Washington, Estados Unidos | AFP, por Cyril JULIEN con Luana SARMINI-BUONACCORSI en Ankara.

Donald Trump reclamó el miércoles a Riad explicaciones sobre la suerte de un periodista saudita desaparecido hace más de una semana en Estambul, tras la revelación de elementos que alimentan las teorías sobre su detención o asesinato por agentes saudíes.

El presidente de Estados Unidos dijo que mantuvo contactos "al más alto nivel", "una vez más", con los saudíes, respecto al periodista Jamal Khashoggi, que no ha dado señales de vida desde que ingresó al consulado saudita en Estambul el 2 de octubre.

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"Estamos decepcionados por lo que está pasando. No nos gusta" y "queremos saber qué esta sucediendo allá", dijo.

La Casa Blanca indicó que dos de los asesores más cercanos a Trump, su yerno Jared Kushner y el responsable del Consejo de Seguridad Nacional John Bolton, habían hablado el martes con el príncipe heredero saudí Mohamed bin Salmán, antes de que el secretario de Estado Mike Pompeo efectuara un llamado para "reiterar" las demandas de Washington: "Detalles" sobre la desaparición y "transparencia del gobierno saudí sobre la investigación".

Interrogado sobre la respuesta de Riad, el departamento de Estado estadounidense se limitó a señalar que se trató de "conversaciones diplomáticas privadas" y evitó condenar frontalmente a las autoridades saudíes.

Trump aseguró también que está en contacto con la pareja del periodista, Hatice Cengiz, que había reclamado su ayuda y la de su esposa Melania para "esclarecer" el caso, al ser el reino un estrecho aliado de Estados Unidos.

En paralelo, senadores estadounidenses, republicanos y demócratas, activaron una ley que obliga al presidente a informar al Congreso sobre el caso en un plazo de 120 días.

Si concluye que un extranjero es culpable de una ejecución sumaria, torturas u otros atentados a los derechos de Khashoggi, Washington podría imponer sanciones a esa o esas personas.

“Sin informaciones previas”

Según el Washington Post, los servicios de inteligencia estadounidenses habían interceptado comunicaciones de altos funcionarios sauditas que evocaban el secuestro del periodista antes de que éste desapareciera.

"Estados Unidos no tenía informaciones previas sobre la desaparición de Jamal Khashoggi", o sobre eventuales amenazas, respondió el miércoles un vocero del Departamento de Estado, Robert Palladino.

De acuerdo a la policía turca, Khashoggi nunca salió de la misión diplomática, mientras fuentes próximas de la investigación señalaron el fin de semana que el periodista había sido asesinado en esa sede.

Algunos medios mencionaron sin embargo la posibilidad de que hubiera sido secuestrado y trasladado a Arabia Saudita.

Riad desmintió la tesis del asesinato, y aseguró que Khashoggi había abandonado el consulado.

Según imágenes de cámaras de video vigilancia difundidas el miércoles por canales turcos, el periodista, fuertemente crítico del gobierno de su país y colaborador del Washington Post, ingresó el 2 de octubre a las 13H14 al consulado, donde tenía cita para realizar trámites administrativos.

Otras imágenes, transmitidas por 24 TV, muestran a una camioneta ingresando al local diplomático y luego saliendo de él para dirigirse, a las 15H08, a la residencia del cónsul, situada en las inmediaciones.

El jefe de redacción del diario Aksam, Murat Kelkitlioglu, dijo, al presentar las imágenes en 24 TV, estar "seguro" de que el periodista fue transportado en ese vehículo, vivo o muerto.

La policía turca reveló el sábado que un grupo de 15 saudíes hizo viajes de ida y vuelta a Estambul el día de la desaparición del periodista.

24 TV y otros canales difundieron también imágenes de hombres pertenecientes a ese grupo, según sostienen, llegando al aeropuerto de la metrópolis turca y luego a su hotel.

De acuerdo a estas fuentes, abandonaron el hotel por la mañana hacia el consulado, del cual se fueron por la noche.

“Equipo de asesinato”

El miércoles el diario progubernamental Sabah publicó los nombres, la edad y las fotos de los 15 hombres presentados como el "equipo de asesinato" enviado por Riad.

El nombre de una de estas personas, Salah Muhammed Al Tubaigy, corresponde al de un teniente coronel del departamento de medicina forense saudita.

Las autoridades turcas obtuvieron el martes la autorización para registrar el consulado saudita, pero aún no se ha realizado.

El periodista se había exiliado en 2017 en Estados Unidos, después de haber caído en desgracia con el entorno de Mohamed bin Salmán, conocido como "MBS".

En una entrevista realizada por la BBC tres días antes de su desaparición, Khashoggi afirmó que no tenía intención de volver a su país.

"Cuando escucho sobre el arresto de un amigo que no hizo nada que lo merezca me hace pensar que no debería ir. Yo hablo, este amigo mío ni siquiera habló", dijo para explicar su decisión.

Mientras tanto, sigue aumentando la presión para que el gobierno estadounidense intervenga en este caso.

Sarah Margon, de la organización Human Rights Watch (HRW), lamentó la reacción estadounidense tardía y timorata, y estimó que Washington "dispone de herramientas para responder rápidamente, es una cuestión de voluntad política".

Reporteros Sin Fronteras reclamó por su lado la realización de una “investigación internacional independiente”, y recordó que más de 15 periodistas y blogueros saudíes fueron detenidos un año atrás “en la más total opacidad”.

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