Tapa del libro digital de Isacio Mauricio Acosta, publicado en el año 2015. Un gran trabajo de carácter histórico sobre la emisora que fue el soporte principal de las actividades de la comunidad pilarense en tiempos de crisis por las inundaciones que han causado un tremendo impacto económico y social en la capital del Ñembucú.
Una emisora identificada con su comunidad ha sido ZP 12 Radio Carlos Antonio López, de la ciudad de Pilar. Ha tenido una activa participación en el quehacer ciudadano y un rol preponderante acompañando a la comunidad para solución de los problemas como las inundaciones y las condiciones climáticas adversas que afectaran a la zona.
POR EDUARDO PALACIOS
Fotos Gentileza
UNA EMISORA CON PRESTIGIO
El 10 de setiembre de 1962, salió al aire por primera vez para constituirse en un poderoso medio, que en los años siguientes jugaría un papel preponderante, en una titánica lucha contra las inundaciones a causa del desborde del río Paraguay y el arroyo Ñeembucú, en aquel histórico mes de mayo de 1983 en que la ciudadanía pilarense viviera los momentos más dramáticos que haya conocido.
Sobre los trámites previos para la salida al aire de la emisora, uno de los primeros pilarenses formados como locutor en la radio y protagonista importante de la misma es el profesor Ilfo Riveros, quien señala que fue “Un largo trajinar que comienza en 1960 cuando don Vicente Souto Hernández, en la época de intendente municipal de Pilar, solicita al presidente de la República de aquel entonces, la necesidad de contar con un medio de comunicación en Pilar. El intendente Souto Hernández recibe la respuesta del gobierno y, muy pronto, aparece al aire con pregón de esperanza, ZP 12 Radio Carlos Antonio López, el 10 de setiembre de 1962. A partir de entonces la radio hizo su propia historia, de la mano de su figura consular don Miguel Ángel Rodríguez Hermosa, quien fue su señero director, maestro de generaciones”.
Plantel de locutores y funcionarios de Radio Carlos Antonio López de mediados de la década de los años 60. El director, Miguel Ángel Rodríguez, sentado en el centro de traje oscuro. Una gran tarea para un gran director que le dio identidad a la emisora pilarense.
Señala igualmente don Ilfo Riveros que: “Así nació la radio pilarense ubicada fácilmente en el 700 del dial AM con gran alcance y potencia. A través de sus ondas vibró la difusión de nuestras polcas y guaranias, con animadores capitalinos y pronto se sumaron voces pilarenses al quehacer radial”.
PERIODISTA Y ESCRITOR
Por su parte Isacio Mauricio Acosta, hoy un destacado periodista pilarense, escritor de varios libros, uno ellos especialmente dedicado a la emisora donde comenzara, primeramente como operador y luego como locutor y redactor periodístico, relata con notable minuciosidad todos los pormenores de la rica historia; texto que puede ser encontrado en su versión digital en la web con el título de ZP12 La Radio de Pilar, publicado en el año 2015.
Mauricio Acosta señala en el enriquecedor material histórico que: “ZP12 adquirió muy pronto fuerte prestigio. Con una personalidad propia. Llegó a ser en sus primeros diez años de existencia la emisora más escuchada en gran parte del Paraguay y en las provincias del nordeste argentino. Su voz de ‘paraguayidad’, transmitida en la potente voz de su primer director, don Miguel Ángel Rodríguez, traspasó las fronteras, penetrando en los corazones de argentinos y paraguayos en un verdadero abrazo de fraternidad latinoamericana”.
“Ingresé en 1963, a un año de la salida al aire de Radio Carlos Antonio López, y comencé a trabajar como radio operador. Roberto Simbrón estaba, se retiró y me encomendaron reemplazarlo tras una rigurosa prueba en redacción del mismo Rodríguez, lo que me permitió abrirme paso en el campo periodístico. Comencé con la redacción de noticias nacionales e internacionales, y cuando don Miguel Ángel dejó la dirección en la década del 70, asumo la responsabilidad de toda la página informativa, centrada inicialmente en el Radio periódico del Mediodía y el Diario Oral (19 h). Después incursioné en la altura de los noticiosos, y en la conducción de programas periodísticos junto con otros compañeros de trabajo”.
