Representantes de la Asociación de Productores de Soja, Oleaginosas y Cereales (APS) participarán los días 17 y 18 de junio de un encuentro con sus pares del Diálogo Internacional de Productores de Oleaginosas (International Oilseeds Producers’ Dialogue, IOPD) en la ciudad de Wismar (Alemania), en que presentarán una defensa de la producción paraguaya ante las exigencias de la reglamentación 1115/2023 de la Unión Europa para las importaciones.
“Vamos a defender al sector de la producción de granos en general, ya que la ley 1115 prevé que todos los importadores de la UE compren productos con rastreabilidad y nosotros sabemos que la soja es imposible de rastrear porque sale del campo con la identidad del propietario y sale el producto mezclado”, explico el presidente de la APS, Eno Michels, a La Nación/Nación Media.
Dicho reglamento prohíbe la comercialización de productos asociados a la deforestación y la degradación forestal hasta el 31 de diciembre de 2020. Los rubros afectados son la carne, el cacao, el café, la palma aceitera, la soja, la madera y el caucho. La IOPD está conformada por asociaciones y gremios de Alemania, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, Estados Unidos, Francia, Inglaterra, Malasia, Paraguay, Polonia, República Checa y UE.
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El titular del gremio local indicó que están luchando para obtener un documento que certifique que en toda la región no se produce granos en tierras deforestadas, ya que la Ley de Deforestación Cero en Paraguay tiene más de 20 de años de vigencia. “Los países que quieren vender sus productos a la Unión Europea tienen que tener la certificación, y nosotros sabemos que Paraguay tiene una ley ambiental muy bien elaborada, rígida inclusive”, acotó.
Michels recordó que Paraguay vende granos de soja en un volumen muy reducido a la UE, pero como cerca del 78 % de la soja paraguaya se industrializa en Argentina, y se comercializa en harina o aceite a la Unión Europa, por lo que es importante que el grano paraguayo tenga certificación ambiental.
“Este es un tema muy amplio y muy delicado también porque va a significar un costo más al productor. Nosotros estamos luchando para ver si se puede hacer algo diferente, que se certifique la región Oriental de Paraguay y que todo el grano producido en esta región tenga un certificado único”, señaló.
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Productores deben revisar contratos que mencionen la ley 1115 de la UE, advierten
Desde la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP) advirtieron a todos los productores sobre algunas empresas que estarían proponiendo contratos que incluyen compromisos con la Reglamentación 1115, Ley de la Unión Europea. En ese sentido, recordaron que no corresponde aplicar una medida extranjera en los contratos de venta firmados en nuestro país.
“Instamos a los productores que revisen y analicen cuidadosamente las cláusulas de los contratos con los que comprometen la venta de su producción de la zafra 2025/2026 antes de firmarlos pues podrían tener asociadas multas, sobrecostos y descuentos importantes aplicados”, indicaron en un comunicado.
Además, mencionaron que aceptar vender o no vender a la Unión Europea (UE) es una decisión libre de cada uno de los productores y no puede ser una ”obligación impuesta unilateralmente a los productores de Paraguay”, que desconocen los alcances de las exigencias de la UE 1115 y los compromisos que implican o simplemente no quieren vender al bloque.
Ante cualquier duda sobre los compromisos que vayan a asumir en los contratos, solicitaron que los productores pidan asesoramiento y explicaciones. “Reiteramos la advertencia a todos los productores de no firmar contratos que incluyan alguna referencia al reglamento 1115 sin comprender plenamente de los compromisos que implican”, enfatizaron.
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Qué implica la Ley 1115
La Reglamentación 1115 de la Unión Europea se trata de una normativa que establece requisitos en cuanto a la sostenibilidad y trazabilidad de productos agrícolas que llegan al mercado europeo, con un enfoque particular en la lucha contra la deforestación.
Con esta normativa el mercado europeo regula el comercio de determinadas materias primas y derivados, cuyo objetivo es evitar el ingreso de productos, específicamente, los que provengan de territorios considerados como deforestados.
Además, exige responsabilidades adicionales en cuanto a documentación, verificación de origen y auditorías que pueden resultar complicadas o costosas, lo que genera preocupación entre algunos productores que desconocen los alcances de la ley o no están preparados para asumir estos compromisos, habían detallado desde la Unión de Gremios de la Producción.
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¿Invertir en agricultura? Las razones para elegir el rubro
Por Melissa Palacios
El sector agrícola en Paraguay exige vocación, conocimiento y perseverancia para quienes buscan emprender en el segmento. Actualmente en el país, entre los rubros agrícolas con mayor potencial de crecimiento se encuentran la soja, maíz, trigo y el arroz, este último con posibilidades de expansión significativa.
En esta edición de Ellos saben, Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), habló con La Nación/Nación Media sobre las principales recomendaciones para emprender en el rubro, el interés de los productores por seguir cultivando, así como las necesidades que enfrentan los agricultores en estos años.
1. Manejo de información
“Para ser agricultor se necesita vocación, conocimiento y perseverancia. Trabajar en el sector agrícola requiere de buena planificación complementada con un manejo correcto de las variables que hacen a la productividad”, empezó diciendo.
