El expresidente brasileño Jair Bolsonaro enfrenta este jueves la tercera -y quizás última- sesión de un juicio que lo dejará inelegible durante ocho años si es hallado culpable de abuso de poder por desinformar sobre el sistema electoral antes de su derrota frente a Lula.

El Tribunal Superior Electoral (TSE) retoma a partir de las 9:00 (12:00 GMT) la votación del juicio contra Bolsonaro por haber cuestionado sin pruebas las urnas electrónicas en Brasil durante una reunión con embajadores en julio de 2022. Hasta ahora, solo se pronunció el juez relator, Benedito Gonçalves, que votó a favor de inhabilitar políticamente a Bolsonaro por “abuso de poder político y uso indebido de los medios de comunicación”.

Se espera que los otros seis jueces del TSE se pronuncien este jueves, aunque no se descarta un aplazamiento, si alguno de ellos pide más tiempo para examinar el caso. El veredicto se define por mayoría (al menos 4 de 7 votos). Bolsonaro estuvo ausente de las dos primeras sesiones del juicio en la sede del TSE en Brasilia y tampoco se prevé que comparezca este jueves, según su abogado, Tarcisio Vieira. “No veo ninguna ventaja en la presencia física del expresidente”, dijo el martes el letrado.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Incitación a la “paranoia colectiva”

El caso se centra en un evento con diplomáticos organizado por Bolsonaro en la residencia presidencial de la Alvorada, en el que aseguró sin pruebas que buscaba “corregir fallas” del sistema de urnas electrónicas con la “participación de las Fuerzas Armadas”.

En su discurso, transmitido por la red pública de TV y las redes sociales, el excapitán dijo que la supuesta vulnerabilidad del sistema podía servir para manipular el resultado electoral en su contra, algo que el exmandatario repitió en numerosas ocasiones durante la campaña electoral.

Lea también: España asume la presidencia de la Unión Europea

El juez Gonçalves vinculó a Bolsonaro con un “discurso violento y mentiras” que pusieron “en jaque la credibilidad de la justicia electoral”, y dijo que la reunión con los diplomáticos “sirvió para incitar un estado de paranoia colectiva” sobre el sistema electoral.

Bolsonaro “estimuló tensiones institucionales e instigó la creencia de que la adulteración de los resultados era una amenaza que rondaba la elección de 2022″, ganada por estrecho margen por el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, añadió Gonçalves.

Los hechos investigados “fueron extremamente nocivos para el ambiente democrático” del país, agregó. El exmandatario defiende su inocencia. “Creo que el TSE hará un juicio justo sobre mí y no me dejará inelegible”, afirmó Bolsonaro el miércoles en un video publicado en sus redes, pese a haberse mostrado pesimista en los últimos días sobre el veredicto.

Consecuencias para Bolsonaro

Vieira sostiene que las pruebas contra su cliente “son frágiles para una sanción de esa magnitud” y anticipó que, en caso de condena, recurrirá la decisión ante la Corte Suprema. Una inhabilitación política dejaría a Bolsonaro, de 68 años, fuera de las próximas elecciones presidenciales en 2026 y abriría una carrera por el liderazgo de la derecha en Brasil, por ahora sin alternativas claras.

Prácticamente la mitad de brasileños votaron por el expresidente ultraderechista en la segunda vuelta de las elecciones de octubre. Tras la derrota, bolsonaristas, convencidos de que su líder había sido víctima de un fraude, promovieron cortes en centenares de carreteras y acamparon frente a cuarteles de todo el país pidiendo una intervención militar.

Lea más: Condenan quema del Corán en Suecia

El 8 de enero, una semana después de la investidura de Lula, miles de bolsonaristas concentrados en Brasilia invadieron y saquearon los edificios de la Presidencia, del Congreso y de la Corte Suprema. Bolsonaro se hallaba entonces en Estados Unidos, donde permaneció tres meses, hasta finales de marzo.

Una condena del TSE puede ser el primero de una serie de reveses judiciales del exmandatario, que enfrenta más de una decena de procesos administrativos en el tribunal electoral. Además, es objeto de cinco investigaciones en el Supremo Tribunal Federal, con penas susceptibles de prisión, incluyendo una por su presunto papel como autor intelectual del asalto a las instituciones en Brasilia.

Fuente: AFP.

Déjanos tus comentarios en Voiz