Roma, Italia | AFP.

Varias ciudades italianas, como Roma, Milán y Palermo, serán el escenario este sábado de manifestaciones y marchas de movimientos de extrema derecha y de militantes antifascistas bajo fuerte vigilancia policial, a una semana de las elecciones legislativas del 4 de marzo.

En la capital italiana se desplegaron 3.000 policías para vigilar dos marchas y tres sentadas organizadas por la izquierda y la extrema derecha y que podrían reunir a unas 20.000 personas.

La mayor manifestación en Roma protestará contra el racismo y el fascismo bajo el lema “Nunca más fascismo”. Se espera que a esta marcha acuda el ex primer ministro Matteo Renzi, dirigente del Partido Demócrata, en el poder, junto a los grandes sindicatos italianos.

Otra marcha antifascista convocada por un sindicato de extrema izquierda protestará contra una reforma emblemática del gobierno de Renzi lanzada en 2014 con para liberalizar el mercado de trabajo, facilitando los despidos y favoreciendo las contrataciones.

Una de las sentadas de la capital estará liderada por Giorgia Meloni, presidenta de Fratelli d’Italia, un pequeño partido de extrema derecha que también llevó a cabo una acción por la mañana en Milán.

En Palermo (Sicilia), el líder del grupúsculo de extrema derecha Forza Nuova, Roberto Fiore, desfilará para protestar contra la agresión del martes a un representante local del movimiento.

Un poco antes, en otro barrio de Palermo marcharán militantes del movimiento de extrema izquierda Potere al popolo (Poder para el pueblo).

En Milán, el dirigente de la Liga Norte, Matteo Salvini, saldrá también a las calles. Este partido de extrema derecha se alió con la derecha de Silvio Berlusconi para las próximas elecciones legislativas, el 4 de marzo, junto a Fratelli d’Italia.

A la misma hora, el dirigente del movimiento neofascista Casapound intentará también congregar a partidarios en la capital económica de Italia.

El pasado 3 de febrero, un militante de extrema derecha hirió de bala a seis africanos por el asesinato de un joven toxicómano por el que fueron arrestados varios nigerianos. Desde entonces se han multiplicado los incidentes violentos entre militantes antifascistas y de extrema derecha al margen de la campaña electoral en Italia.