Se dice que en marzo siempre pasa algo grande y que deja marca en Paraguay. Así fue desde aquel marzo de 1999, que terminó con la destitución del entonces presidente, Raúl Cubas Grau, tras el asesinato del vicepresidente Luis María Argaña. Este marzo va cerrando con la presencia de bandas musicales icónicas y de celebridades que dejaron su huella en el público paraguayo, para bien y para mal.

El mes arrancó con todo. Manifestaciones por todo el país, una esca­lada de precios de combustible que no paraba, lo que derivó finalmente en una gran mani­festación de camioneros que bloquearon las rutas princi­pales del país por varias horas y durante varios días. La situa­ción apenas se fue calmando cuando lograron que el Poder Ejecutivo y el Congreso Nacio­nal sancionaran una ley para permitir subsidiar a Petro­par, pero no a los emblemas privados, que tomaron como represalia la medida de traba­jar solamente desde las 6:00 hasta las 14:00 en todas sus estaciones de servicio.

El reciente recuerdo de lo que pasó en el concierto de San Bernardino, con el asesinato de la modelo e influen­cer “Vita” Aranda por tener la mala fortuna de estar en medio de un ataque de sica­rios del narcotráfico, no ami­lanó las ganas de la gente de volver a estar en un ambiente de mucho público y euforia para escuchar a sus bandas favoritas. Pero esta vez lo que arruinó la fiesta fue el clima.

El martes 22 de marzo pasado, cuando todo estaba previsto para arrancar el megafes­tival, cerca de las 19:00 una tormenta de grandes propor­ciones cayó sobre Asunción y Área Metropolitana. Mien­tras cientos de personas que­daban atrapadas en las calles, los raudales arrastraban autos y los barrios quedaban sin energía eléctrica, Asunció­nico se cancelaba. Había una lista importante de artistas que todavía faltaban presen­tarse, entre ellos el estadounidense Machine Gun Kelly (MGK), que vino al país acom­pañado de su novia, la actriz Megan Fox, quien un día antes ya revolucionó las redes socia­les recorriendo el humedad del banco San Miguel, en la zona de la Costanera.

A la noche de ese mismo mar­tes, MGK convocó a sus fans frente al hotel donde se hos­pedaba para hacer el con­cierto ahí, ya que fue cance­lado en el festival. En pocos minutos, decenas y decenas de fans del cantante rodea­ron el hotel y disfrutaron de la música y la energía que puso el cantante, con su novia Fox bailando. Una fiesta.

Esto dio pie a que los fanáti­cos de Foo Fighters le pidan lo mismo. Estos tenían la espe­ranza de que esta banda lide­rada por Dave Grohl (ex Nir­vana) tomara el ejemplo de Machine Gun Kelly. Entre los presentes estaba la pequeña Emma Sofía, una baterista de apenas 9 años que decidió montar su batería frente al hotel y ofrecer una serenata a sus ídolos. Esto llamó la atención de Taylor Hawkins, baterista de Foo Fighters, que salió, buscó a la joven­cita y accedió a tomarse una fotografía con ella. Así tam­bién, se dirigió a los presen­tes, lamentó la suspensión del festival y prometió que volve­rían para tocar ante el público paraguayo en otra ocasión.

Esa misma noche tenía que llegar al país la artista Miley Cyrus, que volvía a Paraguay después de varios años. Pero el avión que traía a la estrella del pop recibió una descarga eléctrica en pleno vuelo, lo que obligó a la tripulación a aterrizar en Minga Guazú y de ahí directo partieron a San Pablo, Brasil. Cyrus, sin embargo, dejó mensajes de cariño para sus fans para­guayos en las redes.

La cantante estadounidense Doja Cat también tenía previsto presentarse en el Asunciónico. Pero a dife­rencia de los otros artistas, la rapera ni siquiera men­cionó al país en sus redes, no salió a saludar a sus fans y mucho menos ofrecer un concierto frente a su hotel. Incluso, llegó con el rostro totalmente tapado, como para que no se la viera. Como la presión en las redes subía, Doja escribió en su cuenta personal que lamentaba la situación, pero que ella bajó a la recepción de su hotel y no encontró a nadie. Esto enfureció a todos sus fans. Rápidamente en Twitter la cantante se hizo tendencia a nivel global, ya que muchos otros artistas –como los argentinos cantantes de rock– se manifestaban a favor del público paraguayo.

Los cuestionamientos fue­ron subiendo en Twitter y rápidamente Doja Cat se convirtió en tendencia mundial, por lo que nueva­mente salió a escribir y de nuevo con un tono despec­tivo hacia el público para­guayo. Mientras, la celebri­dad de internet Mia Khalifa, que también estuvo en Asunción acompañando a su pareja para el concierto, llenaba sus cuentas socia­les de fotos de Asunción, memes e interactuando con el público local. Las compa­raciones no se hacían espe­rar. Incluso, la cuenta oficial del Mercosur se pronunció en la tarde de este viernes sobre esta situación.

La penúltima semana de marzo cerró en Paraguay como manda la tradición, con situaciones insólitas e inolvidables.