De la nada, una firma sin rastros de licitaciones en su haber y que funciona en una oficinita en Lambaré, liderada por Claudio González Samaniego, primo de Ariel Samaniego, se adjudica megacontratos de manera directa, gracias a resoluciones del director paraguayo de la binacional. En el negocio aparece como socio un joven de 30 años, empleado de una empresa constructora.

• Por Rossana Escobar M.
• rossana.escobar@gruponacion.com.py

Actas del Comité Eje­cutivo de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) y resoluciones que lle­garon a nuestras manos reve­lan jugosas contrataciones de manera directa a favor de la firma de un primo de Ariel Samaniego, yerno del direc­tor lado paraguayo, Nicanor Duarte Frutos.

La pila de documentos a los que accedimos denota un manejo discrecional de miles de millones de dóla­res hasta si se quiere de pre­benda a casi todos los orga­nismos del Estado, incluidos entes de control, entre los que se identifica un proveedor del clan del yerno de Duarte Fru­tos. Se trata de la firma CGS Ingeniería y Seguridad SA, en la que figuran como accio­nistas Claudio Antonio Gon­zález Samaniego y Sebastian Semidei Colmán, el pri­mero es el primo de la fami­lia política del director para­guayo de Yacyretá, mientras que el segundo es un joven, empleado de una empresa constructora que, según IPS, percibe sueldo de G. 8,4 millo­nes al mes.

La empresa funciona en una pequeña oficina en la ciudad de Lambaré y los informes con­firman que es una firma cons­tituida con capital de unos G. 200 millones en noviembre del año 2015. No existen rastros de adjudicación en licitaciones públicas, como mucho aparece que CGS postuló el año pasado en una licitación de la Ande, en la cual rebotó.

En Yacyretá le fue muy bien a la pequeña firma y en pande­mia facturó millones. Según los papeles, entre el 2 de agosto del 2021 al 15 de setiembre del 2021; es decir, en un mes y medio, CGS Ingeniería y Segu­ridad SA se favoreció con tres contrataciones directas que suman US$ 811.000. Todas ellas se inician con autoriza­ciones por resolución del direc­tor paraguayo.

La primera autorización de contratación directa se había generado con un pedido de urgencia caratulada como impostergable por parte del intendente de la Municipalidad de Yabebyry, Ignacio Brizuela, quien requirió la tecnología por “la inseguridad reinante en su ciudad”. Es así que, para colocar 36 cámaras de circuito cerrado con 8.000 metros de cable óptico y 2 monitores, la firma del primo se alzó con un contrato de US$ 195.895, unos G. 1.351 millones al cam­bio actual.

Esta “urgencia imposterga­ble” había sido objetada por la Unidad de Compras de Yacyretá, ya que no se trata de necesidades atribuidas a con­secuencias de desastres y “de no provisionarse en tiempo sumamente breve no produ­cirá daños que se pueda pre­ver”. Sin embargo, la contra­tación ya estaba consumada por resolución del director paraguayo, tal como refiere la observación del área de fiscali­zación de contratos, ya no pudo retrotraerse la adjudicación.

La siguiente contratación directa es del 3 de setiem­bre del 2021 por valor de US$ 459.800, unos G. 3.172 millones al cambio actual. La adjudica­ción fue para la readecuación de 24 km de fibra óptica desde el Data Center del Área de Tec­nologías de la Información y Comunicación, sede Ayolas, hasta el Data Center de la cen­tral hidroeléctrica Yacyretá. Tras este contrato, en menos de 15 días aparece otro por valor de US$ 155.500, unos G. 1.072 millones, para la instalación de cámaras en zona de obras del Brazo Aña Cuá.

“Nos pidieron presupuesto, hicimos un relevamiento y le pasamos nosotros el pre­supuesto”, respondió Clau­dio Samaniego, dueño de CGS, cuando le consultamos sobre su contrato en el caso de Yabebyry. Agregó que desde “el año 2009 más o menos que trabajamos para la enti­dad, hacemos instalaciones de cámara, circuito cerrado, todo lo que es sistema de alarma contra incendio, a lo mejor nuestra oficina es pequeña, pero nosotros estamos tra­bajando hace casi 10 años en el mercado en la parte de segu­ridad”; sin embargo, la firma como tal fue constituida en el 2015, según Hacienda.

Entre las actas del Comité Ejecutivo de Yacyretá aparece también una adjudicación para adquisición de equipos informáticos a ser utilizados en las distintas dependencias del Centro Administrativo, sede en Ayolas, a Vanessa Adriana Troche Villasanti, nada menos que la esposa de Sebastian Semidei, socio de Claudio González Samaniego, primo del yerno de Duarte Frutos.

Vanessa es una talentosa fotógrafa, que por lo visto es una prudente emprendedora del rubro tecnológico, ya que en redes se la ve más bien captando momentos, antes que promocionar equipos informáticos.