Hicieron historia en una radio con identidad paraguaya: Miguel Ángel Rodriguez, en el escenario de ZP 12, en una celebración del aniversario de la emisora pilarense. Aparecen Héctor Bottino, primero de la izquierda, y Pedro Totti Brizuela, locutores.
OTRO HISTÓRICO
Por su parte Juan José Brull, locutor de ZP12, señala que “La emisora marcó un hito importante en la radiofonía, sobre todo en el sentido de emitir una señal propia, que marcó la identidad paraguaya, bajo la dirección de Miguel Ángel Rodríguez. Fue muy bien aceptado este medio no solo en el territorio nacional, sino también en las provincias vecinas”. Entre los primeros locutores que fueron desde Asunción estaban Lulú Ortiz, Pedro Brizuela, Roberto Simbrón, Antolín Leguizamón y Américo González. También condujeron programas en la emisora, el poeta Gumersindo Ayala Aquino y Juan Melgarejo, hijo de José L. Melgarejo.
Señaló también que el gran talento de Miguel Ángel Rodríguez hizo que rápidamente se fueran formando locutores pilarenses, quienes acompañaron decididamente la gran tarea radial de ZP12, con programas de jerarquía, de promoción del arte musical paraguayo y otros de valioso contenido como por ejemplo “El Mensajero Rural”, destinado a los hombres y mujeres del campo con avisos instructivos de diversa índole, ya que la radio era la única que posibilitaba ese tipo de servicio a la población, en momentos críticos para la vida pilarense. Originalmente la radio perteneció a la que fuera la Antelco, hasta que en el año 2001 pasó a depender de Radio Nacional. Hoy ZP12 forma parte de los medios de comunicación del Estado paraguayo, como una dependencia del Mitic. Varios profesionales de gran jerarquía de la radio y la televisión nacional comenzaron en esta emisora, entre ellos el director - gerente periodístico de Nación Media, Augusto dos Santos.
Si bien el mito fundacional y los registros cronológicos no coinciden plenamente, se asocia la construcción del templo con la defensa contra la Triple Alianza. Foto: Gentileza
Isla Umbú: restaurarán templo que invita a viajar en el tiempo
Compartir en redes
Jorge Zárate
jorge.zarate@nacionmedia.com
Fotos: Gentileza
A 12 kilómetros de Pilar, es punto obligado de visita para el que quiera conocer Ñeembucú y los sitios históricos de la guerra contra la Triple Alianza. El templo de la localidad, centro de memoria y religiosidad, será puesto en valor en el marco del programa Tekorenda, dando inicio así a una recuperación de un valioso patrimonio nacional. Aquí la historia.
“Venir a nuestro pueblo es como entrar en el túnel del tiempo”, dice Mabel Franco, de la Universidad Nacional de Pilar, describiendo la sensación que siente al ingresar al “cuadrilátero”, el antiguo dibujo de las manzanas centrales de Isla Umbú.
Un paisaje que refleja el estilo de construcción de la década de 1860 se percibe en las casonas de tipo colonial que enmarcan la plaza grande en la que está el cuartel desde que el mariscal Francisco Solano López dirigió en un momento la defensa del sur durante la Guerra Guasu.
En el centro mismo de ese espacio, como un elemento de identidad, está el templo San Atanasio, de gran valor simbólico, histórico y cultural. Este último fue elegido por el Programa Tekorenda de restauración de sitios históricos impulsado por la Secretaría Nacional de Cultura (SNC) para una intervención destacada.
El intendente Jorge Marecos se muestra agradecido: “Es la primera vez después de mucho tiempo que tendremos una intervención del Estado en esta refacción”, dice con alegría.
Sin embargo, los restantes edificios requieren intervenciones para preservar uno de los pocos cascos urbanos que ayudan a reconstruir época que quedan en pie en el país. “Este entorno le da ese toque cultural antiguo al pueblo, pero lastimosamente algunas casas están desocupadas, con techos derrumbados. Son casas particulares y es difícil intervenir, pero presentamos a la SNC un proyecto para conservar por lo menos las fachadas”, destaca el jefe comunal.
