Hay al menos una docena de inspectores de la Patrulla Caminera que ya cumplieron los 30 años de servicios, tiempo establecido para acoplarse al retiro y la jubilación.

• POR ROSSANA ESCOBAR M.
• rossana.escobar@gruponacion.com.py

El escandaloso caso de los planilleros vip de la Patrulla Caminera donde se mantiene con jugo­sos sueldos a 15 inspecto­res que no trabajan no es el único drama sin resolverse en la institución.

Así como los vip que cobran salario de G. 9,7 millones desde la comodidad de sus hogares desde hace 3 años, evitando el pase a retiro gracias a un permiso espe­cial firmado por el minis­tro Arnoldo Wiens, en la institución hay al menos una docena de inspectores caminera que ya están con los años de servicio encima; es decir, cumplidos los 30 años al servicio al Estado.

“La carrera como uniforma­dos termina a los 30 años de servicio”, había señalado el inspector principal Carlos Ferreira, coordinador jurí­dico de la Patrulla Cami­nera, las veces que conver­samos sobre los planilleros vip y el tiempo que le toca a cada uno dentro de la ins­titución.

En la institución estalló un escándalo sin preceden­tes consistente en permi­sos especiales para plani­llear con salario incluido, luego de que este grupo de uniformados pasara a cargo del ministro de Obras tras la asunción como director nacional de un camarada menos antiguo.

Tras este hecho comenza­ron a saltar nombres de ins­pectores con años de servi­cio que ya debieran estar jubilados o en trámites. Sin embargo, la temática en la Caminera no es precisa­mente acoplarse al retiro y la jubilación por los bajos sala­rios que percibirán, según los cómputos de la caja de jubilaciones.

El grupo de inspectores vip cuesta G. 1.894 millo­nes anuales a los contribu­yentes. Esta situación ade­más genera otros efectos negativos ya que a causa de este recurso mal utili­zado no se puede realizar la equiparación salarial de otros inspectores que en teoría ascienden, pero son ascensos sin el acom­pañamiento económico.

La situación se torna insos­tenible, primero por el pago indebido que están reali­zando en la institución, y por el desangre al presu­puesto que debiera priori­zar otros gastos.

La agenda de la Junta de Calificaciones de la Patrulla Caminera se centró ayer en el caso de los planilleros vip. Las primeras filtra­ciones de la reunión hablan de la conformación de una mesa téc­nica para plantear una solución al problema que en este momento sacude a la institución. Sin embargo, la intención es apagar el incendio buscando a través de Recursos Humanos un lugar para estos vip que desde sus casas cobraron salario por tres años sin trabajar. “La mesa técnica, previo a la decisión de la comisión de calificaciones, estudiará el caso y buscará una salida legal y sin sobrepasar también los derechos que les amparan a los inspecto­res”, señaló el coordinador jurídico de la Patrulla Caminera, Carlos Ferreira, a su salida de la reunión en el MOPC. En realidad, la mesa técnica ya prácticamente está conformada y la meta es recoger a los 15 planilleros. Para esta estrategia la orden fue postergar “el análisis” de la situación hasta el próximo 25 de noviembre, mientras se enfría un poco la situación. Varios de los que integran la junta de calificaciones también están con los años de servicio encima para el pase a retiro por lo que se entiende sus respectivos alineamien­tos al esquema que por tres años mantuvo 15 planilleros a costa de los contribuyentes. Mientras buscan una salida al escándalo, ningún ente de control se ha dado por enterado del desfalco presupuestario en la Patrulla Caminera, como la Contraloría y la Fiscalía.

De no creer, además de la licencia para cobrar sin trabajar, el ministro firmó el ascenso de Do­mingo Méndez, uno de los inspectores vip.

El inspector general Domingo Méndez, que al inicio de nues­tra investigación se había mos­trado indignado por cobrar sin trabajar, resultó con privilegios de “oro”.

Estando en casa, el ministro Arnoldo Wiens le otorgó un ascenso de inspector principal a inspector general mediante Resolución N° 1969 de fecha 26 de agosto del 2019. Junto con el agente también reci­bió su asenso la actual jefa de Comunicaciones de la Patru­lla Caminera, Clara Noemí Alvarenga, de inspectora ayu­dante a inspectora de Segunda. Ambos tuvieron su ascenso en ese año, luego de serias denun­cias de las que fueron blanco en un caso de pedido de coima en Pozo Colorado.

Alvarenga es la “compañera” a la que Méndez había vincu­lado a los negocios de alqui­ler de salones comerciales durante nuestras pesquisas. Las investigaciones termina­ron con la confirmación de que ella declaró como suyo el gigantesco complejo comer­cial, además de otras impor­tantes propiedades, con sueldo de G. 2 millones.

Hasta ahora es un misterio la receta mágica de la fortuna aplicada por la inspectora Alvarenga, quien en entrevista señaló tener “millones de hec­táreas en herencia”, pero lla­mativamente estas grandes extensiones no figuran en su declaración jurada de bienes.

Méndez se escabulló del nego­cio alegando que es un simple agente de alquiler a quien la inspectora Alvarenga paga un porcentaje de comisión. Este dato tampoco aparece en la manifestación de bienes del inspector vip.