Brasilia, Brasil. Agencias.

El número de muer­tos por corona­virus en Brasil llegó a 2.313. La cifra se alcanzó luego de que en las últimas horas se reportara un total de 407 fallecidos por el virus, de acuerdo a las autorida­des sanitarias. El país se mantiene como el más afectado por la pandemia en la región latinoameri­cana, donde se han regis­trado más de 100.000 infectados.

En Brasil se han confir­mado 45.757 casos de COVID-19. De estos, cerca de 16.000 se ubican en San Pablo. Entre las entidades con más casos le siguen Río de Janeiro, Ceará, Pernam­buco y Amazonas.

El alcalde de Manaos, Arthur Virgilio Neto, mencionó el caos que ha motivado la pan­demia, que además afecta a las comunidades indígenas, según detalla la prensa local. La situación más crítica está en el norteño estado del Amazonas, después de que los hospitales públicos de la capital, Manaos, entraran en colapso, según admitió el alcalde de la ciudad, Arthur Virgilio, en declaraciones a Efe.

El Amazonas registra hasta ahora 207 decesos y 2.479 casos confirmados, aunque las cifras pueden ser mayo­res, debido a la subnotifi­cación y han obligado a la Alcaldía de Manaos a exca­var fosas comunes en los cementerios para las víc­timas del COVID-19.

Pese al aumento de muer­tes, el nuevo ministro de Salud, Nelson Teich, resaltó que Brasil regis­tra algunas de las “mejo­res” cifras del COVID-19 en el mundo y recordó que el país “no registra un creci­miento explosivo” de casos.

El presidente Jair Bolsonaro insiste en no decretar la cuarentena ni paralizar la economía del país. Su oposición al confinamiento y a las medidas de distanciamiento social agudizaron las diferen­cias con su ex ministro de Salud, Henrique Mandetta, quien fue apartado del cargo.

Recientemente, el mandatario aseguró que el 70% de la población se contagiará del virus, por lo cual “no tiene sentido huir de eso”. El ministro de Salud, Luiz Henrique Mande­tta, fue destituido tras sus divergencias con el presidente de Bra­sil, Jair Bolsonaro.