UNA INTERVENCIÓN NECESARIA
El intendente Marecos indica que “el templo está con dificultades. Los técnicos de la SNC el año pasado hicieron una visita y detectaron que necesitaba esta restauración que se va a encarar desde octubre si todo va bien”, apuntó.
“El edificio está sólido, bien parado, pero tiene sus años. Así que esta tarea que durará más o menos un año o un poquito más será más que importante para nosotros”. Entre tanto, habrá que encontrar un buen sitio para oficiar las misas, ya que allí se congrega la feligresía católica los domingos. “Es un tema sensible”, señala.
La activista cultural Mabel Franco recuerda que “es muy importante este acto porque la última restauración fue en 1979 y estuvo a cargo del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), donde se pudieron intervenir algunos horcones, ya que sus cimientos estaban muy comprometidos.
Los técnicos de la SNC hicieron una visita el año pasado y detectaron que necesitaba una restauración, que se va a
encarar desde octubre
Pero desde esa vez a esta parte es la comunidad la que mantiene el edificio y ya se necesitan nuevas intervenciones en los cimientos, teniendo en cuenta el tiempo y que el edificio es original de la época, es un patrimonio demasiado importante porque es único en su tipo”.
Explica entonces que en Laureles tuvieron que hacer una réplica de la iglesia antigua, en tanto que en Guasu Kua se hicieron intervenciones que reemplazaron componentes originales de su templo. En cambio, San Atanasio, en Isla Umbú, mantiene su estructura original.
TURISMO
A apenas 10 minutos de Pilar, capital del Ñeembucú, se asienta esta población de 3.700 habitantes, centro de la producción lechera regional. Franco apunta: “Nuestra comunidad lleva hasta 2.000 litros por día de leche para las familias pilarenses”.
Enmarcada por el imponente paisaje de los humedales, su verde intenso, su laguna Capilla destaca por la belleza que aporta la visita de una variedad notable y colorida de aves silvestres.
El jefe comunal de Isla Umbú asegura que están preparados para recibir más turismo. “Formamos parte del circuito turístico, pero no tenemos mayores auxilios de la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur), lo hacemos a nivel municipio”.
Contó que la gente no solo puede visitar el museo, el cuartel, el templo, sino que también acercarse a la laguna, “que ahora tiene un lindo muelle y caminero para tomar sol en estos días tan lindos”, propuso.
Recordó que una idea que tienen es avanzar en el recorrido turístico extendiéndolo hacia “las compañías como Boquerón y Tajy, donde hay escenarios de la guerra contra la Triple Alianza que ayudan a entender lo heroico de la defensa que se dirigió desde Isla Umbú”.
La laguna Capilla destaca por la belleza que aporta la visita de una variedad notable y colorida de aves silvestres
UN POCO DE HISTORIA
Mabel Franco, de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Pilar (UNP), recuerda que “la reorganización de Isla Umbú fue dispuesta por Carlos Antonio López, que le dio orden al jefe del cabildo de Pilar para poder formar el pueblo. Eligieron el mejor lugar para asentar el pueblo y luego se hizo una expropiación. Para ello tenían que pagar el diezmo los más adinerados y a los más humildes los ayudó el gobierno”.
Así fue que “se diseñó ‘el cuadrilátero’ en el estilo de los jesuitas, iglesia en el medio y en el lado oeste el cuartel, el cabildo y luego las casas a los costados con una gran plazoleta en el medio”, explica.
“Cuando la Triple Alianza, el Cabildo se convirtió en cuartel y fue el centro de aprovisionamiento del Ejército paraguayo en batalla, que entraba en acción más hacia el sur”, cuenta.
Una de las calles de Isla Umbú
Posteriormente, en el siglo XX el cuartel fue escuela, juzgado de paz, todo lo que necesitaba administrativamente funcionó allí y el cuadrilátero se mantuvo”, refiere. “La Municipalidad aprobó en 2003 una ordenanza declarando las casonas antiguas patrimonio distrital, cultural, dictando así un no innovar para que se mantengan las casas antiguas”, recordó.
