Cuentan con un frigorífico para un mejor aprovechamiento de la ganadería. Exportan nuez de macadamia a Hong Kong, Vietnam y Japón, siendo la cooperativa la que concentra la mayor cantidad. Producen harina y también exportan soja envasada al Japón.
Ciudad del Este. Agencia Regional.
En el municipio de Yguazú, una comunidad habitada en su mayoría por ciudadanos de origen japonés, los productores vieron hace muchos años la necesidad de no quedarse solo en la producción agrícola, sino dar valor agregado y diversificar a lo que ellos mismos producen. La Cooperativa Yguazú Agrícola Ltda. es la que se proyecta de esa manera. Es una entidad donde la mayoría de los socios se dedica al rubro agrícola y un poco a la ganadería. Tiene su propia marca de harina, faena y vende carne producida por los socios, exporta nuez de macadamia y soja no transgénica envasada al Asia.
Dentro del proyecto de sumar valor a lo que producen, “hace poco la cooperativa decidió invertir en el sector ganadero para que los socios tengan beneficios en la producción ganadera y para eso instalamos una matadería/frigorífico donde el socio puede enviar su producto y recibir un cobro seguro”, explicó el joven gerente de la entidad, Vidal Tsutsumi, a La Nación. “Estamos muy pendientes de la soja y era necesario diversificar, por lo que decidimos empezar a fortalecer al sector ganadero”, agregó.
La cooperativa tiene 84 socios y si bien es una minoría la que se dedica a la ganadería, la entidad decidió realizar una fuerte inversión para darle sustentabilidad al sector, con el objetivo de mejorar la rentabilidad y ofrecer otras alternativas a los socios. Es lo que dijo Víctor Ito, uno de los directivos. Así decidieron crear el Frigorífico Nikkei, acorde a las exigencias legales. Fue habilitado el 10 de diciembre del 2018 y demandó una inversión de 900.000 dólares, que incluyeron las obras civiles, la instalación de la planta de tratamiento y la línea de faenamiento.
Está ubicado en un pre dio de veinte hectáreas de la cooperativa, alejado del casco urbano, en el km 53 de la Ruta 2. En Minga Guazú también cuentan con un local donde venden la carne producida. Se faena 350 animales por mes, lo que equivale a unos 90 mil kilos de carne vendida mensualmente, indicó Tsutsumi. La carne tiene como mercado a algunos de los municipios cercanos y un plan próximo es ingresar a un centro de consumo más grande como es Ciudad del Este.
“En la matadería procesamos ganado vacuno producido por los socios y no socios, el proceso en sí es faenar hasta media res y estamos proyectando una instalación para los cortes que serían los envasados en vacío. Hasta ahora estamos procesando hasta media res y vender a las carnicerías principalmente”, siguió explicando el gerente de la Cooperativa Yguazú. Reconoció que la faena es muy poco aún, pero aseguró que el proyecto es consistente y tiene condiciones de ir creciendo con la obtención de más mercado. Destacó que por el crecimiento de la demanda también faenan animales de productores no socios de la Cooperativa Yguazú, con lo cual son una opción de renta para otros pobladores de la región.
HARINA LLEGA A ASUNCIÓN
“La Cooperativa Yguazú instaló hace veinte años un molino harinero para ofrecerles opciones de rentabilidad al productor de granos, en este caso el trigo. Nacimos con el objetivo de darle valor agregado a las materias primas producidas por los socios, tenemos un molino en el que se produce la harina de la marca Nikkei, siendo que en las panaderías va el 90% de nuestra producción”, dijo Vidal Tsutsumi. El 50% va a Ciudad del Este y el resto a otras ciudades del país como Asunción, Coronel Oviedo, Villarrica y otras.
Siendo la producción agrícola la que más ocupa a los socios, no solo al trigo le dieron un valor agregado procesando el grano para la harina, sino también la soja está teniendo una variedad. “Exportamos a Japón, un mercado exigente, granos de soja envasados, seleccionados, no transgénica y con alto valor de proteína, en tamaño único, para salsa de soja y queso de soja”, señaló el gerente de la Cooperativa Agrícola Yguazú Ltda.
ENGORDE A GRAN ESCALA
Uno de los directivos del Frigorífico Nikkei, Víctor Ito, manifestó que la expansión es el objetivo. Dijo que hasta ahora lo que hacen es comprar animales de los socios y no socios, faenar en el frigorífico y vender a supermercados y carnicerías en media res o al gancho. Sin embargo, no se quedan con eso. “Incentivamos a los socios a que aumenten la cantidad de animales porque la ganadería es un poco más estable, para eso les explicamos, les incentivamos, dándoles créditos, asistencia, pero no es que haya aumentado tanto como esperamos”, relató. No obstante, no se quedan con eso. Decidieron centralizarse en una sociedad anónima para realizar engordes de ganado para satisfacer la demanda.
“Lo que decidimos es juntarnos entre todos para que pueda generarse un confinamiento centrado, les decimos condominio, donde ponemos todos capital, y hacer un engorde a gran escala para poder abastecer nuestro frigorífico. Estamos formando una SA donde podamos participar cada uno con nuestro aporte y centralizar en un solo lugar”, explicó Ito. La proyección no se queda solo en eso. “Cuando se estabilice en cantidad y calidad pensamos hacer cortes envasados de la carne”, informó el directivo.