El presidente boliviano Luis Arce dispuso el cierre temporal de sus accesos en los límites con el gigante sudamericano, a partir de este viernes. Foto: Twitter.
Bolivia cierra su frontera con Brasil por variante de COVID-19
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Bolivia dispuso el cierre preventivo de su frontera con Brasil a partir del viernes por una semana, para proteger a su población ante la eventualidad de que circule una nueva variante de COVID-19. “En el marco de las medidas para proteger a la población, instruimos el cierre temporal de fronteras con Brasil, por 7 días”, informó el presidente boliviano, Luis Arce, en su cuenta de Twitter.
Acotó que en poblaciones fronterizas bolivianas donde “se haya verificado la circulación de variantes” del coronavirus desde Brasil se procederá a “su encapsulamiento” o cuarentena, “estableciéndose controles para su mitigación, por el tiempo que sea requerido”.
El mandatario señaló que los ministerios de Relaciones Exteriores, Salud y Gobierno (Interior) podrán disponer cierres temporales en otros lugares del país, de acuerdo con la evolución epidemiológica.
El ministro de Salud, Jeyson Auza, dijo por separado que el cierre de la frontera con Brasil, que tiene una extensión de 3.400 kilómetros de selvas y ríos, entrará en vigor el viernes, según el canal privado de televisión Unitel.
El gobierno no ha comunicado aún qué medidas específicas se aplicarán en el caso de los viajes aéreos. Hasta ahora toda persona que ingresa al país debe portar un resultado negativo. Brasil vivió en marzo el peor mes de la pandemia con más de 66.000 muertos, más del doble que en julio de 2020 que había sido el mes más letal, en medio de una desenfrenada ola de contagios.
Medios locales de varias poblaciones bolivianas fronterizas con estados brasileños reportaron un aumento de contagiados por coronavirus, aunque las autoridades sanitarias no han confirmado que circule una nueva cepa del virus.
El gobierno de La Paz ordenó a inicios de esta semana agilizar las campañas de vacunación en poblados fronterizos con Brasil, ante temores de que pueda estar circulando una nueva variante de la enfermedad. Bolivia, con 11,5 millones de habitantes, acumula 272.411 contagiados y 12.257 fallecidos.
El país comenzó en febrero a vacunar a su personal médico y a personas con patologías de riesgo y planea alcanzar a toda su población adulta entre agosto y septiembre, con dosis chinas Sinopharm, rusas Sputnik V, estadounidenses Pfizer y británicas AstraZeneca.
Acelera vacunación en frontera
Bolivia acelerará la vacunación contra el COVID-19 en los poblados fronterizos con Brasil, ante la presencia de una nueva cepa del virus en el país vecino, informó este pasado martes el presidente Luis Arce.
“Hemos instruido al Ministerio de Salud proceder a la vacunación de todas las poblaciones fronterizas del país, empezando con éstas que son las poblaciones más expuestas [y] que están colindantes con el Brasil”, afirmó el mandatario durante un acto oficial.
“No estamos exentos de que pueda haber una cepa, un virus que esté generándose y reproduciéndose sin control, entonces tenemos que tomar las previsiones”, acotó el gobernante. Las vacunaciones comenzaron en hace unas semanas en las ciudades y se planificó que se extiendan gradualmente a las zonas rurales, pero el gobierno decidió darles prioridad a las localidades fronterizas.
Los servicios sanitarios están atentos ante las versiones de la aparición de una nueva cepa del virus en Brasil, aunque el Ministerio de Salud no ha confirmado su presencia. Bolivia y Brasil comparten una frontera de unos 3.400 kilómetros y tres de sus nueve departamentos (Santa Cruz, Beni y Pando) tienen límites con estados brasileños.
Medios de prensa de las poblaciones bolivianas fronterizas en los departamentos de Beni (noreste) y Pando (norte) han informado sobre un inusual incremento de contagios de COVID-19 en los últimos días, aunque el gobierno no lo ha asociado a la nueva cepa brasileña.
Bolivia, con 11,5 millones de habitantes, registra 270.347 contagios y 12.211 fallecidos. El país reportó el lunes 719 nuevos casos, de ellos el 38,8% en Santa Cruz, 16,5% en Beni y 2,8% en Pando.