Ese elemento político necesita ahora de inversiones para una recuperación que se espera se inicie con la restauración del templo. Como antecedente, vale señalar que en 2002 se restauraron los tres cuarteles históricos de la llamada “diagonal de sangre”: Isla Umbú, Humaitá y Paso de Patria.
UN PATRIMONIO A DESCUBRIR
La arquitecta Silvia Rey es la coordinadora del Eje de Intervención del Programa Tekorenda y cuenta que la iglesia San Atanasio de Isla Umbú “es un templo típico paraguayo, con estructura de madera independiente, muros de adobe de simple cerramiento y techos de teja y picanilla. Debido a sus características materiales, las condiciones climáticas y el paso del tiempo han afectado su estado”.
Describe a su vez que “los problemas de conservación se concentran principalmente en la cobertura debido a filtraciones de agua pluvial. Asimismo, presenta lesiones en los muros, como grietas, fisuras y desprendimiento de revoque.
La presencia de murciélagos es otro de los factores de degradación; además, se observan rastros de la acción de termitas (kupi’i), que aunque parecen estar inactivas actualmente habrían afectado la estructura del altar y algunas piezas de la estructura”.
–¿Qué pidió la comunidad en el marco de la audiencia pública?, ¿cuáles son los reclamos centrales?
–La comunidad expresó su preocupación respecto a la necesidad de salvaguardar la memoria histórica, muchas de cuyas tradiciones y conocimientos se conservan y transmiten de manera oral, debido a la pérdida de las fuentes documentales. Asimismo, manifestaron su interés en la protección del patrimonio cultural material, tanto mueble como inmueble, especialmente la iglesia y el museo. Concientes del valor de su entorno, otra de las preocupaciones principales es la preservación del ambiente urbano y natural de Isla Umbú. Para ello, se considera fundamental la implementación de un plan de ordenamiento urbano-territorial que promueva un desarrollo sostenible en la zona.
La iglesia San Atanasio de Isla Umbú “es un templo típico paraguayo, con estructura de madera independiente, muros de adobe de simple cerramiento y techos de teja y picanilla.
POTENCIAL
–¿Está pensado también un tratamiento para los otros edificios?
–En esta primera etapa, la intervención se centra específicamente en el templo. Sin embargo, la edificación que alberga el Museo Coronel Pedro Hermosa también se encuentra en el listado de edificios en necesidad de salvaguarda urgente de la SNC, lo que implica priorizar la obtención de fondos para su intervención en el marco del Programa Tekorenda.
No obstante, es importante señalar que el trabajo en territorio involucra varias otras acciones, las cuales son abordadas en un trabajo coordinado con la Dirección General de Patrimonio de la SNC en el marco de la política de protección del Patrimonio Cultural, como la documentación y el registro.
Dado el potencial que posee Isla Umbú, se espera que, con el proceso de puesta en valor, se genere un mayor interés hacia el sitio, lo que podría facilitar la inversión en la recuperación física y funcional de otras edificaciones.
–¿Qué rol tuvo el edificio durante la guerra contra la Triple Alianza?
–La Triple Alianza es el episodio más recurrente en la memoria colectiva de Isla Umbú. Según la tradición oral, la construcción de la iglesia fue motivada por la victoria que obtuvo el mariscal Francisco Solano López en la batalla de Estero Bellaco, cumpliendo una promesa hecha a San Atanasio, a quien se había encomendado. Sin embargo, el año de construcción referido, 1862, no coincide con este hecho histórico, que se dio cuatro años más tarde, en 1866.
–¿Cuáles son otros edificios históricos que requieren intervención?
–El edificio que hoy alberga al Museo Histórico Cnel. Pedro Hermosa, en homenaje a un combatiente de la guerra del 70, habría funcionado como cuartel de las tropas paraguayas durante las batallas desarrolladas en la zona de Ñeembucú. Se habría construido en la misma época que la iglesia, al igual que otras viviendas construidas alrededor de esta.
–¿Podría contarnos un poco la historia del distrito?
