Luciana Ferreira Barbosa, de 36 años de edad y con tres hijos, nativa de la comunidad Ishir de Puerto Diana, distrito de Bahía Negra, departamento del Alto Paraguay, culminó la carrera de Derecho y ayer juró como abogada ante el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Raúl Torres Kirmser, y la ministra Alicia Pucheta de Correa.
Ferreira se mostró muy contenta por la etapa que terminó y a su vez señaló que eligió el día de ayer para jurar como abogada debido a que se conmemora el Día del Indígena Americano. La nueva abogada de la comunidad Ishir dijo que "uno de los motivos por el cual decidí estudiar Derecho fue por las injusticias que pasan muchas veces los indígenas, que por desconocimiento de sus derechos son despojados de sus tierras". Agregó que "estoy muy orgullosa de ser indígena y de pertenecer a mi pueblo, de recibirme para poder servirlo, de ser útil no solo a mi pueblo, sino a todos los pueblos originarios".
La nueva abogada pidió que se brinde mayor oportunidad a los jóvenes indígenas que están estudiando para salir adelante. Sostuvo que "no es fácil trasladarse de tu comunidad hasta la capital y eso requiere apoyo económico a los indígenas".
Añadió que "si bien nos encontramos en el siglo XXI, aún muchos estudiantes indígenas se sienten discriminados en las universidades". Sin embargo, aclaró que ella particularmente en ningún momento sufrió discriminación en la universidad donde estudió la carrera de Derecho. Finalmente, envió un mensaje a las personas para que se animen a estudiar: "Se deberían animar no solo los indígenas, sino todos. No es fácil, es un camino difícil, pero con perseverancia se puede llegar", opinó.
Ferreira actualmente trabaja en la Dirección Jurídica del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) y está contratada.
La mujer captó la atención en el pasillo del Poder Judicial y a su vez recibió felicitaciones de parte de varios profesionales del Derecho.