De acuerdo a datos preliminares, el Estimador de Cifras de Negocios (ECN) ha registrado una variación interanual de -0,2%, con lo cual la variación acumulada se ha ubicado en -1,4%, según el Banco Central del Paraguay (BCP).
Por su parte, el promedio móvil tres meses ha observado una variación interanual de -1,2%. El resultado interanual se explica por la retracción en las ventas que se han registrado en los sectores de servicios y comercio, que fue compensado por las dinámicas favorables que se han verificado en las ventas de varias ramas de la industria manufacturera.
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En el sector servicios se han observado reducciones en las ventas de los sectores de hoteles y restaurantes, servicios a las empresas y transportes. Por su parte, las telecomunicaciones nuevamente han sido la única rama con variación positiva.
En la actividad comercial, se han verificado caídas en las ventas de prendas de vestir, dispositivos tecnológicos, productos químico-farmacéuticos, vehículos y combustibles. Por el contrario, han presentado incrementos las ventas de insumos agrícolas y pecuarios, alimentos y productos para el equipamiento del hogar.
Por último, en la industria manufacturera se han destacado los buenos desempeños de las ventas de las ramas productoras de metales comunes, productos metálicos, carne, aceites, bebidas y tabaco y molinería y panadería. Sin embargo, las ventas de cuero, maquinarias y equipos, productos químicos y papel han reflejado comportamientos adversos.
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CIE, acostumbrada a vencer imposibles
Por: Adelaida Alcaraz
Adaptándose a los nuevos tiempos que llegan con desafíos más grandes y mayores inversiones, la empresa, presidida por Eduardo Borgognon, demostró con hechos que puede cumplir con una precisión milimétrica cualquier proyecto, sin límite de volumen o peso.
Con su eslogan “La capacidad de hacer”, el CIE S.A. resume todo lo que representa. Y cuando uno conversa con Eduardo Borgognon, presidente de la compañía, se tiende a esbozar el potencial casi ilimitado que esta industria nacional representa y que, a veces, ni los propios paraguayos alcanzan a dimensionar.
Con 18 años en la empresa y una trayectoria vasta en el mundo de los negocios, Eduardo lidera uno de los complejos industriales más avanzados de la región, una planta instalada en Luque que es, a la vez, símbolo de ingeniería avanzada, orgullo nacional y proyección al futuro.
Días atrás, este ingenio fue escenario de un recorrido inédito que sirvió para que autoridades nacionales, empresarios, diplomáticos, inversionistas y alumnos de universidades tuvieran la oportunidad de constatar de primera mano que en Paraguay se puede hacer lo que parece imposible. Y es que CIE no solo forma parte de la historia de Itaipú y Yacyretá; también fabrica remolcadores y barcazas, construye subestaciones, líneas de transmisión eléctrica, estructuras metálicas y montaje industrial, y ha exportado piezas a más de 16 países de cuatro continentes.
“CIE nació en 1978, hace ya 47 años, en el marco de la construcción de Itaipú”. Así comenzó el relato Eduardo, quien recibió en la planta industrial al equipo de FOCO para protagonizar un recorrido exclusivo por las instalaciones. Contó que, en ese entonces, poco más de 300 empresas paraguayas participaron en las obras y que hoy, lastimosamente menos del 10 % de esas compañías siguen vigentes. “No solo participamos, sino que supimos capitalizar esa experiencia y convertirla en una empresa que se mantuvo en el tiempo y que fue evolucionando tecnológicamente”, reveló.
Tras el trabajo hecho para Itaipú, la compañía también tuvo una participación clave en Yacyretá, pero como la competencia ya era internacional tuvieron que participar de una licitación y pugnar por un espacio contra empresas austriacas, alemanas y hasta japonesas. “Ahí fuimos creciendo tecnológicamente, haciendo piezas de gran envergadura, metalmecánicas, pero cada vez con mayor precisión y nivel de complejidad. Esa experiencia local, sumada al trabajo con gigantes internacionales como Toshiba, Voith, Andritz, Siemens, General Electric y otras, nos permitió salir al mundo”, mencionó con orgullo.
