Londres, Reino Unido. AFP.
El comité que supervisa la vacunación contra el covid en el Reino Unido anunció ayer que no la extenderá a los niños sanos entre 12 y 15 años, a contracorriente de muchos países occidentales y pese a la preocupación por el inicio del curso. “Las pruebas disponibles indican que los beneficios para la salud individual de la vacunación contra el covid-19 son escasos en las personas de 12 a 15 años sin problemas de salud subyacentes”, señaló el comité conjunto sobre vacunación e inmunización (JCVI).
Los riesgos potenciales asociados a la vacunación son “también escasos”, añade el JCVI, pero “potencialmente graves” y aún están siendo totalmente definidos. El comité considera así “demasiado pequeño” el beneficio respecto al riesgo para la salud de ampliar la campaña de vacunación masiva a los jóvenes sanos de 12 a 15 años. Sin embargo, aconsejó al gobierno que solicite más opiniones. Tras la publicación de esta recomendación, el ministro de Sanidad, Sajid Javid, afirmó que pedirá la opinión de las autoridades médicas de las cuatro naciones que forman el Reino Unido “antes de tomar rápidamente una decisión”.
PARA VULNERABLES
Los mayores de 12 años con problemas de salud que los hacen vulnerables al covid-19 ya pueden recibir la vacuna y la campaña se ampliará a partir del viernes a otros niños de riesgo, como los que padecen anemia falciforme o diabetes de tipo 1. Los jóvenes de 16-17 años ya son elegibles, aunque de momento se les administra una sola dosis.
El dictamen del comité de vacunación llega en un momento en que muchos países occidentales, como Estados Unidos, llevan varias semanas vacunando a los adolescentes. En el Reino Unido, la presión para que la campaña se extienda a los adolescentes crece dado que el inicio del nuevo curso escolar en Inglaterra esta semana ha hecho temer un aumento de las infecciones, como se vio tras el regreso a las clases en Escocia a principios de agosto.
CHOQUES CON ANTIVACUNAS
Varios policías resultaron heridos ayer viernes en choques con manifestantes antivacunas en Londres, cuando el gobierno debía decidir si ampliaba la vacunación contra el covid-19 a los niños entre 12 y 15 años. Un grupo de manifestantes antivacunas intentó entrar por la tarde en el edificio de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA), en el barrio londinense de Canary Wharf. La MHRA es responsable de aprobar las distintas vacunas contra el covid-19 para su uso masivo. La policía metropolitana afirmó haber desplegado “un número de agentes” para “proteger la entrada” del edificio. Entonces, los manifestantes se trasladaron a South Kensington, donde se pusieron violentos con la policía.