Sudáfrica. AFP.
Un nuevo balance elevó ayer a 253 el número de muertos en Sudáfrica por las devastadoras inundaciones causadas por intensas lluvias en la costa este del país, donde las autoridades se enfrentaban a un gran flujo de cadáveres en las morgues. Las lluvias más intensas en más de 60 años han dejado paisajes devastados, con puentes derrumbados, deslizamientos de tierra y carreteras sumergidas en torno a la ciudad portuaria de Durban, primera urbe de Kwazulu-Natal (KZN, este) y epicentro de la catástrofe.
“Nuestras morgues están sometidas a presión. Ayer, tarde durante la noche, recibimos unos 253 cuerpos en dos morgues distintas” de la ciudad, declaró en una entrevista televisada Nomagugu Simelane-Zulu, representante del departamento de Salud de la provincia. Decenas de personas están desaparecidas, y los socorristas hablan de una “pesadilla”.
Las precipitaciones obligaron al puerto, el más importante del África subsahariana, a interrumpir sus operaciones, ya que la principal carretera de acceso sufrió graves daños. Los contenedores de transporte quedaron tirados, convertidos en montañas de metal.