Una tornería gigante. CIE ha fabricado piezas de hasta 200 toneladas con una precisión de una décima de milímetro. “Para dimensionarlo, un automóvil pesa alrededor de una tonelada y media, por lo que estamos hablando de piezas que representan el peso de 100 o 150 autos, pero con una tolerancia más fina que un papel. Y eso requiere de muchísima tecnología, inversión en maquinaria y, sobre todo, gente capacitada”, refirió el presidente
Agregó que “hablando mal y pronto, es una tornería gigante”. En la planta industrial tenemos una prensa con capacidad de 2.000 toneladas que se utiliza para deformar chapas. Solo así se puede trabajar con espesores impresionantes. “No es solo cortar, plegar y soldar. Después viene el mecanizado, que es lo que da precisión. Y todo eso lo hacemos con control numérico, es decir, computarizado”, contó.
El nivel de exigencia es tal que deben fabricar piezas que se ensamblan en condiciones climáticas y geográficas completamente distintas. “Hacemos una pieza en Luque, con 80 % de humedad y 30 grados, que luego debe encajar con otra hecha en Japón a 18 grados y con 30 % de humedad, y ambas deben coincidir a la perfección en el sitio de obras ubicado en una montaña de Canadá a 2.800 metros sobre el nivel del mar y con -15 grados. Esa pieza tiene que coincidir. Así de rigurosa es la industria donde trabajamos”, enfatizó Eduardo.
Diversificación estratégica. La compañía se reinventó cuando el mercado de las grandes hidroeléctricas empezó a decaer. “Hoy se habla mucho de pequeñas centrales hidroeléctricas. Tenemos la tecnología y la capacidad para hacerlas en Paraguay, sin necesidad de importar. Eso significa ahorro en fletes, más empleo local y más competitividad”, explicó.
Desde 1988, la empresa también incursiona en la hidrovía Paraguay-Paraná, la tercera más importante del mundo en volumen. “Vimos que las barcazas venían usadas desde Estados Unidos y decidimos fabricarlas nosotros mismos, adaptando el diseño a las condiciones de nuestro río. Así, aunque nuestra planta no esté sobre el agua, fabricamos módulos que luego se ensamblan y botan al río desde un astillero que pertenece a nuestro grupo empresarial”, explicó.
Remolcadores, barcazas para granos o combustibles, contenedores, incluso minerales de hierro provenientes del Brasil; CIE produce todo eso. Pero también participa en la transmisión de energía. “Somos la única empresa paraguaya que ha montado hasta ahora líneas de 500 kV. Hacemos líneas de transmisión, subestaciones, y estructuras metálicas tanto para industrias como para edificaciones. Lo que uno ve en una fábrica -los soportes de tanques, ciclones, cañerías- también los hacemos nosotros”, precisó.
El poder de formar talento local. Otro aspecto llamativo es la capacidad de empleo que tiene CIE. Hoy día la firma emplea a unas 600 personas, incluyendo un staff técnico de alrededor de 100 ingenieros. Pero lo más destacado es su política de formación. Ellos cuentan con una escuela propia de soldadura y montaje para que la gente que entra a trabajar a la fábrica sin saber nada, vaya creciendo ocupando cargos de supervisión, leyendo planos, liderando equipos. “Capacitamos para nosotros y también, en cierto modo, para el mercado. Ese es el costo del liderazgo”, expresó entre risas.
El promedio de antigüedad de los técnicos supera los 17 años, dijo. Además, la empresa tiene programas de becas para hijos de funcionarios y planes sociales. “Algunos no terminaron el colegio, y nosotros les ayudamos a hacerlo. Ya tenemos la primera camada de egresados universitarios gracias a estas becas”, precisó Eduardo.
Montaje, logística y precisión quirúrgica. Otra de las fortalezas de CIE es la logística y el montaje industrial. Al respecto, el presidente explicó que han montado el 100 % una planta cementera en Paraguay, aunque los equipos hayan llegado de China. “Nosotros recibimos, transportamos, montamos y hacemos funcionar esos equipos. Desde el montaje mecánico, eléctrico y electrónico hasta la puesta en marcha”, indicó.
También dijo que brindan servicios más pequeños: “Un rodillo roto en una fábrica no puede esperar al igual que una hélice dañada de un barco. Para estos casos tenemos una unidad de mantenimiento que opera 24/7. Y así como hay proyectos de USD 15 o de USD 20 millones, también hay otros de menor inversión. Nos adaptamos a todo. “Somos prestadores de soluciones”, recalcó.
