Una pequeña historia en la que se unen los recuerdos sobre la institución educativa y sus alumnos y también otros lugares en los que se forjaron tantas vidas.

• Por Toni Roberto
• tonirobertogodoy@gmail.com

Escribiendo y dibu­jando sobre el San José, me di cuenta de que pasó el tiempo. Desde hace siete meses escribo estos “cuadernos” en estas páginas, cuya denominación deviene de una serie de “Cua­dernos dibujísticos asunce­nos” iniciados en el 2001, ade­más de un programa de radio que empecé hace varios años.

Este domingo le dedico a una pequeña historia que se inicia a partir de dos “pedidos dibujísticos” de personas muy especiales, mis primos Pato y Julieta y mis amigos Fer y Monchi.

A veces las líneas de unos dibujos se convierten en anotaciones, escritos dis­frazados en trazos, así nace la serie “de Sanjo a Sanja”, tres dibujos encargados para homenajear a Dorita, una alumna del San José.

Esto me trajo a la memo­ria mis recuerdos de lejana promoción 83 del Cristo Rey, la primera mixta; y una legendaria foto en las escalinatas de dicha insti­tución con la querida profe­sora Estelita Careaga.

Al igual que cuando dibujé el Inter, me vinieron recuerdos de muchos que­ridos amigos que pasaron por el San José. Persona­lidades como el recordado Emilito Pérez Chávez, Patrón Encina Marín, José A. Galeano, Juan Manuel Marcos, rector de la Uni­versidad del Norte; el pre­mio nacional de ciencias Antonio Cubilla, con el que tuve el privilegio de traba­jar en forma conjunta para un proyecto de la Funda­ción Alda el pasado año. También fue alumno del San José mi amigo her­mano Efraín Ávila Car­dozo, el investigador en arquitectura “Yito” Morra y por supuesto el recordado, humilde y esforzado artista plástico Jacinto Rivero, del barrio Republicano, quien también pasó por esa casa de estudios.

En este caso, para “refres­car recuerdos” acudí a un hermoso libro que me obse­quió mi amigo y ex alumno Marcelo Codas, “Histo­rias casi olvidadas del Colegio San José”, del Dr. Óscar Doldán Pérez, edi­tado por Vidalia Sánchez, donde habla desde los prin­cipios del colegio en esa vieja casona de Rosa Peña sobre la Avda. España, allá por 1904, pasando por las diversas construcciones y grandes personalidades que pasaron por sus aulas.

El Dr. Doldán Pérez dice: “A lo largo de esta centuria, el San José ha legado al país un sinnúmero de personalida­des, en los distintos ámbi­tos nacionales, de la talla de: Arturo Bray, Augusto Roa Bastos, Mario Luis De Finis, Benjamín Vargas Peña, Hérib Campos Cervera, Julio César Chávez, Juan Boggino, José María Gómez Sanjurjo, José Ricardo Mazó, Jerónimo y Adriano Irala Burgos, Rafael Eladio Velázquez, Pedro Gama­rra Doldán, Carlos Alberto Meyer, Roque Vallejos, Ricardo ‘Pilo’ Lloret, Mario Paz Castaing, Antonio Cubi­lla, Víctor Pecci, José Anto­nio Gómez Perasso, entre tantas otras figuras que al no poder citarlas en su totalidad, estoy seguro de estar cometiendo injustas omisiones”.

En otra parte dice: “Desde el año 1992, el San José se transforma en un colegio mixto, con lo que al lado de grandes hombres también están surgiendo excepcio­nales mujeres sanjosianas”.

Termina diciendo: “Este libro queda abierto, y ojalá sea el puntal para seguir agregando los muchos epi­sodios que aún quedan en el tintero”.

En mi caso yo termino diciendo, empiezo esta serie de dibujos motivados en la ofrenda de Fernando Barrio­canal a su querida hija Dorita, de un “Sanjo” a una “Sanja”.