Resaltó además que se debe manejar información de clima y mercado, que afectan los resultados y el agricultor no controla, requiere de permanente análisis y manejo de riesgos.
La producción agrícola tiene un comportamiento cíclico de años muy buenos, años regulares y años malos por lo que, para evaluar una rentabilidad se debería analizar por períodos de cinco años y no medir solo el resultado de un año. “Somos eficientes y eso constituye la base de los resultados y de la rentabilidad”, mencionó.
2. Rubros de mayor potencial
En el país existen rubros ya consolidados como soja, maíz, trigo con la rotación de cultivos en la misma parcela que constituyen un combo junto con los abonos verdes y que ocupan en mayor proporción la superficie sembrada; estos rubros aún tienen un potencial de crecimiento importante.
“El arroz tiene un potencial enorme, se siembran unas doscientas mil hectáreas, pero se puede llegar a un millón de hectáreas”, aseguró. Otros rubros en proceso de consolidación y expansión son el sorgo (biocombustible), maní, chía, sésamo y algodón que está en expansión en el Chaco especialmente.
Cristaldo vaticinó que en la medida que no se vea el trabajo del campo como generador de ingresos para llevar una vida digna habrá desestimulo sobre todo entre los jóvenes pequeños productores. No obstante, entre los jóvenes que trabajan en fincas más tecnificadas hay más estímulos para dedicarse al campo, ya sea en forma directa o a través de tareas relacionadas a la prestación de servicio a la producción agropecuaria.
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3. Sostenibilidad en las prácticas
Entre las prácticas agrícolas que se están promoviendo para mantener la competitividad sin comprometer el medio ambiente apuntan al sistema de siembra directa con la rotación de cultivos como práctica de manejo de suelos que se aplica en más del 95 % del área agrícola tecnificada, y constituye el motor del uso y manejo sostenible de los recursos naturales.
“El productor cuida los recursos naturales en su propiedad porque de ellos depende para vivir y producir alimentos para el mundo colaborando con la seguridad alimentaria”, resaltó el presidente de la UGP.
Poniendo en contexto el proceso de 50 años que vivió el desarrollo de la agricultura paraguaya existen tres momentos en su evolución que llevaron al aumento de la eficiencia de la productividad y la producción. En los años 80 la mecanización y tecnificación en la agricultura, los años 90 con la siembra directa y en la década de los 2000 con la introducción y la utilización de variedades mejoradas genéticamente.
En ese lapso pasamos de producir en 1991 unas 2.000.000 de toneladas de granos en cinco rubros a producir 17.000.000 de toneladas en los mismos cinco rubros a partir del 2017.
4. Recursos para iniciar en el rubro
Los principales son: tener profesionales comprometidos con el emprendimiento, recursos humanos capacitados en los roles a desempeñar y un manejo administrativo sólido basado en buena planificación, manejo de riesgos y manejo de información de clima y mercado.
Existen diversos programas, cursos de formación, jornadas de intercambio de experiencia que sirven para mantenerse al día. La sumatoria del conocimiento y de la experiencia es la que permite ir mejorando el manejo y la administración del emprendimiento.
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5. Principales desafíos
Existen desafíos internos y externos. Internamente el prejuicio de ciertos sectores en relación a la actividad agropecuaria, las regulaciones y normas que frenan el desarrollo, según Cristaldo, la burocracia y la consolidación del proceso de incorporación de los pequeños productores a las cadenas de valor.
Externamente, la tendencia a imponer unilateralmente normas y exigencias no basadas en ciencia que distorsionan el comercio creando barreras no arancelarias y dejando de lado las normas y acuerdos logrados en la Organización Mundial del Comercio o el Código Alimentario.
“Quienes trabajan en la economía familiar campesina necesitan oportunidades y no regalos ni ayudas que lo vuelvan cliente del Estado”, dijo, asegurando que necesitan ser actores y sujetos del proceso y no objetos del desarrollo y la política.
6. Incorporar más políticas públicas
Las políticas públicas deberían enfocarse en incorporar a la economía real generando ingresos genuinos al productor para poder salir de la pobreza. “No se puede seguir teniendo como paradigma el mboriahu ryvata (pobre, pero sin hambre)”, puntualizó.
Infraestructura rural: con fuerte inversión en caminos rurales, electrificación, riego y acceso al agua potable (necesidad impostergable) y conectividad digital para mejorar la competitividad del sector.
Acceso al crédito y financiamiento diferenciado: creando líneas específicas para pequeños productores y nuevos emprendedores rurales, con tasas bajas y plazos adecuados a los emprendimientos definidos, inversiones, capital operativo con los períodos de espera correspondientes.
Educación, capacitación y asistencia técnica en el segmento de productores de menos de 50 hectáreas, ya que según el último censo agropecuario, el 84 % no recibe asistencia técnica y el 62 % no terminó la educación escolar básica.
Acceso a tierras y formalización con fuerte apuesta por la titulación de las tierras destinadas a la reforma agraria, donde cerca de dos millones de hectáreas entregadas hace décadas siguen sin ser regularizadas. Organización y capital social: el proceso de formalización sectorial debe extenderse a las organizaciones y asociaciones de productores que hoy se unen “ocasionalmente” para demandar algún bien o servicio al Estado.