Como anécdota recordó que en su recorrido internacional, incluso llegaron a exportar piezas por vía aérea. “Enviamos una pieza a Suecia en un Antonov ruso. Tuvimos que evaluar la pista de aterrizaje del Silvio Pettirossi para asegurarnos de que soportara el peso. Así de lejos llega nuestra creatividad logística”, relató Eduardo.
Calidad certificada y mirada al futuro. Como toda empresa que lidera su sector, en CIE la calidad no es negociable. “Fuimos la primera firma en Paraguay en certificar la norma ISO 9000. Eso nos viene de Itaipú y se volvió parte de nuestro ADN. Somos muy rigurosos con la calidad”, destacó Eduardo Borgognon.
Ese mismo rigor se refleja en los proyectos actuales. En el marco de un contrato con Yacyretá, CIE está entregando componentes fundamentales para la intervención de seis de las veinte turbinas de la represa. “Estamos proveyendo el sistema de regulación de potencia, que permite controlar la entrada del agua a la turbina. Son piezas que, en conjunto, pesan 450 toneladas. Todo se ensambla aquí en Luque, se testea con tecnología de láser óptico y luego se desmonta para su traslado al sitio de obras”, explicó.
Para lograr esta escala operativa, la planta cuenta con capacidad para funcionar 24 horas, aunque actualmente lo hace en dos turnos: diurno y nocturno. Disponen de procesos de soldadura automáticos, semiautomáticos y manuales, además de tecnologías avanzadas como la soldadura por arco sumergido, que agiliza enormemente la productividad.
En el pabellón C se fabrican módulos estructurales -de fondo, costado, proa y popa- que son transportados en camión hasta el astillero Chaco, en Villa Hayes, donde se ensamblan las barcazas. “Hoy estamos produciendo dos modelos de barcazas, tipo Jumbo y Mississippi. Toda la mano de obra es 100 % paraguaya y proviene de distintas regiones del país”, remarcó Eduardo y dijo también que la planta opera con grúas que, combinadas, tienen capacidad para mover hasta 100 toneladas dentro del complejo.
La fábrica se organiza en sectores especializados, por un lado, están los de montaje y soldadura, mecanizado, corte y deformación plástica, pintura y granallado. En el área de mecanizado se encuentran tornos y fresadoras de gran porte, con las que se procesan componentes de turbinas. “Contamos con un área interna que realiza el mantenimiento preventivo y correctivo de todo el equipamiento”, precisó.
La formación técnica es un pilar esencial. Cada operario pasa por la escuela de soldadura del CIE, donde se capacita desde cero. Tras una certificación interna, se integra al proceso productivo. Si el proyecto lo requiere, se gestionan certificaciones específicas. “Se trata de un programa anual de formación individualizado, que se actualiza cada año según las necesidades de cada sector”, explicó el presidente.
En pintura, CIE opera con cabinas climatizadas, lo que permite garantizar la calidad del acabado sin depender de las condiciones climáticas. “La aplicación de pinturas técnicas requiere controlar factores como temperatura, humedad y punto de rocío. Nuestros pintores están altamente calificados y aplican pinturas específicas, según lo exige cada cliente, sobre todo en el rubro naval”, explicó.
También se realizan tratamientos térmicos como el alivio de tensiones, un paso fundamental para componentes hidroeléctricos. “Este tratamiento mejora el rendimiento del mecanizado y evita deformaciones posteriores”, agregó.
Más allá de la planta en sí, el CIE se organiza por unidades de negocio: servicios (alquiler de grúas y transporte especializado), líneas y subestaciones eléctricas, y obras civiles e industriales. “Todas estas unidades operan desde este mismo complejo industrial”, detalló Eduardo.
En cuanto al procesamiento de materia prima, la planta cuenta con equipos de corte por plasma y oxicorte para el tratamiento de chapas. “El aprovechamiento del material lo diseña el área de ingeniería, maximizando cada chapa y optimizando los costos”, explicó. Aquello que no puede reutilizarse se clasifica como chatarra y se comercializa con empresas habilitadas ambientalmente.
La división de industrias e infraestructura dispone de maquinaria de alta capacidad para trabajar perfiles de alma llena -comunes en obras civiles- y procesar chapas de hasta 85 milímetros de espesor, indispensables en proyectos hidroeléctricos.
