San Pablo, Brasil. AFP.
El presidente Jair Bolsonaro contrarió las orientaciones de su Ministerio de Salud paseando ayer domingo por Brasilia, acercándose a seguidores y reforzando su llamado de romper la cuarentena. “Brasil no puede parar”, dijo a pesar del avance del coronavirus que ya cobró más de 100 muertes en el país.
“Lo que he conversado con las personas es que quieren trabajar, lo que he dicho desde el principio, vamos a tener cuidado, mayor de 65 años se queda en casa”, le dijo Bolsonaro a un vendedor ambulante en un video en su cuenta de Twitter.
Menos de 24 horas antes, el ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, había resaltado nuevamente la importancia del aislamiento social en la lucha contra la enfermedad, que en Brasil suma 3.904 casos y 114 muertes.
“La muerte está allí, si Dios quiere. Solo no podemos quedarnos parados, hay temor porque si uno no muere de la enfermedad, muere de hambre”, dice el vendedor a Bolsonaro que responde “no vas a morir”.
El mandatario de 65 años promovió también el uso de la hidroxicloroquina para tratar el coronavirus.