El comportamiento del precio del petróleo sigue generando debates y negociaciones en rubros de sus derivados ante reajuste en el precio y posibles subas. Desde la Cámara Paraguaya de Gas (Capagas) siguen de cerca el movimiento de la cotización del crudo, que podría afectar al mercado interno del gas licuado de petróleo (GLP).

Las conversaciones entre el Equipo Económico dejó positivos resultados ante la suba en los precios del combustible tras el renunciamiento a beneficios tanto en el sector público como el privado. En el caso del rubro del gas, desde el gremio aseguran que nada está dicho y que dependen del precio internacional que sigue inestable.

“Realmente la expectativa está un poco difusa por lo volátil que está el precio del petróleo y, por supuesto, el precio de sus derivados, que en este caso sería el gas. Hoy está alrededor de 700 dólares el costo, subió una barbaridad”, manifestó en comunicación con La Nación Pedro Balotta, titular de Capagas.

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Si bien las consecuencias ya se sintieron en otros derivados, Balotta indicó que por el momento el gas no experimentará ningún reajuste debido a que cuentan con un stock actual que permite seguir manteniendo el precio en el mercado interno. No obstante, no descartó que con el pasar de los días tengan que analizar esa posible suba en el caso de que el petróleo no denote mejoras en su precio.

“Creo que el stock que tenemos da para el 20 de febrero aproximadamente y a partir de ahí ver si tengamos que meter mano en el bolsillo y eso va a tender a un ajuste. Estamos viendo la posibilidad de que en este tiempo también pegue una reculada en el precio internacional de tal manera que podamos sostener los precios actuales”, manifestó.

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Pese a que el rubro por el momento queda expectante al comportamiento del precio internacional del petróleo, empiezan a manejar datos sobre las posibles subas, que someterán a análisis con todo el gremio. En el caso de que se dé, supondrá un nuevo efecto negativo a la canasta familiar, que ya venía experimentando alzas con los precios de los alimentos.

“Entre G. 500 y G. 700 sería el reajuste en el caso de que se dé, que se podría definir después del 20 más o menos. Por supuesto, vamos a estar informando antes como siempre hicimos. Vamos a dar la información con mucha antelación”, aclaró Balotta a La Nación.

Asumió el compromiso de que siguen trabajando para la distribución racional del producto en todo el país para que pueda sostenerse el precio durante el mencionado periodo. Recalcó que por el momento no habrá ningún reajuste en el gas licuado de petróleo (GLP).

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