Según el reciente informe habilitado por la Subsecretaría de Estado de Economía (SSEE), del Ministerio de Hacienda, respecto a los datos macroeconómicos del país, de enero a abril de este año, Paraguay registró un 11 % más de crecimiento en su comercio exterior en comparación al mismo periodo del 2022.

Esto, debido a que la sumatoria de las exportaciones como de las importaciones, o comercio global, durante el primer cuatrimestre, totalizó USD 8.725 millones frente a los USD 7.857 millones del mismo periodo del año anterior, conforme al Reporte de Comercio Exterior (RCE).

No obstante, realizando el desglose se encuentra que las exportaciones fueron menores, con USD 3.894 millones, que las importaciones que registraron USD 4.831 millones, es decir, una balanza comercial negativa o deficitaria, con USD 937 millones de diferencias con las mayores compras que ventas del país.

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Paraguay exportó USD 3.894 millones, mientras que importó por USD 4.831 millones, en el primer cuatrimestre. Foto: Archivo

Déficit fue menor

En este punto, se observa a la vez que dicha balanza deficitaria fue menor que lo registrado en 2022, USD 1.733 millones, comparando los cuatro primeros meses de 2021, y situándose el año anterior con la mayor diferencia negativa de los últimos 5 años o de más importaciones que exportaciones.

El informe también señala que las exportaciones de enero a abril de este año fueron 27,2 % superiores a los de 2022, siendo el Mercosur el principal destino con el 75,2 % de participación, de un total de 127 países, aunque 4 menos que el año anterior.

El principal socio comercial del país en las exportaciones es Argentina, seguido de Brasil, Chile y Estados Unidos en cuarto lugar. En tanto que, en las importaciones, el principal aliado comercial es China, le sigue Brasil, EE. UU., Argentina y en menor proporción Chile.

Respecto a los principales productos comercializados, se encuentran las habas, porotos y semillas de soja, también el maíz y el arroz, y los 5 principales representan el 71,6 % del total de los envíos. Le siguen las demás semillas oleaginosas, alcohol etílico sin desnaturalizar, energía eléctrica, hilos y cables de electricidad, así como carne bovina, harina y aceite de zona, aunque estos 3 últimos con variaciones negativas.

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