consolidando estas razas a nivel internacional en los últimos años.
Sin embargo, si nos fiamos en el crecimiento de las exportaciones de genética animal en este 2025, Paraguay logró consolidar su posición como exportador del sector pecuario en la región. Este año se logró el primer envío de embriones de la raza Boran a Brasil, con un envío de 174 embriones.
También se realizó su primer envío de embriones Brangus a Argentina, marcando un avance en biotecnología.