Buenos Aires, Argentina | AFP |

La provincia de Buenos Aires, mayor distrito de Argentina, aguarda la respuesta de los acreedores a una oferta de última hora para la postergación de un pago que la libre del default.

El gobierno provincial ofreció este lunes pagar 30% de los 250 millones de dólares de capital con vencimiento del 26 de enero y postergar el resto al 1 de mayo, una mejora respecto a la propuesta del viernes.

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El plazo vencía originalmente el viernes, pero se aplazó al lunes y luego al martes a las 09H00 GMT, para cuando debe conseguirse al menos un 75% de adhesiones. Si no lo logra caerá en default el miércoles, último plazo de pago.

"Hubo una aceptación de una cantidad importante de acreedores", dijo el gobernador peronista Axel Kicillof en declaraciones a radio El Destape horas después de lanzada la oferta, aunque evitó precisar el porcentaje de adhesiones conseguido.

"Las aceptaciones siempre ocurren en las últimas horas y hoy (lunes) se consiguió el apoyo del grupo más grande de bonistas organizados", aseguró, aunque admitió que "aún quedan algunos fondos que tienen posiciones complicadas".

“Buena voluntad”

La modificación del plazo se justificó "en virtud de la adhesión de un gran número de bonistas y de intercambios mantenidos con fondos institucionales que aún no han prestado su consentimiento, pero mostraron buena voluntad y entendimiento por la situación provincial", indicó un comunicado oficial.

El vencimiento de capital, con fecha 26 de enero, ascendía a 250 millones de dólares y los intereses a 27 millones de dólares.

Según el economista Nikhil Sanghani, de la firma Capital Economics, un obstáculo para Buenos Aires "es que los bonistas pueden esperar señales más claras sobre los planes del gobierno nacional acerca de la reestructuración de la deuda, lo cual no se espera hasta finales de mes".

"Incluso si un acuerdo con los bonistas se alcanza antes del miércoles, esto no es el final del juego", alertó. "La provincia de Buenos Aires tiene grandes vencimientos en junio, por lo tanto aplazar el pago no será suficiente y el default es todavía posible este año, aunque se evite esta semana", explicó Sanghani.

Si bien la deuda de las provincias y la nacional están legalmente separadas, un eventual default de la principal provincia argentina es, según analistas, un potencial factor de desconfianza para los acreedores en su negociación con el gobierno nacional.

Fuertes vencimientos

La provincia de Buenos Aires enfrentará en 2020 vencimientos por casi 3.000 millones de dólares sobre un total de más de 8.000 millones hasta fines de 2023.

El cumplimiento de esta nueva oferta, si es aceptada, se hará "con recursos provinciales, que son escasos", dijo el ministro de Hacienda de Buenos Aires, Pablo López.

El gobierno nacional anticipó que no podrá auxiliar a la provincia de Buenos Aires, donde residen más de un tercio de los casi 45 millones de argentinos.

El presidente Alberto Fernández se encuentra de gira en Europa adonde espera conseguir respaldo para encauzar una renegociación de la deuda pública antes del 31 de marzo, cuando empiezan a operar fuertes vencimientos.

Según el último informe oficial de septiembre pasado, la deuda pública argentina asciende a un total de 311.251 millones de dólares, equivalente a 91,6% del Producto Interno Bruto.

El monto que debe renegociarse es de unos 195.000 millones de dólares (57% del PIB), entre deuda con bonistas privados y con organismos bilaterales y multilaterales.

La tercera economía de América Latina está en recesión, su inflación en 2019 llegó a 53,8% y la pobreza ronda el 40%.

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