Un clásico universal de la literatura infantil, “Alicia en el país de las maravillas”, es ilustrado desde una visión particular por un grupo de artistas paraguayos cuyas obras están en exhibición hasta el próximo 5 de enero. Se presenta como una interesante actividad cultural para disfrutar con los chicos en estas vacaciones ya que es una exposición pensada “para niños de 0 a 100 años”.

Profesionales de la ilustración, integran­tes del Club de Litera­tura y Arte, interpretan una de las joyas universales de la literatura infantil creando ori­ginales obras con diferentes técnicas como pintura acrí­lica, óleo, acuarela, tinta e incluso grabado. Las mismas están expuestas en las insta­laciones de la librería Libru­ras de Luque, sucursal Esta­ción Los Jardines, y se destaca como una propuesta muy inte­resante para ser visitada por grandes y chicos en estas vaca­ciones.

La muestra permanecerá abierta hasta el jueves 5 de enero, de lunes a sábados, de 9:00 a 21:00, y los domingos, de 10:00 a 21:00. ¿Y dónde está Alicia?, de Amelí Schnei­der; ¿Quién sos vos?, de Daiana Stanley; Conejo blanco, de Fernando Martínez; Una merienda de locos, de Jimena Zaldívar; Silgis Omo Hereda, de Vero Sforza y Asombro, de Ale Marín conforman la exhi­bición artística.

Esta exposición es para niños de 0 a 100 años. Sus imágenes son un lenguaje que invita a toda la familia a disfrutar del arte de la ilustración de cuen­tos, a acceder a los clásicos de la literatura infantil e ilustra­ciones originales de artistas que habitan el Paraguay, ade­más de acceder a libros ilustra­dos de este y otros clásicos por estas fiestas en Libruras. Con estas acciones se busca promo­cionar el libro y la lectura en Paraguay.

A principios del siglo XX, “Ali­cia en el país de las maravillas” ya era un clásico; desde enton­ces, se multiplicaron las edi­ciones ilustradas. El británico Arthur Rackham por primera vez le puso color. “Creemos importante visualizar las crea­ciones paraguayas y decidimos reinterpretar esta maravillosa obra, muchas de ellas en blanco y negro en homenaje a sus orí­genes, otras con inmenso colo­rido haciendo honor al mundo de fantasía que este clásico de la literatura infantil ilustrada ofrece”, destaca Amelí Sch­neider.

Las imágenes de los libros infantiles ilustrados históri­camente fueron las mejores mediadoras entre lectura y lectoescritura en nuestra pri­mera infancia. Cumplen un rol profundo que dinamiza el encuentro de cada artista con la obra, planteando preguntas metafóricas y existenciales que llevan a crear obras que nacen de preguntas.

¿Y dónde está Alicia?, de Amelí Schneider, alude a la búsqueda y necesidad de ese mundo de fantasía, y ¿Quién sos vos?, de Daiana Stanley, sigue la lógica de la búsqueda de ese emocio­nante encuentro con lo des­conocido, de lo nuevo, de lo inquietante que estos perso­najes nos traen.

Sus imágenes son un lenguaje que invita a toda la familia a disfrutar del arte de la ilustración de cuentos y acceder a los clásicos de la literatura infantil.

Recorriendo esta expo­sición se puede ver el resultado de la investi­gación gráfica de Vero Sforza, inmersa en los juegos de lógica y las investigaciones de Charles Dodgson y sus cuatro libros de lógica matemática para niños, representada en su obra Silgis Omo Hereda, una composición llena de silogismo y juegos que se pueden resolver, donde todas las respues­tas están desordenadas.

En el medio de su creación se representa mediante trazos muy libres a la Alicia que inspiró el cuento de Alice Liddell. El nombre de su obra nace de Omo, es un desorden de la pala­bra silogismo. Lewis Carroll realizaba este tipo de juegos en la correspondencia que enviaba; desordenar una palabra para crear otras.

En la muestra resalta igualmente la aproximación al mundo infantil que el artista Fernando Martínez presenta por medio de la aventura y la urgencia de jugar con la obra titulada Conejo blanco. En las respuestas de la artista Daiana Stanley, su obra gráfica expresa “soy grande y pequeña, buena y mala, dentro y fuera, niña y oruga”.

Entre tanto, en la obra de la artista Jimena Zaldívar, titulada Una merienda de locos, donde en el Reino del Revés nadie baila con los pies, se alude a las variadas respuestas de la infancia, donde lo insólito y lo impredecible, lo fantástico y lo posible existen. Y, finalmente, se destaca la creación de la artista Ale Marín, quien grafica una de las características principales de la infancia en su obra titulada Asombro, en la que con ojos de niño menciona ver lo particular y lo universal, lo efímero y lo eterno.