Breda, Países Bajos. AFP.
Los neerlandeses podrán consumir cannabis legalmente por primera vez en dos ciudades del sur del país, en el inicio de una prueba de varios años que despenaliza la producción y suministro de esta droga en los famosos “coffeeshops”.
Al contrario de la creencia popular en el extranjero, la venta y consumo de hachís, hierba y sus derivados no son legales en Países Bajos, que desde hace décadas atrae a fumadores de cannabis del mundo entero.
Desde los años 1970, las drogas blandas son “toleradas” y “las autoridades optaron por no perseguir a los infractores”, según la página web del gobierno. Hasta ahora ha sido totalmente ilegal cultivar cannabis en Países Bajos o suministrarla a los populares establecimientos de venta y consumo.
Por ello, toda la cadena de suministro de cannabis de los cerca de 570 “coffeeshops” en el país ha funcionado en la clandestinidad durante décadas, mientras que las autoridades locales se han quejado de la pequeña delincuencia y el comportamiento antisocial.
El experimento de cuatro años, que busca resolver esta “zona gris” jurídica, comienza en las ciudades sureñas de Breda y Tilburgo, y se prevé extenderlo a otras regiones del país.
Es un “momento histórico”, dijo el ministro de Salud, Ernst Kuipers, mientras observaba como llegaba la primera entrega de cannabis legal al “coffeeshop” Baron en Breda.