Washington, Estados Unidos. AFP.
“Caso sólido” o procedimiento de destitución “falso”. Las dos definiciones muestran que demócratas y republicanos están en las antípodas cuando este lunes comienza, en un Congreso profundamente dividido, una audiencia que podría acabar en una acusación formal contra el presidente de Estados Unidos.
En este clima de división, que atraviesa igualmente a la sociedad estadounidense, se inició la presentación de conclusiones –por legisladores y expertos– relacionadas con el caso ucraniano, por el que los demócratas acusan a Donald Trump de abuso de poder.
“¡Votamos por Donald Trump!”, gritó un partidario del presidente tras la apertura de la audiencia en la Cámara de Representantes. “¡Los estadounidenses están cansados de esta estafa de investigación!”, agregó antes de ser escoltado fuera de la habitación.
“El presidente Trump ha puesto sus intereses por encima de los del país en varias ocasiones y ha pedido repetidamente a una potencia extranjera que interfiera en nuestras elecciones”, dijo el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, el demócrata Jerry Nadler, encargado de supervisar la redacción de cargos contra el mandatario. “Tenemos un caso muy sólido”, indicó Nadler el domingo a la CNN.
Los demócratas abrieron una investigación a finales de septiembre contra Trump en la Cámara de Representantes, donde tienen mayoría, después de saber que había pedido a Ucrania que investigara a Joe Biden, bien posicionado para enfrentarse al presidente en las elecciones del 2020.
Según Nadler, las acciones de Trump representan “un peligro real para las elecciones presidenciales”" de noviembre del 2020, en las que el multimillonario republicano busca un segundo mandato. Trump proclama su inocencia y denuncia una investigación inconstitucional, una “farsa” demócrata montada en su contra con la que se niega a cooperar. Después de dos meses de investigación en la cámara baja y una quincena de audiencias, el Comité Judicial se reúne esta semana para redactar los cargos contra el presidente