Este martes, el país andino recibió un nuevo cargamento de 200.000 vacunas chinas de Sinopharm que se suman a las 740.000 que llegaron desde enero de la rusa Sputnik V, la británica AstraZeneca y de la misma marca china.
El gobierno dice que contrató un total de 15,2 millones de dosis y espera su llegada gradual para lps próximos meses. La vacunación comenzó en febrero principalmente con el personal de salud y con la población que tiene patologías de riesgo.
Sigue la doble exposición “Ecos sutiles” y “¡La vida insiste!”
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La Embajada de Brasil en Paraguay y el Instituto Guimarães Rosa (IGR) presentan la doble exposición de artes plásticas contemporáneas “Ecos sutiles” y “¡La vida insiste!”, con obras de cuatro destacadas artistas brasileñas y curaduría de Antonio Carlos Machado. Inaugurada el 11 de junio, podrá visitarse hasta el 29 de agosto, con entrada gratuita en el Espacio Cultural de la Embajada de Brasil, en Eligio Ayala casi Perú, en Asunción.
La propuesta expositiva reúne dos muestras que dialogan en torno a temas como la memoria, la transformación y la resistencia, desde perspectivas poéticas y materiales diversas. En la Sala Lívio Abramo, se presenta “¡La vida insiste!”, de Karina Amadori, una instalación que transforma la seda paranaense en metáfora de persistencia. Sus obras exploran la relación entre fragilidad y fortaleza, activando una reflexión sobre los ciclos de vida y resistencia desde lo textil y lo orgánico.
Simultáneamente, el Espacio Cultural albergará “Ecos sutiles”, una exposición colectiva que reúne trabajos de Juliane Fuganti, Bruna Mayer y Gabriela Stragliotto. Cada una aborda o território do sensível a partir de lenguajes visuales particulares: Juliane Fuganti presenta una serie de fotograbados que capturan la atmósfera de los manglares, revelando la fuerza simbólica y vital de estos ecosistemas.
Bruna Mayer incorpora su propio cuerpo en una obra performática realizada con sangre, proponiendo un diálogo entre el duelo y la creación. Gabriela Stragliotto ofrece pinturas que trazan mapas afectivos, en los que la geografía emocional se vuelve paisaje plástico. Estas dos exposiciones, inéditas en Paraguay, consolidan el compromiso del Instituto Guimarães Rosa con la difusión del arte contemporáneo brasileño y el fortalecimiento del intercambio cultural regional.
La segunda temporada de la serie brasileña de Netflix “El ADN del Delito” cuenta con la participación de las actrices paraguayas Belén Fretes y Antonella Zaldívar, quienes desplegaron su talento en escenas intensas en un contexto criminal implacable. Su aparición en la serie suma la representación del talento nacional en una de las plataformas más importantes del mundo.
La primera entrega del 2023 ya tuvo a Nico García, Éver Enciso, Víctor Sosa y Luis Gutiérrez, quienes regresan (excepto Sosa) en el nuevo combo de 8 capítulos lanzados el pasado 4 de junio. Las actrices se enteraron casi por casualidad del casting, pero sin saber para qué producción. Jamás se imaginaron que serían seleccionadas y mucho menos que viajarían a São Paulo (Brasil) para integrar este elenco.
“Es mi primera vez en una serie para plataforma de streaming de producción internacional. Vengo del mundo del teatro, que es muy distinto al cine. Es anecdótico, porque tuve apenas unas horas para grabar el video para el casting y enviar, siendo que ese mismo día me enteré. En un principio me eligieron para una participación menor, un papel sin mucha carga emocional”, reveló Zaldívar. “Pero cuando llegué a Ciudad del Este me ofrecieron hacer una prueba para el papel de Yolanda. Finalmente, después de un par de horas me confirmaron el papel, una prostituta que es víctima de agresión. Es una escena intensa que disfruté muchísimo hacer, mi compañero fue sumamente generoso conmigo. Fue fácil reaccionar a lo que proponía”.
Por su parte, Belén Fretes sintió la presión y el desafío de actuar en un set donde solo se hablaba portugués, un idioma que no domina; sin embargo, subrayó la satisfacción de sentirse respaldada en cada toma. “Tuve como cuatro o cinco cambios de vestuario con prendas muy exuberantes, por lo que la asistente me tapaba todo el tiempo para que me sintiera tranquila. Tuvieron mucho cuidado con nosotras”, comentó.
