La caída de cabello es uno los efectos secundarios de la chi­kungunya que la mayoría de los pacientes reportan princi­palmente en la etapa final de la enfermedad. Si bien esta alteración podría persistir por semanas o meses, la der­matóloga Olga Aldama indica algunos tratamientos.

La especialista explica que la pérdida de pelo es debido al estrés que causa la infección viral en nuestro organismo, ya que el cuerpo prioriza órganos vitales durante el proceso infeccioso y las par­tes no vitales, como el cabello y las uñas padecen los efec­tos de la enfermedad. Este tipo de alteraciones también suelen presentarse por otras infecciones, como por dengue o covid-19.

Aldama señala que esto se conoce como efluvio teló­geno, que en términos médi­cos es la alteración del ciclo vital del pelo, especialmente en la fase de crecimiento, que produce una pérdida de cabello notable durante un período de tiempo. “Otro cuadro que puede afectar al cabello es la alopecia areata, y brotes de dermatitis sebo­rreica en los que padecen esta afección de piel”, profundiza en conversación con el dia­rio La Nación/Nación Media.

Si bien esta alteración podría persistir durante semanas o meses, ya que depende del organismo de cada paciente, en muchos de los casos es reversible si se aplica el trata­miento adecuado. “No pode­mos detener la caída del cabe­llo, pero podemos ayudar con el aporte de multivitaminas por vía oral a fortalecer los folículos que sufrieron falta de nutrientes”, señala.

La dermatóloga también recomienda estimular el crecimiento con fármacos que cumplan esa función y esperar que el proceso sea detenido fisiológicamente. Además, aconseja llevar una alimentación equilibrada a base de nutrientes comple­tos, proteínas y vitaminas. Por ejemplo, rica en car­nes, frutas y verduras y, por supuesto, una buena ingesta de agua diaria.

“No podemos detener la caída del cabello, pero podemos ayudar con el aporte de multivitaminas por vía oral a fortalecer los folículos que sufrieron falta de nutrientes”.