Cada etapa está sometida a estrictos controles de calidad, llevados adelante por técnicos calificados bajo la norma estadounidense SNTTC-1A. “Nuestro equipo de calidad supervisa desde el corte inicial hasta la soldadura final, asegurando que cada pieza cumpla con los más altos estándares internacionales”, afirmó.
El recorrido por la planta concluye con una visión clara: grúas monumentales, maquinaria de última generación, y una estructura capaz de abastecer las industrias más exigentes. “Estamos preparados para responder tanto al mercado nacional como a proyectos internacionales de gran envergadura. Esa fue la visión que dio origen al CIE y que hoy lo convierte en un verdadero motor de la industria paraguaya”, puntualizó con convicción.
El futuro se construye hoy. Como un dato no menor, Eduardo también mencionó que CIE ya está trabajando con empresas interesadas en proyectos de biocombustibles, hidrógeno verde y celulosa. “Paraguay está recibiendo inversiones de cientos de millones de dólares, algo inédito para nosotros. Y esas inversiones necesitan un aliado local. No como socio, pero sí como facilitador, alguien que ayude a aterrizar esos proyectos de forma eficiente. Ahí entramos nosotros”, reflexionó.
Con una cultura organizacional que apuesta al talento local, una infraestructura de clase mundial y un liderazgo técnico de excelencia, CIE no solo mira al futuro, sino que lo está construyendo. Y es que Paraguay se está convirtiendo en receptor de inversiones, y ellos están en condiciones para acompañar esos desafíos. “La historia nos trajo hasta aquí. Ahora, vamos a mostrarle al país y al mundo lo que podemos hacer”, aseguró con la tranquilidad de la empresa que, con hechos, desde hace décadas marca una huella de progreso imborrable.
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Industria y servicios se perfilan para potenciar el mercado de valores en Paraguay
En el marco de la presentación de los datos del mercado de valores del primer semestre de 2025, el economista César Paredes analizó la composición y el futuro del rubro. Según explicó, el mercado sigue dominado por el sector financiero, pero esto podría cambiar en los próximos años con el crecimiento de los sectores productivos, servicios e industriales.
“El sector financiero hoy pesa mucho, pero su participación se irá diluyendo a medida que se sumen más empresas de otros rubros”, señaló a La Nación/Nación Media. Paredes destacó que Paraguay vive un proceso creciente de industrialización. Cada vez surgen más proyectos y productos elaborados localmente, lo que se refleja tanto en la actividad económica como en el interés de inversionistas.
Inversión extranjera
Para el economista, el rol de la inversión extranjera ha sido clave en este proceso. Dijo que a lo largo de la historia, los extranjeros trajeron tecnología, conocimiento, que los empresarios locales fueron aprendiendo y perfeccionando lo que ellos mostraron.
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El economista afirmó que gran parte de la inversión extranjera que llega al país es de carácter industrial, especialmente porque Paraguay ofrece un entorno atractivo para la producción destinada a la exportación. “No tenemos un mercado interno muy grande, así que las industrias extranjeras suelen instalarse aquí para producir y vender afuera, a mercados que ya conocen”, expuso.
En su análisis, Paredes mencionó el impacto de la situación argentina en el crecimiento de la industria local. Recordó que durante un tiempo, Argentina se benefició de tener costos en pesos y ventas en dólares, pero hoy esa ventaja se redujo. Esto llevó a muchas empresas extranjeras a mirar a Paraguay como una alternativa más competitiva.
También remarcó que esta tendencia puede verse reflejada en los próximos años dentro del mercado bursátil, a medida que se sumen nuevas industrias y servicios al sistema de financiamiento local. Según Paredes, esto contribuirá a diversificar la economía y a reducir el peso del sector financiero dentro de la bolsa.
Finalmente, el economista dijo que el mercado de valores nacional se encuentra en una etapa de transición, donde los sectores productivos y de servicios podrían ganar protagonismo y acompañar el proceso de industrialización que ya está en marcha.
Primer semestre
La Bolsa de Valores de Asunción (BVA) cerró el primer semestre del año con un volumen de negociados de G. 27 billones, unos USD 3.434 millones, lo que implica un incremento del 26,76 % comparando con el acumulado del mismo período de 2024.
