Washington, Estados Unidos. AFP.
El presidente Donald Trump chocó con varios aliados de Estados Unidos pero con la canciller alemana Angela Merkel parece tener una especial enemistad. El abrupto anuncio de Trump de que reducirá a la mitad (25.000) los soldados estadounidenses estacionados en Alemania, una decisión que preocupa a la OTAN, es la culminación de crecientes tensiones entre los líderes de las más populosas naciones de la alianza atlántica.
Trump calificó a Alemania de ser “negligente” con la OTAN, en referencia a que Berlín no cumple la meta de destinar a defensa el 2% de su PIB. También dijo: “nos tratan muy mal en materia comercial”. El último episodio se gestó luego que Merkel, una mujer dedicada a la ciencia antes de entrar a la política y que actuó rápidamente ante la pandemia, desdeñó la idea de Trump de reunir este mes en Washington a los líderes del Grupo de los Siete. Trump aplazó la cumbre y dijo que la extendería a otros líderes como el presidente ruso Vladimir Putin, que fue expulsado luego de la anexión de Crimea en el 2014.