Los profesores José Miguel Aguinaga y Ruth Acuña Eldinger dirigen un taller en el cual enseñan a crear figuras mágicas con la milenaria técnica del plegado de papel nacida en el Japón bajo el nombre de origami. El curso está dirigido tanto a niños como a jóvenes y adultos. Los chicos, a partir de los 6 años de edad, pueden asistir los viernes, de 17:40 a 19:00, o los sábados, de 14:30 a 16:00. Entretanto, los más grandes, a partir de los 14 años de edad, reciben clases todos los sábados de 16:00 a 17:30. En ambos casos, el taller tiene un costo de G. 50.000 que incluyen los materiales.
“Cada semana aprenderemos figuras de diversa dificultad, mejorando la motricidad fina, la concentración y la paciencia con este arte milenario japonés”, señaló el profesor Aguinaga. El punto de encuentro es el Colegio Nihon Gakko de la ciudad de Fernando de la Mora, Zona Sur (Francisco Vergara casi Acceso Sur). Para más informes, comunicarse al (0981) 773-789.
BENEFICIOS
El origami, llamado también papiroflexia, se realiza empleando una serie de técnicas que permiten crear figuras en papel doblándolo, sin realizar cortes ni usar pegamento. Además de ser entretenido, tiene una serie de beneficios para los niños que van desde la estimulación de la creatividad o la coordinación óculo-manual a la mejora de la comprensión matemática a través de la geometría.
También se desarrollan las habilidades artísticas.
Además, al realizar actividades manuales acelera el proceso de maduración del cerebro de los más pequeños ya que la coordinación exige el uso de ambos hemisferios cerebrales. Es un trabajo activo de nuestra capacidad, igual que lo es la escritura a mano.
En los adultos, puede potenciar la memoria, combatir el estrés y tratar dolencias como la artritis y la depresión, entre otras, según expertos. En los de la tercera edad puede ser, incluso, una terapia ocupacional muy interesante.