Río de Janeiro, Brasil. AFP.
El desempleo en Brasil retrocedió por octavo mes consecutivo y se ubicó en 11,6% en el trimestre septiembre-noviembre, según datos oficiales divulgados este viernes.
La tasa de desocupación, la más baja registrada por el Instituto Brasileño de Estadística (IBGE) desde enero del 2020 (11,4%), antes de la pandemia (que ha dejado más de 620.000 muertos en el país), se redujo 1,6 puntos porcentuales respecto al trimestre móvil anterior, junio-agosto (13,1%), y en 2,8 comparada con el trimestre setiembre-noviembre del 2020 (14,4%).
Pese a las últimas caídas, el desempleo sigue afectando a 12,4 millones de personas en este país de 213 millones de habitantes, golpeado además por una disparada inflación –10,06% en el 2021, la mayor desde el 2015– que sigue erosionando los ingresos de las familias.
Los datos, que coinciden con el avance de la vacunación en Brasil, “acompañan la trayectoria de ocupación que podemos ver en los últimos trimestres” y pueden estar reflejando la “estacionalidad” de los meses de final del año, cuando las contrataciones tienden a aumentar entre el comercio y el sector servicios, afirmó Adriana Beringuy, coordinadora de Trabajo y Rendimiento en el IBGE.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), casi un cuarto de los brasileños está en situación de inseguridad alimentaria.
La economía brasileña entró en recesión al registrar un retroceso de 0,1% del PIB en el tercer trimestre del 2021, el segundo consecutivo con resultado negativo
RENDIMIENTO DE SALARIOS
La mejora en la tasa de desempleo se ve empañada, sin embargo, por el dato de rendimiento de los salarios de los trabajadores, que se redujo un 4,5% frente al trimestre anterior y se situó en el peor nivel de la serie histórica, iniciada en el 2012.
“Esto significa que, a pesar del aumento significativo en la ocupación, las personas que ingresan al mercado laboral ganan menos. Además, está el efecto inflacionario, que incide en la caída de los ingresos reales que perciben los trabajadores”, explicó Beringuy. Según el Instituto Brasileño de Estadística (IBGE), un total de 38,6 millones de brasileños trabajan en la informalidad, equivalente al 40,06% de la fuerza de trabajo, unas cifras similares al trimestre anterior..