Las artistas coincidieron en que el proceso de selección fue exigente, con escenas de alta intensidad emocional que resultaron determinantes para que lograran sus papeles. Antonella Zaldívar interpreta a Yolanda, una mujer atrapada en una historia de violencia y supervivencia, mientras que Belén Fretes da vida a Jannette, la encargada de recibir a las personas que llegan a un prostíbulo. Las escenas se grabaron en un burdel brasileño real, que según el guion es frecuentado por narcotraficantes y criminales.
Tratadas como estrellas de cine, las dos afirman que lo más llamativo de la experiencia durante el rodaje fue el cuidado que tuvieron con ellas en todo momento. Resaltaron el excelente trato profesional, desde el acompañamiento sicológico hasta aspectos logísticos, como transporte, vestuario y alimentación. Antonella agregó: “Teníamos una persona responsable que se encarga de cada detalle y de que estuviéramos bien, incluso de tomarnos de la mano para cruzar la calle”, relató desde Buenos Aires, ciudad que adoptó para perfilar su carrera actoral.
Antonella Zaldívar es actriz y productora paraguaya. Inició su formación actoral en “El Estudio”, bajo la dirección de Agustín Núñez, en Asunción. Su ciudadanía italiana la llevó a perfeccionarse en la escuela “ACT Multimedia” en Cinecittà, Roma (Italia), y más adelante completó su capacitación en el Lee Strasberg Theater and Film Institute de Nueva York (EE. UU.), donde cursó los dos años académicos completos.
Inició su carrera teatral con “Delivery (Pizza Man)” y se destacó en obras como “Anna Cappelli”, “Nerium Park” y “Bajo terapia”, mostrando gran versatilidad y compromiso artístico. Fue nominada dos veces a los Premios Edda como mejor actriz principal. En audiovisual participó en series y películas como “González vs. Bonetti”, “Las herederas”, “Leal 2” y “Desintoxicación amorosa”.
Belén Fretes
Es una destacada actriz, vestuarista y profesora superior de danza clásica y danza paraguaya. Estudió en TIA (promoción 2014) y siguió su preparación con talleres y cursos de actuación y creación de personajes en Paraguay y Buenos Aires. Además, participó en series y películas, tanto nacionales como internacionales. En 2024 participó en “Orsai: la serie” (2022), dirigida por Emiliano Gómez, donde encarnó a Patito, rol que le valió una prenominación a los Premios Platino como mejor actriz de reparto en miniserie.
También actuó en el largometraje “Charlotte” (2019), de Simón Franco, con la destacada actriz Ángela Molina, y en “Lima 331” (2020) y “Felices los que lloran” (2015), ambas dirigidas por Marcelo Torcida. Su trabajo en cortometrajes incluye “Pasadas por agua” (2019), dirigido por Rodrigo Gastiaburu, “Cigarrillos por manzanas”, dirigida por Diego Quiñones, y “Dulce oscuridad” (2021), dirigido por Juan Robledo.
El protocolo de paz fue firmado en la Casa Rosada de Buenos Aires y llevó la rúbrica de los cancilleres de Paraguay y de Bolivia, Luis Alberto Riart y Tomás Elío
El Chaco, el territorio que une y separa a dos países
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Jimmi Peralta
Fotos: Gentileza/Archivo
El 12 de junio de 1935 fue firmado en Buenos Aires el protocolo de paz que dio por terminadas las acciones bélicas que enfrentaron a Paraguay y Bolivia desde 1932. Los historiadores Erasmo González y Herib Caballero Campos cuentan los pormenores de las arduas negociaciones y el contexto en el que se desarrolló el conflicto entre ambos países por la posesión del Chaco Boreal.
Luis Alberto Riart y Tomás Elío, cancilleres de Paraguay y de Bolivia, respectivamente, fueron los encargados de refrendar el documento para poner fin a las hostilidades entre ambas naciones mediterráneas, que se disputaron una salida fluvial al mar y sufrieron la falta del vital líquido durante varios tramos de la contienda, lo que infligió múltiples sufrimientos además de los propios de toda guerra.
A 90 años del histórico acuerdo, se celebra la hermandad entre pueblos que, si bien tienen amplias fronteras en común, en gran parte siguen separados por el gran territorio chaqueño.
