Margot Robbie confesó que puso una única condición para protagonizar Barbie, película que se estrenará el jueves 20 de julio. Durante una entrevista, la actriz australiana dijo que antes de comenzar las grabaciones, negoció con la directora del filme Greta Gerwig, incluir una casa de ensueño con un tobogán que vaya desde el dormitorio hasta la piscina.

“Lo primero que le dije a Greta cuando nos sentamos por primera vez y hablamos sobre la película fue ‘seguiré tu visión, lo que tú quieras que sea esta película de Barbie, hagámoslo, pero te pediré un solo favor a cambio. Por favor, ¿podemos tener una casa de ensueño donde ella tenga un tobogán que vaya desde su dormitorio hasta su piscina? Porque esa es mi meta en la vida’”, comentó Margot Robbie en The Kelly Clarkson Show.

La actriz estadounidense también habló sobre su amor por Barbie durante su infancia y reveló que gustaba jugar con la muñeca cuando era pequeña. Además, contó que para una Navidad le regalaron una casa de Barbie y eso tuvo gran impacto en su niñez, por lo que la oportunidad de ver en la realidad la ‘DreamHouse’ con un tobogán gigante fue una de las cosas que más le hizo ilusión al rodar la película.

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La mítica escena de los zapatos de Barbie

El adelanto que se robó la atención y convirtió en un momento clave para este live action, es cuando Margot se saca los zapatos de tacos rosas, y luego sigue caminando sin perder la característica forma de los pies de la muñeca. Fueron muchas las teorías que surgieron sobre cómo fue grabada esa secuencia.

Algunos creyeron que se trataba de una animación computada y otros que los pies eran de una bailarina y no de la protagonista. Sin embargo, fue la actriz quien le puso un final al debate cuando, en otra entrevista, contó la verdad del detrás de escena. “Siempre trato de hacer mis propias escenas de inserción. No me gusta cuando veo una película y sé que no son mis manos. Lo odio tanto. Siempre le digo al director: ‘Por favor, déjame hacer todas mis escenas. No me gusta saber que no lo hice’”, explicó.

“Utilizaron pequeños trozos de adhesivos en el suelo, cinta adhesiva de doble cara en los zapatos para que no se desprendieran y poder sacar mis pies de ellos. Y me agarré a una barra, eso fue todo. No estaba usando arneses ni nada por el estilo. Simplemente me acerqué, me aferré a la barra sobre la cámara”, detalló.

Esta no es la primera vez que Robbie pone a prueba todas sus habilidades físicas para un rol, ya que cuando interpretó a Harley Quinn en Suicide Squad hizo un entrenamiento intensivo, gracias al que pudo hacer todas sus escenas de riesgo, incluyendo dar un salto hacia atrás caminando por las paredes.

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