–A pesar de que los orígenes de Isla Umbú se remontan a 1779, cuando se inicia la ocupación efectiva de la zona del Ñeembucú, luego de la fundación de Pilar, la fecha de fundación que reconocen los pobladores es la del 8 de mayo de 1862, cuando, como parte de su política urbanística, don Carlos Antonio López ordena la reorganización del pueblo.
Sin embargo, según investigaciones realizadas por la historiadora Viviana Paglialunga, existen fuentes documentales en el Archivo Nacional de Asunción que dan cuenta de la existencia de cuatro escuelas y de trabajos en las obras del templo en el partido de Isla Umbú que datan de 1842.
–¿Cómo fue su evolución durante el siglo XX hasta la actualidad?
–A pesar del paso del tiempo, Isla Umbú ha mantenido sus características urbano-arquitectónicas, con la iglesia en el centro de la plaza y las viviendas con galería a su alrededor, disposición típica de los poblados del Paraguay desde la época colonial. La población va decreciendo debido a la migración campo-ciudad y, lamentablemente, hoy varias edificaciones se encuentran abandonadas y en riesgo de derrumbe.
–¿Isla Umbú está lo suficientemente referenciada como para movilizar el turismo histórico o ser parte de quienes llegan al Ñeembucú por sus humedales y paisajes?
–Isla Umbú está entre los secretos mejor guardados de nuestros pueblos pintorescos. Queda a tan solo 15 kilómetros –20 minutos en auto– de Pilar, recorrido que vale la pena, dadas sus características urbanas, ambientales y paisajísticas, así como su riqueza histórico-cultural y la calidez de su gente, que la convierte en un punto obligado para quien quiera conocer y disfrutar del Ñeembucú.
Entre sus tradiciones más arraigadas están la fiesta patronal en honor a San Atanasio, que se celebra el 2 de mayo de cada año y en la que no faltan las comidas típicas, los juegos tradicionales, la música y el baile.
Esta festividad culmina con el Festival Anual de la Leche, celebración en la que Isla Umbú hace gala de ser cuna lechera debido a que la producción de leche es la fuente principal de su economía.
Con presencia del vicepresidente de la República, Pedro Alliana, y el director de Yacyretá, Lic. Luis Benítez, se entregaron becas universitarias a 522 jóvenes de Ñeembucú con una inversión de la EBY. Foto: Gentileza
Alliana hace entrega de 522 becas a jóvenes de Ñeembucú
Compartir en redes
En un acto llevado a cabo en Pilar, con presencia del vicepresidente de la República, Pedro Alliana, y el director de Yacyretá, Lic. Luis Benítez, se entregaron becas universitarias a 522 jóvenes de Ñeembucú con una inversión de la EBY por valor de G. 1.044.000.000.
Se trata de 471 estudiantes que cursan carreras en el país y 51 en universidades del nordeste argentino. La ceremonia se realizó en el salón auditorio Padre Domiciano Ramírez, de la Gobernación departamental, institución a cargo de Víctor Hugo Fornerón.
El vicepresidente de la República, Pedro Alliana, felicitó a los jóvenes por acceder a las becas de la EBY y congratuló al director Luis Benítez por su trabajo al frente de la entidad, destacando el reciente acuerdo alcanzado con Argentina sobre remuneración de la energía eléctrica, que eleva a 28 USD el megavatio/hora generado por Yacyretá.
Asimismo, enfatizó las crecientes inversiones efectuadas por el Poder Ejecutivo en materia educativa, no solo mediante los convenios de la EBY con las gobernaciones del área de influencia, sino también a través del Programa de Becas del Gobierno del Paraguay, financiadas por Itaipú, Yacyretá, el Ministerio de Educación y la Secretaría de la Juventud.
Yacyretá entrega becas a más de 500 jóvenes de Ñeembucú
Compartir en redes
En un acto oficial realizado en la ciudad de Pilar, un total de 522 jóvenes del departamento de Ñeembucú fueron beneficiados con becas universitarias otorgadas por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), mediante una inversión de G. 1.044 millones.