ANTECEDENTES
La guerra del Pacífico (1879-1884) cercenó territorialmente a Bolivia y lo despojó de 120.000 km2 de superficie y 400 km de litoral marítimo. Este fue un momento clave que provocó que el Chaco paraguayo entrara en los planes estratégicos del país del altiplano.
En Bolivia, con la pérdida de su costa sobre el océano Pacífico en la guerra que tuvo contra Chile, desplazaron hombres para irrumpir en el Chaco fundando fortines, al tiempo que los tratados se realizaban, pero no se solucionaron las diferencias territoriales.
“Las incursiones generaron tensiones al punto de que en febrero de 1927 es muerto en el fortín Sorpresa el teniente paraguayo Adolfo Rojas Silva. A partir de ese episodio el conflicto contra Bolivia se desarrolló en un ambiente en el que amplios sectores de la ciudadanía paraguaya reclamaban mayor presencia del Estado paraguayo en el Chaco. Desde el llamado a la movilización en diciembre de 1928 luego del ataque de tropas paraguayas al fortín Vanguardia, donde los bolivianos fueron desalojados, la crisis diplomática afloró con la expulsión de sus respectivos representantes diplomáticos que cumplían funciones en ambos países”, explica Erasmo González, doctor en historia.
El 23 de octubre de 1931, registrado como un ícono del reclamo ciudadano por la protección del Chaco, quedó en la memoria por la masacre de manifestantes estudiantiles en los jardines del Palacio de Gobierno, que estaba ocupado entonces por el presidente José P. Guggiari.
SIGILO
“Lo sucesivos gobiernos paraguayos venían realizando una prudente campaña de reforzar y dotar de mayor armamento al Ejército, que se inició con las reformas realizadas por el presidente Eligio Ayala. Durante su gobierno se mandaron comprar armas e incluso las dos cañoneras adquiridas de Italia: El Paraguay y el Humaitá”, indica González.
“En los últimos años han sido varias las investigaciones históricas académicas que han permitido comprender el esfuerzo del Estado paraguayo para armar al país. Efectivamente, sin un préstamo internacional se pudo comprar armamento moderno y capacitar a los jefes y oficiales para enfrentar el conflicto a partir de los planes consensuados entre el Gobierno y los jefes del Ejército en agosto de 1924”, explica, por su parte, el historiador Herib Caballero Campos.
A pesar de estos esfuerzos, en comparación con el despliegue boliviano Paraguay se encontró con una preparación un tanto menor en efectivos y en armamento para el inicio de las hostilidades.
EL AGUA Y EL GUARANÍ
“La contienda se inició con la toma boliviana en Pitiantuta, casi al mismo tiempo en que el doctor Eusebio Ayala asumía la Presidencia. Era una etapa difícil e incierta, pero el presidente tuvo el tino de apostar por José Félix Estigarribia para el mando del Ejército. La estrategia del comando paraguayo de llevar la guerra al interior de la región chaqueña fue fundamental. Los bolivianos incursionaron en un territorio adverso por las condiciones naturales del territorio, alejados de donde existía agua; además, considerablemente lejos de su puesto logístico”, refiere González.
“La utilización del idioma guaraní por orden general del comandante Estigarribia fue estratégica para comunicarse y despistar a los enemigos con códigos que los jefes oficiales y los soldados paraguayos podían entender. Además, servía para identificarse entre paraguayos si se encontraban en un lugar determinado, evitando confusiones que podían llevar al enfrentamiento entre los mismos”, agregó.
UNIDAD Y ESTABILIDAD
La primera mitad del siglo XX en Paraguay se caracterizó por un sinfín de tragedias internas a consecuencia de la inestabilidad política con revoluciones, golpes de Estado, exilios, atropellos, proscripciones y muerte. La hegemonía liberal había arrancado en 1904, pero tanto los conflictos dentro del propio partido de gobierno como las confrontaciones con la oposición impedían el desarrollo de un proyecto nacional.
“En el contexto de la guerra se había generado una tregua política. Según se estableció por leyes aprobadas por el Congreso, se reprimió a los sectores socialistas y comunistas que eran antiguerreristas, pues consideraban que la guerra del Chaco era una guerra imperialista. Asimismo, importantes jefes políticos de los dos partidos tradicionales se movilizaron o apoyaron al gobierno de Eusebio Ayala”, señala Caballero Campos.
