Río de Janeiro, Brasil. AFP
El gobernador de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezão, fue detenido este jueves acusado de recibir millonarios sobornos ligados al esquema de corrupción Lava Jato y de integrar una organización que desvió dinero público al extranjero.
“De acuerdo con las investigaciones (…), el gobernador integra el núcleo político de una organización criminal que, a lo largo de los últimos años, cometió varios crímenes contra la administración pública, especialmente corrupción y lavado de dinero”, dice una nota de la Fiscalía General.
El gobernador fue detenido temprano de mañana en la residencia oficial, Palacio Laranjeiras, y fue llevado a la sede de la Policía Federal (PF) como parte de la operación Boca del Lobo. Pezão, de 63 años, vestía una camisa de manga larga de tono gris y un pantalón oscuro. No llevaba esposas y era escoltado por agentes policiales.
El mandatario es acusado de recibir sobornos entre el 2007 y el 2014, cuando era vicegobernador de su aliado Sergio Cabral, quien está preso por cargos de corrupción. Los pagos se habrían extendido hasta el 2015, cuando ya era gobernador, afirma la Fiscalía.
La orden de prisión fue solicitada por la fiscala general de Brasil, Raquel Dodge, y se sustenta en peritajes contables y en la confesión premiada de Carlos Miranda, operador financiero de Cabral, detalló la prensa.
Pezão habría recibido de empresas y proveedores contratados por el gobierno de Río de Janeiro una mensualidad de 150.000 reales (unos 40.000 dólares al cambio actual), además de un bono por 1 millón de reales (unos 263.000 dólares), dijo el delator. Aún de acuerdo con la fiscalía, la organización del gobernador envió remesas de grandes cuantías al exterior, desviando dinero público.
La detención se produce a un mes de culminar su mandato, pero la fiscal Dodge subrayó que era necesaria, puesto que incluso después de apresamientos e investigaciones “los crímenes se perpetuaron (...) por las informaciones que tenemos, esto (lavado de dinero) continúa, aún está ocurriendo”.