Encarnación. Agencia regional.

Por disposición de la jueza Gra­ciela Samudio, el ciudadano brasileño Valdemir Borcato (36) ya guarda reclusión en el Centro de Rehabilitación Social (Cereso). El mismo es el principal sospechoso del cri­men de Horacio David Verón Báez (28), cuyo cuerpo fue encontrado en una fosa en el interior de un lavadero en pleno centro de Encarnación. Otras siete personas también están detenidas e imputadas en este caso, en calidad de cómplices.

A más del brasileño Valdemir Borcato, imputado por homi­cidio doloso, están procesa­dos Carlos Javier Yeza, Rafael Peralta Domínguez, Julio César Villalba Fernández y Cristian Daniel Caballero Gómez, quienes trabajaban en el lavadero “Demi”, propie­dad de Borcato. Así también, Isabelino Ayala Rivas, Rubén Fleitas Torres y Juan Darío Bordón, quienes habrían rea­lizado el trabajo de albañilería dentro del lavadero. Los ocho ya declararon ante la fiscala de la causa, Lorena Castelví, y otros agentes fiscales, quie­nes están coadyuvando en la investigación.

Cabe destacar que el joven universitario Horacio David Verón Báez (28) desapareció el miércoles 24 de abril, y tras una serie de pesquisas, los inter­vinientes lograron el lunes último encontrar su cuerpo en una fosa en el interior del lava­dero “Demi”, ubicado sobre la calle Carlos Antonio López entre 25 de Mayo y Villarrica, en pleno centro de Encarna­ción. El local era explotado por el brasileño, hoy principal sos­pechoso del crimen.

La captura de Borcato se rea­lizó alrededor de la mediano­che del lunes en el kilómetro 10 de la Ruta 1, zona de San Juan del Paraná, luego de un gran despliegue policial en diversos sectores de la ciudad de Encar­nación y alrededores. En horas de la madrugada del martes, el detenido intentó suicidarse ahorcándose con su ropa inte­rior, pero efectivos policiales de la Comisaría Primera se percataron y lo trasladaron al Hospital Regional de Encar­nación, donde se constató que las lesiones eran superfi­ciales, por lo que fue remitido al Ministerio Público donde prestó declaración. Luego, ya en horas de la noche del mar­tes, fue remitido al tribunal, donde la jueza dispuso su remi­sión al penal de Itapúa.

Por otro lado, cabe destacar que, tras la autopsia realizada en Asunción, el médico forense Pablo Lemir confirmó que el joven Horacio David Verón, de 28 años, recibió 6 impactos de arma de fuego en diferentes partes del cuerpo como el crá­neo, tórax, cuello y la espalda. Antes, se había dicho que había muerto por un golpe en la cabeza, quedando esto des­cartado.