“El territorio chaqueño no conoció diferencias políticas entre los combatientes paraguayos. Diferentes sectores de la sociedad acudieron al llamado: campesinos, obreros, estudiantes y con ellos artistas, poetas, intelectuales, choferes, deportistas, enfermeras y médicos. Con ese esfuerzo mancomunado se pudo sobrellevar la guerra con el acompañamiento de las mujeres, que realizaron diferentes actividades tanto en retaguardia como en el frente. Se destaca la labor de las madrinas de guerra como apoyo emocional para el soldado combatiente”, explica González.
A renglón seguido, destacó la unidad que se logró en el Paraguay durante la guerra a pesar de las diferencias que lo separaban anteriormente.
Erasmo González, historiador
“En general hubo un gran acompañamiento. Las personas hacían donaciones para las viudas y huérfanos de guerra; la Legión Civil Extranjera, conformada por miembros del comercio y la industria que eran de origen extranjero, colaboró con varias acciones para paliar las necesidades más urgentes. La Junta Nacional de Aprovisionamiento era una entidad gestionada por el Estado con fuerte colaboración de sectores privados, que proveían los alimentos básicos a las familias de los soldados combatientes que no tenían otros recursos para subsistir. La Cruz Roja Paraguaya, liderada por el Dr. Andrés Barbero, donó un avión ambulancia, así como también realizaron varias actividades para recaudar fondos, como el partido de fútbol en Buenos Aires en el que jugó Arsenio Erico, que finalmente fue fichado por el Independiente de Avellaneda”, citó Caballero Campos.
El esfuerzo de la guerra insumía ingentes recursos humanos y materiales, por lo que el armisticio fue celebrado en ambos bandos
VÍA DIPLOMÁTICA
En el contexto de una guerra con fuertes bajas para ambos bandos, la vía diplomática no estuvo clausurada. Esto a pesar de que Paraguay fue sancionado por la Sociedad de Naciones (antecedente de las Naciones Unidas) por haber sido declarado país agresor.
“El grupo mediador liderado por el gobierno argentino del general Juan B. Justo fue el impulsor de abrir una negociación con el apoyo de los demás gobiernos de la región, pero el último actor clave en sumarse y muy necesario fue el gobierno del Brasil, cuyo presidente Getulio Vargas visitó Buenos Aires en mayo de 1935, dando su acuerdo para que se impulse un alto al fuego en el infierno verde del Chaco”, comenta Caballero.
“De una posición defensiva en los primeros meses del conflicto, Paraguay pasó a la ofensiva en 1934 logrando recuperar territorios que los bolivianos fueron ocupando. Para 1935 ya había cruzado el río Parapití. Sin embargo, no debemos olvidar que todo esto significó sacrificios humanos de padecimientos por sed, pestes, heridas, traumas emocionales, muerte y angustia por la distancia de los seres queridos. Para 1935 los recursos se extremaron. Cada día de combate representaba un gran costo para el país, por lo que la gestión diplomática también fue ardua”, apunta González.
En este sentido, fue destacado el rol del canciller argentino Carlos Saavedra Lamas en el contexto de las negociaciones diplomáticas, quien fue reconocido con el Premio Nobel de la Paz en 1936 por su mediación en este conflicto y por haber inspirado un tratado antibélico que lleva su nombre.
RUMBO AL PROTOCOLO DE PAZ
“Las negociaciones comenzaron en mayo de 1935. Primeramente, el grupo mediador se reunía con cada canciller por separado. El Paraguay desde un principio estaba conteste en general con los términos del documento propuesto por los mediadores, pero Bolivia pretendía esperar el resultado de su contraofensiva, que fue detenida exitosamente por el Ejército paraguayo en la batalla de Ingavi, el 8 de junio de 1935. En ese sentido, ya el 11 se anunciaba en los medios de prensa asuncenos que se había acordado entre los países un alto al fuego, pero se estaban aún ultimando los detalles del documento final”, explica Caballero Campos.
De su parte, González subraya que el protocolo se firmó en un momento en el que ya no se podía continuar con la guerra por la dificultad para obtener recursos y el agotamiento de los combatientes. Por ello, de alguna forma la firma del protocolo de paz del 12 de junio era el camino obligatorio.