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Según el BCP, las transferencias interbancarias fueron restablecidas
El Banco Central del Paraguay (BCP) informó que el Sistema de Pagos Instantáneos (SPI) ya se encuentra normalizado luego de varias horas de servicio intermitente. No se explicó desde la banca matriz la razón de dicho percance que afectó las transferencias interbancarias.
Luego varios reportes de la ciudadanía con respecto a problemas a la hora de realizar transferencias durante este sábado, el BCP comunicó a las 16:40 que el Sistema de Pagos Instantáneos del Sistema de Pagos del Paraguay (Sipap) experimentaba “intermitencias” y que se estaba trabajando en su restablecimiento.
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Casi dos horas después, a las 18:20, la banca matriz nuevamente comunicó en su red social X que el SPI fue restablecido, pero sin comunicar la causa que provocó el mal funcionamiento.
Bancos privados también comunicaron desde sus respectivas redes sociales que la problemática les afectó, pero que se limitó a aquellas operaciones interbancarias, no así a aquellas realizadas entre sus propios clientes.
Si bien desde el BCP afirmaron la regularización del sistema, varios usuarios a través de las redes sociales continuaron reportando fallas a la hora de realizar o recibir transferencias.
El pasado miércoles 2 de julio también ocurrió un hecho similar, ocasión en la que el BCP argumentó inconvenientes técnicos.
Transferencias, método de pago cada vez más utilizado
Desde el BCP habían reportado que las transferencias en el SPI experimentan ritmos acelerados de crecimiento interanual, lo que sugiere que esta herramienta es cada vez más utilizada como medio de pago por parte de la ciudadanía.
Entre enero y abril de este año se realizaron más de 90 millones de transferencias con un valor acumulado de G. 232,8 billones, que implica un crecimiento del 28 % comparado con el primer cuatrimestre del año anterior.
Al cierre de mayo, el Sistema de Pagos Instantáneos (SPI) del Sistema de Pagos del Paraguay (Sipap) registró más de 114 millones de operaciones, moviendo un volumen de dinero de G. 47 billones.
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Créditos en moneda extranjera fueron levemente más caros en mayo
Las tasas de interés activas en moneda extranjera cerraron mayo con un promedio del 7,94 %, porcentaje levemente superior al 7,89 % visto en abril pasado, pero inferior al 8,56 % de mayo de 2024, según el informe de Indicadores Financieros del Banco Central del Paraguay (BCP). Los créditos para consumo y vivienda tuvieron reducciones en sus tasas, a diferencia de los destinados al comercio y el desarrollo.
De acuerdo con el BCP, los créditos para consumo en moneda nacional cerraron mayo con una tasa de interés promedio 8,55 %, inferior en un -0,52 % con respecto a abril y su tasa promedio del 9,07 %, pero superior en un 0,45 % a la tasa del 8,10 % registrado en mayo del año pasado.
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Dentro de los créditos de consumo, no obstante, en las empresas financieras se notó un incremento de las tasas promedio en torno al 0,05 % mensual, siendo en mayo la tasa activa promedio del 9,23 %, mientras que en los bancos fue del 8,38 %, con variación negativa tanto mensual como interanual.
Los créditos para el comercio aumentaron en términos mensuales, con una tasa activa promedio al cierre de junio del 7,92 %, cifra superior en un 0,11 % al 7,81 % de abril pasado, pero -1,11 % inferior a la tasa promedio de mayo de 2024, que fue del 9,03 %.
En los préstamos para la vivienda se observaron caídas mensuales e interanuales en las tasas activas promedio. En junio la tasa se ubicó en 7,91 %, lo que representa una reducción mensual del -0,87 % en comparación con la tasa del 8,78 % de abril, e inferior en un -1,79 % a la tasa del 9,70 % de mayo del año anterior.
Los créditos para el desarrollo tuvieron un leve aumento tanto mensual como interanual, con una tasa de interés a mayo del 7,93 %. Tal porcentaje es 0,05 % mayor que la tasa de interés del 7,88 % del mes anterior y 0,09 % superior al 7,84 % de mayo de 2024.
Los sobregiros en moneda extranjera cerraron mayo con una tasa de interés promedio del 7,94 %, lo que implica una reducción mensual del -1,02 % comparando con la tasa del 8,83 % de abril pasado y -2,14 % versus la tasa del 9,95 % vista en el mismo periodo del año pasado.
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