El periodista holandés Peter De Vries, víctima de un intento de asesinato en Ámsterdam, es un sólido defensor de la justicia que se hizo famoso por sus reportajes sobre el secuestro del ‘barón de la cerveza’, Freddy Heineken, en la década de 1980.

De Vries, de 64 años y que este miércoles luchaba por su vida tras ser tiroteado la víspera en la calle, fue criado en una familia religiosa de Amstelveen, en los suburbios de La Haya, y se hizo una gran reputación como reportero de informaciones policiales en el popular diario De Telegraaf, para el que cubrió el rapto de Heineken, una noticia que dio la vuelta al mundo.

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Entonces, “logró romper el círculo íntimo de dos de los secuestradores, Cor van Hout y Willem Holleeder”, destacaba este miércoles el diario belga Nieuwsblad. En 1987, escribió “El secuestro de Alfred Heineken”, una obra en la que narró el plagio desde la perspectiva de Van Hout. Basado en entrevistas a los dos captores, el libro se convirtió en un ‘best-seller’ en Holanda. Pero, para De Vries el caso no había terminado y en 1994 encontró en Paraguay a un tercer secuestrador, Frans Meijer, extraditado a Holanda en el 2002.

El célebre periodista se dedicó después a la televisión, en la que condujo su propio programa consagrado a casos criminales, titulado “Peter R. de Vries, Reportero del Crimen”. Su trabajo llevó en particular a la liberación en el 2002 de dos cuñados que habían sido condenados por la violación y asesinato de una aeromoza. Finalmente, la policía detuvo a un nuevo sospechoso en el 2008, quien fue sentenciado a 15 años de prisión.

“Héroe nacional”

De Vries obtuvo fama internacional en el 2008 cuando le concedieron un premio Emmy por su informe sobre la desaparición de la estadounidense Natalee Holloway en Aruba. El periodista tiene una especial predilección por casos no resueltos, “cold-case”, que incluyen en particular el asesinato de Nicky Verstappen, un niño de 11 años, que había desaparecido de un campamento juvenil en 1998, y antes de ser asesinado fue agredido sexualmente.

Se convirtió en portavoz de la familia de la víctima cuando, en el 2018, el caso tomó un nuevo giro, lo que llevó a condenar a un sospechoso. “Peter R. de Vries es un héroe nacional para todos nosotros, un periodista valiente como hay pocos, incansable en la búsqueda de justicia, por completo independiente y con un espíritu libre”, señaló la alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, pocas horas luego del ataque del martes.

“Defiende a necesitados, a los padres de un niño asesinado, a quienes han sido sentenciados injustamente”, añadió. Desde hace años, De Vries comparece frecuentemente como testigo ante los tribunales como consecuencia de su experiencia en varios casos, que incluye al juicio contra Willem Holleeder por el asesinato de Cor Van Hout (secuestradores de Heineken), en el 2003.

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De acuerdo a observadores, este rol lo convirtió en objetivo del mundo criminal. Durante una audiencia particularmente caldeada, Holleeder no dudó en calificarlo como “sucio delincuente”.

A partir del año pasado, De Vries ha actuado como consejero y confidente del principal testigo de cargo en el caso contra Riduan Taghi, señalado antes de su detención en el 2019 en Dubái como el criminal más buscado en Holanda, quien lideraba de acuerdo a la fiscalía, una red comparable a una máquina de matar bien aceitada. En el 2019, destacó en un tuit que, según información policial, se encontraba en una lista de gente a la cual Riduan Taghi pretendía asesinar.

Fuente: AFP.

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