“Ya en los últimos meses de la guerra, el cansancio, la hostilidad de la naturaleza en el alto Chaco, el revés en las estribaciones andinas hicieron que la mayoría de la tropa paraguaya ya se encuentre agotada y agobiada, según se puede deducir de varios testimonios. Además, las arcas del Estado paraguayo ya estaban exhaustas luego de casi tres años de guerra. Por ello, el alto al fuego al mediodía del 14 de junio de 1935 (día en que se festeja la Paz del Chaco en Bolivia) fue celebrado por todos los combatientes, pues era algo que se anhelaba en ambos ejércitos ”, agrega Caballero Campos.
Herib Caballero Campos, historiador
En agosto de 1935 se realizó el desfile de la victoria en Asunción, pero el país estaba con una economía extenuada, con la producción mayormente a cargo de ancianos, niños y mujeres. Todo esto fue terreno fértil para que afloren de nuevo las desavenencias, los golpes de Estado, revoluciones, persecuciones e inestabilidad política.
ACUERDO FINAL
El Tratado de Paz, Amistad y Límites definitivo se rubricó el 21 de julio de 1938. El documento final fue firmado por Cecilio Báez y José Félix Estigarribia por Paraguay, y Eduardo Díez de Medina y Enrique Finot por Bolivia. El acuerdo fue refrendado por un referéndum, que se realizó el 15 de agosto de ese año y tuvo una aprobación del 91 %.
En octubre de 1938, en cumplimiento de una de las cláusulas del tratado, se abrió una Comisión Mixta Demarcadora de Límites para señalizar la frontera en el terreno, que dio por concluidas sus tareas en 2007.
Por ello, recién en abril de 2009, con firma de Evo Morales por Bolivia y de Fernando Lugo por Paraguay, se oficializó el acta de cumplimiento y ejecución del mencionado tratado.
BARRERA
A poco de cumplirse el centenario de esta epopeya, la más grande del siglo pasado en el continente, que dejó cerca de 100.000 bajas, el vínculo entre ambos países sigue en parte separado por aquel territorio hostil.
“Evidentemente el Chaco hasta hoy en día es una barrera para que se dé ese relacionamiento más cercano entre bolivianos y paraguayos. Hoy la ruta Bioceánica es una oportunidad para mejorar esa integración, pero el Chaco aún hoy es un territorio despoblado, con muchas carencias y una necesidad de recibir políticas públicas que aseguren la educación, la salud y la movilidad a las poblaciones chaqueñas, tanto originarias como a las demás que habitan dicho territorio”, concluyó Caballero Campos.
Celebran el 90 aniversario de la Paz del Chaco con la presentación de la Orquesta Sinfónica Nacional a 450 km de la capital.
Por Jorge Zárate y Matías Amarilla
Loma Plata, Boquerón, enviados especiales.
La fuerza de la marcha Chaco Boreal en brillante ejecución de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) abrió el capítulo de homenaje a los héroes de la contienda en el concierto realizado en esta ciudad, distante a 450 kilómetros de Asunción.
“Es la primera vez que la OSN llega hasta aquí y por fortuna en esta fecha tan especial”, dijo su directora María Victoria Sosa al abrir el evento desarrollado en el Centro Cultural Chortitzer ante unos 800 espectadores que concluyeron aplaudiendo de pie el logrado espectáculo de la formación orquestal.
El acto que contó con la presencia del gobernador de Boquerón, Harold Bergen, y representantes de la comunidad local, tuvo un programa que en la primera parte abordó pasajes clásicos de la ópera universal como “El barbero de Sevilla”, “Carmen” y una versión especial y cantada en alemán de “La viuda alegre” que fue muy celebrada por el público.
El Centro Cultural Chortitzer de Loma Plata (Boquerón) fue escenario del evento
OBRAS DE FLORES
Acto seguido, la orquesta, dirigida por Ernesto Estigarribia Mussi, abordó cuatro piezas de creación de José Asunción Flores que lograron conmover por su sentida ejecución.
Especialmente la versión de “India” a cargo de la soprano Carolina López y el tenor Marcos Villalba que aprovecharon especialmente la excelente acústica del auditorio. La organizadora del evento y directora del Conservatorio del Colegio de Loma Plata, Lilian Guenther, mostró su beneplácito por la visita de la OSN apuntando que “en esta ocasión llenamos el Chaco de música, un arte que no reconoce fronteras y hermana a los hombres”, recordando especialmente su efecto en la fecha de la firma del acuerdo de la Paz del Chaco.