El Ministerio de Trabajo analiza la revisión del sistema actual de cálculo para el ajuste del salario mínimo, actualmente determinada a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC). El viceministro de Trabajo, César Segovia, confirmó que ya se convocó al Consejo Nacional de Salarios Mínimos (Conasam) para trabajar con la inflación de junio de 2024 a mayo de 2025 como parámetro.
Segovia explicó al programa “Así son las cosas” del canal GEN y Universo 970 AM/Nación Media que es necesario revisar si el sistema vigente refleja adecuadamente la pérdida del poder adquisitivo del salario mínimo legal de los trabajadores y que el IPC actualmente está compuesto en un 27 % en precios de productos relacionados con la alimentación, y el 73 % es una variedad de artículos que no necesariamente está vinculado directamente con la cotidianidad del trabajador promedio .
“El 73 % es una variedad de productos que en algunos casos afectan directamente y otros no tanto al sector asalariado con salario mínimo. Por ejemplo, pasajes de avión y otro artículos que habitualmente no son utilizados por el trabajador”, mencionó.
Según Segovia, el Ministerio de Trabajo “siempre fue partidario” de modificar la normativa, ya que la inflación general no siempre concuerda con lo estipulado en el salario mínimo vigente. En ese sentido, afirmó que realizaron reuniones técnicas con el Banco Central del Paraguay y que se solicitó una cooperación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para conocer experiencias internacionales en la materia.
Igualmente, señaló que convocaron al Conasam para verificar conjuntamente con participación de los sindicatos y centrales de trabajadores el método más adecuado para la evaluación del salario mínimo, tomando como parámetro, en principio, la inflación de junio de 2024 a mayo de 2025.
“En esa instancia se va a estar evaluando la posibilidad de avanzar o no en este proceso de cambio de método o de herramienta de cálculo para el reajuste del salario mínimo”, señaló Segovia.
En la víspera, el ministro de Economía y Finanzas, Carlos Fernández Valdovinos, reconoció que existe un desfasaje entre la suba real del costo de vida y los porcentajes de reajuste salarial registrados en los últimos años.
Además, señaló que, si bien la inflación fue contenida, los precios de los productos, especialmente de los alimentos, no volvieron a bajar, lo que afecta a los trabajadores que cobran salario mínimo, principalmente.