- México, México. AFP.
La izquierdista Claudia Sheinbaum fue elegida como la primera presidenta de México con una abrumadora ventaja, en una elección calificada de “histórica” por líderes mundiales y por su padrino político, el saliente mandatario Andrés Manuel López Obrador.
Sheinbaum, una científica de 61 años de origen judío, obtuvo entre el 58 % y 60 % de los votos, según el conteo rápido del Instituto Nacional Electoral (INE). México comenzó una nueva etapa tras la elección de Sheinbaum, un hito celebrado por millones en el mundo, pero que también inquieta a sus adversarios ante la creciente hegemonía de la izquierda. La nueva mandataria tendrá el enorme desafío de contener la violencia del narcotráfico y de género, que mata a unas 30.000 personas al año.
“No les voy a fallar”, dijo Sheinbaum a los mexicanos, emocionada y sonriente. Por su parte López Obrador, el primer presidente de izquierda de México y su padrino político, celebró el triunfo como “un hecho histórico” y “glorioso”, al tiempo que confirmó que tras entregarle el mando, el próximo 1 de octubre, dejará la política.
“Me voy a retirar con muchísima satisfacción, voy a poder decir cuando le entregue la banda a Claudia, ‘misión cumplida’, y jubilarme”, dijo el mandatario de 70 años, cuya popularidad de más de 60 % fue clave en el triunfo de Sheinbaum, según analistas.
El oficialismo también conservó el gobierno de Ciudad de México, su bastión hace casi 30 años. Los mercados reaccionaron con una depreciación del peso mexicano de 4,3 % a 17,7 unidades por dólar, según cifras de Banxico (central), frente a 16,96 del viernes pasado. La bolsa se desplomó un 6 %.
Sheinbaum enfrenta el reto de mantener las ayudas directas de AMLO para jóvenes y ancianos, pero hereda un déficit fiscal de casi 6 % del PIB y un bajo crecimiento. Por eso, ayer lunes la nueva presidenta trató de tranquilizar a los mercados al aclarar que practicará la “austeridad republicana” pregonada por López Obrador, así como la “disciplina financiera y fiscal”.