La ceremonia, desarrollada en el salón auditorio “Padre Domiciano Ramírez” de la Gobernación de Ñeembucú, contó con la presencia del vicepresidente de la República, Pedro Alliana, y del director de Yacyretá, Lic. Luis Benítez. De los becarios, 471 cursan estudios en universidades paraguayas y 51 lo hacen en instituciones del nordeste argentino.
Durante el evento, el vicepresidente Alliana felicitó a los jóvenes por su dedicación y aprovechó para destacar la gestión del director Benítez, resaltando el reciente acuerdo alcanzado con Argentina que eleva a 28 dólares por megavatio/hora la remuneración de la energía generada por Yacyretá.
El vicepresidente Pedro Alliana estuvo presente en el acto de entrega de becas. Foto: Gentileza
Asimismo, el vicepresidente subrayó el compromiso del Gobierno con la educación, a través de distintas iniciativas como los convenios entre la EBY y las gobernaciones del área de influencia, así como el Programa Nacional de Becas financiado por Itaipú, Yacyretá, el Ministerio de Educación y la Secretaría de la Juventud.
En su discurso, también anunció importantes inversiones en infraestructura para Ñeembucú, incluyendo el impulso a una futura carrera de Medicina en la región, con el objetivo de evitar el éxodo de jóvenes hacia la capital para formarse en esta área. Se prevé una inversión total de USD 240 millones en proyectos que serán licitados y ejecutados a partir de este mismo año.
En ese contexto, la EBY confirmó además una inversión adicional de G. 1.495 millones para culminar la planta de tratamiento de agua potable en la compañía Lomas, distrito de General Díaz, obra que beneficiará directamente a unas 1.000 personas.
Por su parte, el director ejecutivo de la EBY, Luis Benítez, reafirmó su compromiso con el cumplimiento de los pagos en tiempo y forma de las becas estudiantiles. Aseguró que el reciente acuerdo energético con Argentina garantiza la continuidad de estas inversiones sociales clave para el desarrollo de la región.
La nueva infraestructura prevista en la capital del departamento de Ñeembucú tiene dos objetivos principales: proteger ante desastres naturales y mejorar la calidad de vida. Foto: Gentileza
Fase B: avanzan los trabajos preliminares en la Costanera de Pilar
Compartir en redes
El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) informó que las intervenciones iniciales de la Fase B del proyecto de Defensa Costera de Pilar, avanzan en diversos sectores de la ciudad. Los trabajos actuales se enfocan especialmente en el barrio San Quintín y en el tramo Yataity, Paso Méndez.
Los trabajos incluyen: la construcción del sistema de alcantarillado pluvial y cloacal, así como una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR). En el barrio San Quintín, se prevé el inicio de excavaciones y la instalación de cañerías de desagüe cloacal. Mientras tanto, en el tramo Yataity, Paso Méndez, se llevan a cabo labores de topografía, estudios de suelo y análisis hidráulicos, además de la limpieza de la franja de dominio, como parte de las acciones previas a la pavimentación.
La nueva infraestructura prevista en la capital del departamento de Ñeembucú tiene dos objetivos principales: proteger ante desastres naturales, reduciendo el riesgo de inundaciones mediante un sistema eficiente de alcantarillado, y mejorar la calidad de vida, promoviendo un entorno más saludable y sostenible para la comunidad.
Consultas
La comunidad cuenta con una línea telefónica, 0976 664 887, para realizar consultas sobre la obra. Esta herramienta busca garantizar el derecho de la ciudadanía a recibir información y asegurar respuestas oportunas. Paralelamente, se organizan reuniones con la comunidad para informar sobre los detalles de la iniciativa: objetivos, impactos ambientales y urbanos, plazos de ejecución y la gestión de permisos de los frentistas.
Además, se están levantando actas de preconstrucción, documentos que registran el estado actual de las viviendas cercanas a las obras. Esto garantiza que, en caso de daños durante la construcción, los propietarios cuenten con respaldo para solicitar su reparación.
La realización de este emprendimiento está a cargo del Consorcio Sanitario Ñeembucú, integrado por LT S.A., Constructora Heisecke S.A. y Benito Roggio e Hijos S.A., con la supervisión del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y la fiscalización de CIALPA S.A.