- Por Aldo Insfrán, aldo.insfran@gruponacion.com.py
- Fotos Pánfilo Leguizamón
Lorena Segovia, titular del Ministerio de la Defensa Pública, asegura que los defensores deben llevar un máximo de 70 causas y no 200 como lo hacen actualmente. Desde que asumió, trabaja para lograr la especialización de los mismos, así como priorizar y efectivizar el servicio a los sectores más vulnerables.
La atención a sectores vulnerables, entre ellos los reos pobres, la especialización de los defensores públicos, la mejora del servicio a la ciudadanía y la disminución de la cantidad de causas que maneja actualmente cada defensor, son algunos objetivos de la titular del Ministerio de la Defensa Pública, Lorena Segovia, quien días atrás cumplió 5 meses al frente de la citada institución.
La defensora general recibió en su despacho a La Nación y antes de un mano a mano adelantó que la crisis penitenciaria significó poner sobre el tapete el hacinamiento en el que se encuentran las personas privadas de libertad, hecho que configura una situación de extrema vulnerabilidad.
“Tenemos que entender que no solamente están privadas de su libertad. En la situación actual en la que se encuentran también están privadas de otros derechos, como la salud y la atención digna. Existe violación de los derechos humanos”, refirió Segovia y agregó que para tratar de paliar en parte esta coyuntura apuraron la depuración de causas penales.
“Creamos una comisión de depuración de causas y allí trabajamos para saber cuántas personas están privadas de su libertad y cuántas podrían abandonar la cárcel. Como resultado obtuvimos la libertad de 1.079 reos, quienes abandonaron las diferentes penitenciarías de nuestro país”, precisó.
Esta “depuración” no solo logró reducir la cantidad de personas que eran asistidas por Defensa Pública, unas 5.800, sino que también ayudó a mejorar el servicio a aquellas que permanecen. “Obtener la libertad de esas personas fue un gran salto cualitativo respecto a la prestación de servicio que estamos llevando adelante”, reveló.
Causas por defensor
Actualmente, cada defensor público maneja en promedio más de 200 causas penales. Para Segovia, un defensor puede llevar un máximo de 70 causas.
“Desde mi experiencia como abogada, era abogada litigante, una persona no puede llevar óptimamente más de 70 expedientes, ni siquiera utilizando la tecnología. Hoy cada defensor público lleva tres veces más causas de las que puede”, lamentó y subrayó que lo ideal es apuntar a reducir la cantidad de expedientes por defensor para así asegurar mayor eficiencia en las diligencias.
Una de las medidas tomadas para tratar de optimizar el trabajo de los defensores fue reorganizarlos. “Antes de solicitar mayor cantidad de defensores públicos, estamos organizando el trabajo. Por ejemplo, algunos defensores que estaban en Asunción fueron derivados a sus lugares de origen, es decir, donde fueron designados en principio”, explicó y agregó que en la medida en que se vean los resultados se podrá plantear contar con mayor cantidad de defensores.
Hacinamiento de reos
En su busca de revertir el hacinamiento en las cárceles, Defensa Pública identificó un problema de estructura en el Código Procesal Penal, específicamente en el artículo 245 “De la prisión preventiva”, por lo que realizó un planteamiento para modificarlo. Finalmente, este fue aprobado y a partir de ello está en manos de los jueces decretar prisión o dar libertad al procesado conforme a cada caso.
Otro factor que contribuye al hacinamiento es la mora judicial. De acuerdo a Segovia, esta puede disminuirse con la activa participación de todos los operadores de justicia, es decir, el Poder Judicial, la Fiscalía y la Defensa Pública. Como ejemplo citó que la Corte Suprema de Justicia dispuso que las audiencias que no pudieron realizarse por la mañana se lleven a cabo en horas de la tarde. “Este compromiso lo asumimos todos los operadores”, subrayó.
Defensores en Central
Atendiendo la complejidad de casos en Central, en principio Segovia consideró que ameritaba una mayor cantidad de defensores en el departamento, pero después la realidad le hizo ver que también necesitaba lograr una mayor especialización de los mismos.
“No se trata solo de disminuir los expedientes por cada defensor, sino de que los mismos tengan fueros especializados, aquel que es penalista y se está formando en ello que permanezca ahí, el que está haciendo niñez y especializando en ese fuero que permanezca dentro de ese ámbito”, argumentó.
A fin de año, el Ministerio de la Defensa Pública tendrá un mejor panorama de la situación en función a los cambios implementados y a partir de ello, a decir de Segovia, “se sabrá cuántos defensores se necesitan no solamente para disminuir la cantidad de expedientes que actualmente atienden, sino también para apuntar a un servicio más especializado”.
Servicio eficiente
Para la ministra, lograr un servicio eficiente requiere, indefectiblemente, de especialización. “Nosotros creamos, en el tiempo que estamos al frente del MDP, grupos especializados de defensores. Hoy tenemos algunos defensores especializados en grupos de indígenas, en personas migrantes y solicitantes de refugio, así como aquellos que tendrán a su cargo causas de narcotráfico, lavado de dinero. Estamos formando defensores en temas importantes y trascendentes. También tenemos defensores especializados en violencia hacia las mujeres”, reseñó.
La directriz es ofrecer especial atención a los sectores vulnerables, entre ellos personas privadas de su libertad; niños, niñas y adolescentes; mujeres víctimas de violencia; pueblos indígenas; personas refugiadas y solicitantes de refugio; grupos LGTBI; personas con discapacidad y adultos mayores.
“Estos son los siete grupos más vulnerables y estamos trabajando para brindarles un mejor servicio a través de la especialización, tomando conocimientos de las normas y convenios internacionales en cada sector”, concluyó Segovia.
“Cumplir con las audiencias y juicios orales solo se logra con el compañerismo”
“Cumplir con las audiencias y juicios orales solo se logra con el compañerismo, ya que generalmente se superponen. Ocurre que los juicios orales se desarrollan en Luque, Fernando de la Mora, San Lorenzo y Lambaré. Por tanto, a veces se torna difícil cubrir las audiencias en San Lorenzo, entonces, nos cubrimos. Por ejemplo, el titular de la causa va al juicio y otro defensor cubre las audiencias en los juzgados de Garantías de San Lorenzo. No hay una constante, hay días en que tenemos tres audiencias, otros cinco y otros una, pero generalmente, cuando tenemos pocas audiencias, aprovechamos para realizar visitas penitenciarias. Somos 5 defensores en el fuero penal ordinario y entramos de turno cada 10 días. Esto implica asistir a detenidos, personas en libertad en sede fiscal y otros”.
“Hay veces en que tenemos dos juicios en un mismo día y ahí hacemos malabarismo”
“El principal problema que tenemos es que las causas nos llegan días antes del inicio de la audiencia oral. Cuando la causa es compleja, pedimos que se postergue el juicio. Algunos nos dan más tiempo para preparar la defensa de nuestro representado, mientras que otros no porque también están saturados. Hay veces en las que tenemos una sola semana para cuatro juicios chicos, así como podemos tener un juicio grande durante varios días. Hay veces en que tenemos dos juicios en un mismo día y ahí hacemos malabarismo. Los defensores no podemos planificar vacaciones, ya que siempre tenemos que estar atentos a las convocatorias. Cuando un defensor adquiere personería jurídica en una causa, ya tiene responsabilidad en la misma. Tenemos que estar bien afilados y en permanente capacitación”.