Miami, Estados Unidos. AFP.
El lunes todos los establecimientos educativos del distrito de Miami-Dade –el cuarto con más alumnos de Estados Unidos– reabrieron sus puertas tras un año de clases virtuales por culpa del covid-19. Con el reciente aumento de los casos en el estado, algunos distritos escolares decidieron obligar a los estudiantes y a su personal a llevar mascarillas en la vuelta al colegio, siguiendo las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
La decisión no gustó al gobernador de Florida, Ron DeSantis. El republicano se ha negado desde el principio de la pandemia a imponer los tapabocas en el estado, porque considera que la medida atenta contra la libertad individual. El 30 de julio, firmó una orden ejecutiva para impedir que las escuelas impusieran las mascarillas.