Berlín, Alemania | AFP | por Mathieu FOULKES
El partido socialdemócrata alemán, inmerso en una crisis, elige este sábado al tándem hombre-mujer que lo dirigirá en una votación de la que dependerá el futuro de la coalición de la canciller conservadora Angela Merkel, de la que es aliado.
Después de varios meses de procedimiento interno y de campaña, el partido alemán más antiguo sabrá, el sábado a las 17H00 GMT, cuál de estos dos dúos, el ministro de Finanzas Olaf Scholz y Klara Geywitz o Norbert Walter-Borjans y Saskia Esken, se pondrá al frente.
El primero obtuvo 22,7% en la primera ronda y parte como favorito y el segundo el 21%.
La elección a la presidencia del SPD se debe a la renuncia de la anterior líder, Andrea Nahles, tras el resultado catastrófico de las elecciones europeas.
Por primera vez en la historia del partido, creado con este nombre en 1890, lo dirigirá un tándem hombre-mujer que será elegido siguiendo el modelo de los Verdes.
Alivio
Otra novedad: la votación ya no está reservada a los 1.000 delegados del partido, sino que está abierta a sus 426.630 militantes, que pueden votar hasta el viernes en línea o por correo.
La elección precede un congreso de investidura del 6 al 8 de diciembre en Berlín.
La votación no ha generado gran entusiasmo en un partido que queda en los sondeos por detrás de la derecha conservadora y de los ecologistas, y codo con codo con la extrema derecha (la AfD).
Solo el 53% de los militantes votó en la primera vuelta en octubre.
Una victoria del tándem Scholz-Geywitz sería un alivio para la canciller, que repitió el miércoles que tiene la intención de llegar al final de su mandato en el otoño de 2021.
Scholz carece de carisma y los alemanes lo apodan "Scholzomat", por considerarlo robótico, pero cuenta con la confianza de Merkel.
El vicecanciller y ministro de Finanzas Scholz, de 61 años, y su compañera de trabajo abogan por mantener el SPD en la coalición, formada en 2018.
Independientemente del resultado, si se mantienen o no en la coalición se someterá a voto en el Congreso la próxima semana.
Según un reciente sondeo Ipsos, alrededor del 57% de los simpatizantes del SPD serían favorables a un mantenimiento en el equipo de Merkel.
Si se impone el otro tándem será mucho más complicado para la dirigente alemana, que lleva 14 años en el poder. Sin declararse abiertamente a favor de una salida, Esken y Walter-Borjans son muy críticos con la coalición.
Problemas sin resolver
A pesar de las medidas recientes a favor de una pensión de jubilación básica, los dos critican la política de "deuda cero", a la que Scholz sigue apegado, y la timidez del gobierno actual en asuntos ambientales.
El dúo cuenta con el apoyo de los Jóvenes Socialistas (Jusos) y el brazo alemán de los Viernes para el Futuro, el movimiento proclima promovido por la sueca Greta Thunberg y muy seguido en Alemania.
Olaf Scholz no encarna "la renovación", según los Jóvenes Socialistas, y sus rivales sufren de un déficit de notoriedad.
Independientemente del resultado de esta elección, los problemas del SPD seguirán sin resolverse.
“El SPD solo puede regenerarse en la oposición y con nuevas personalidades”, abunda el politólogo Klaus Schröder, quien predice una coalición entre conservadores y ecologistas en 2021.