7. Reglas claras
“En un escenario tan dinámico y cambiante a nivel global, con episodios externos de alto impacto en economías pequeñas como la nuestra, tan dependiente de los ingresos generados por la actividad agropecuaria, la economía y la política deben ir de la mano, con reglas claras y un mínimo de previsibilidad”, alegó.
Por último, sería indispensable contar en el mercado con ferias y cadenas de valor, pues si todo lo anterior estuviese en marcha, se requerirán programas claros de acceso a mercados locales, participación en ferias agropecuarias y vínculos progresivos con cadenas de valor nacionales con alto potencial de desarrollo.
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Importación de materias primas creció 34 % en el primer semestre
Las importaciones realizadas bajo el régimen de materia prima alcanzaron los USD 271 millones al cierre del primer semestre del 2025, con un aumento del 34 % en comparación con el mismo periodo del año anterior, de acuerdo con el Ministerio de Industria y Comercio (MIC).
En los primeros seis meses del año se autorizaron 3.375 solicitudes de importación, cifra que representa un incremento del 24 %. Solamente en junio, las importaciones autorizadas sumaron USD 48 millones, con más de 687 solicitudes aprobadas que beneficiaron a 149 industrias.
En mayo pasado, las importaciones de materia prima alcanzaron USD 223 millones, con un incremento interanual del 49 % frente a mayo de 2024 y fueron autorizadas importaciones por valores de USD 48 millones.
En junio, el 76 % del total de las importaciones se concentró en los sectores metalúrgico, químico-farmacéutico, maquinarias y productos eléctricos. También se observaron adquisiciones importantes en la fabricación de textiles, productos de tabaco, papel, alimentos y bebidas.
China e India son los principales países de origen de estas importaciones, representando el 77 % del volumen total autorizado. Les siguen Estados Unidos con 5 %, España y Turquía ambas con 2 %.
Asimismo, refieren que hasta junio 251 empresas se beneficiaron con este régimen, con un 69 % perteneciente a los sectores metalúrgico, químico-farmacéutico, caucho y plástico, papel y alimentos y bebidas. Más del 90 % de las empresas están ubicadas en el departamento Central, seguido por Alto Paraná y Capital.
En su reporte, el MIC afirma que este crecimiento en las importaciones de materia prima indica una fuerte demanda de insumos para la producción local, sugiriendo un dinamismo creciente en la actividad productiva del país y un indicador positivo para el desarrollo económico general.
La expectativa de la cartera estatal es que este incremento se traduzca en un aumento de la producción nacional, la generación de empleo y una mayor competitividad de las industrias locales.
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Importaciones de vehículos y camiones nuevos crecieron 15 % en el primer semestre
Entre enero y junio de 2025, las importaciones del sector automotor correspondientes a vehículos y camiones nuevos registraron un crecimiento acumulado del 15 %, en comparación con el mismo período del año pasado, según informó la Cámara de Distribuidores de Automotores y Maquinarias (Cadam).
De acuerdo al informe del gremio, se importaron 16.850 vehículos livianos, frente a las 14.641 unidades que se importaron en el 2024, mientras que las compras de camiones y ómnibus alcanzaron 939 unidades en junio, cerrando el semestre con una baja acumulada del 3,4 %, teniendo en cuenta las 973 del año pasado.
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Por tipo de vehículos, los SUV camionetas cerradas lideraron el mercado con 9.497 unidades, significando un aumento del 20 % frente a las 7.923 del mismo periodo pasado, y una participación del 56 % en el total importado del mes de junio.
Le siguieron las camionetas tipo pick up con 3.792 unidades, representando una leve caída del 6 %, en la comparación del gremio, ya que de enero a junio del año anterior fueron 4.035.
En cuanto a los automóviles, estos totalizaron 2.977 unidades, un crecimiento del 30 % y una participación del 17 % en el mercado, ya que en el 2024 se importaron 2.290 unidades. También los furgones mostraron un aumento interanual acumulando del 54,6 %, mientras que los ómnibus registraron un incremento del 171 %.
Vehículos híbridos y eléctricos
En el primer semestre del año, Cadam mencionó que las importaciones de vehículos híbridos y eléctricos crecieron 83 %, en comparación con el periodo anterior, pasando de 833 a 1.522 unidades en 2025.
“El mayor salto lo dieron los híbridos enchufables con un crecimiento del 237 %, seguidos por los eléctricos que aumentaron 123 %”, resaltaron. Además, se importaron híbridos no enchufables, unas 776 unidades y una participación del 51 % del mercado.
Como proyecciones, el gremio estimó que durante este año 2025, las exportaciones de vehículos llegarían a unas 38.000 unidades, lo que representa un crecimiento de aproximadamente 10 %, respecto al año anterior.
“Se calcula además que este mismo este comportamiento se verá reflejado en las importaciones de camiones que alcanzarían 2.200 unidades con un crecimiento también del 10 %”, mencionaron.
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