Días atrás fue habilitado el primer tramo –de Pirayú a Paraguarí– del proyecto impulsado por Sendas Py que busca crear la bicisenda más larga de Sudamérica, uniendo Asunción con Encarnación a través del antiguo recorrido del ferrocarril Carlos Antonio López. Pero la propuesta va mucho más allá. Jerónimo Buman, uno de los impulsores de esta idea, nos hace un recorrido por el proyecto.

En el 2017, un rea­lizador audiovi­sual y entusiasta del ciclismo sorprendió a todos lanzándose a una increíble aventura que tuvo enorme repercusión en los medios y en especial en las redes sociales. Jerónimo Buman unió las ciudades de Asun­ción y Encarnación en bici­cleta, siguiendo el antiguo trazado que usaba el ferro­carril Carlos Antonio López, un recorrido lleno de natura­leza e historia.

Jerónimo tenía un objetivo claro y lo logró: darle visibili­dad a un ambicioso proyecto al que desde años antes venía dándole vueltas desde la organización que encabeza, Sendas Py: la concreción de la bicisenda más larga de Sud­américa, entre Asunción y la capital itapuense, en un reco­rrido de unos 370 kilómetros (incluyendo un tramo que se hace de San Salvador hasta Abaí, en Caazapá).

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Jerónimo Buman encabeza la asociación Sendas Py.

“Cuando hice el viaje me sentía un turista, como un extranjero paseando y cono­ciendo cosas de mi propio país, paisajes hermosísimos que fui descubriendo en cada kilómetro, y la gente, que por todos lados me recibía con una sonrisa, me invitaba a almorzar e incluso a des­cansar o dormir en sus casas. Tengo miles de anécdotas y amigos en cada tramo. Ya son cinco viajes que hice comple­tos, siempre con gente nueva. El último fue desde Coronel Bogado hacia Asunción, hici­mos a la inversa este año y en diciembre o enero vamos a hacer otra vez”, cuenta hoy Jerónimo. Lo hace con un plus de satisfacción, ya que días atrás fue inaugurado el primer tramo piloto den­tro del trazado del proyecto, entre las ciudades de Pirayú y Paraguarí.

El 20 de setiembre, el pre­dio de la antigua estación de tren de Pirayú –que fue motivo de una restaura­ción recientemente– fue el punto de encuentro de más de un centenar de ciclistas entusiasmados por reco­rrer el tramo piloto, que va hasta la estación ferroviaria de Paraguarí, a través de un recorrido de pura aventura de 18 kilómetros, con una parada en el sitio histórico de Cerro León. Fue una ver­dadera fiesta del ciciclismo.

“Este primer tramo fue hecho a nivel voluntariado y por gente de las comuni­dades de Pirayú y Paraguarí que se unieron. Justamente es lo que busca este pro­yecto, que las comunida­des se junten y sean parte de esto. El concepto es ese, de que esto no es solamente andar en bici; es todo un pro­yecto integral que impulsa la economía por medio del turismo, el deporte, la cul­tura, la historia, el amor por el país”, señala.

Buman lanza además un dato que da consistencia a la idea. “El día de la apertura fuimos 210 ciclistas anotados que participaron, aparte de los familiares, los curiosos, los que se fueron a disfrutar el día. Otros fueron hasta Para­guarí otra vez a esperar a su gente. Es decir, hablamos de muchísimas personas. Ima­ginate que cada una gaste un 50 mil entre comida, jugos o comprar algún souvenir. Los números hablan solos en este sentido. Eso fue una vez nada más, la intención es que esto sea continuo”, agrega el ciclista.

El tramo piloto tiene 18 kilómetros.

FASES

Para Buman, la dinámica de la bicisenda deberá ir dándose por fases. En este caso, la apertura del pri­mer tramo piloto sería una primera etapa en que, ya en funcionamiento, las comuni­dades deben tomar la posta sobre el proyecto dentro de sus respectivos territorios. “Nosotros (Sendas Py) orga­nizamos los paseos, organi­zamos la forma de plantear la bicisenda, pero lo que bus­camos es que la gente de las ciudades sea la que plan­tee las acciones, sobre todo para promocionar. Esto fue un primer planteo y fue a todo a pulmón. Los chicos se portaron, fue impresio­nante el involucramiento. De nueve puentes ya se arreglaron cuatro y todo fue mediante donaciones y voluntariado. Eso ya denota un compromiso grande. En la otra etapa buscaremos el fortalecimiento del pro­yecto mediante inversio­nes. Estamos trabajando en la forma en que vamos a plan­tear a las marcas o empresas cómo se va a hacer la inver­sión, porque es importante tener un equilibrio entre lo que es la experiencia del viaje a nivel paisaje natural y mantener esa intención, pero también que el inver­sor tenga un retorno posi­tivo. En este caso, como es un proyecto social, es mucho más que poner un cartelito. Es buscar que la marca se asocie a esa experiencia de forma positiva. Tenemos que luchar, batallar y continuar pedaleando este proyecto “, explica Buman.

Entre las propuestas de la asociación se encuentra, por ejemplo, la posibilidad de integrar a las antiguas esta­ciones de tren como puntos clave, “que se pueda llegar a una estación de tren y que tengas ahí un cartel infor­mativo de las atracciones de cada ciudad, de la historia o al mismo tiempo tener un QR y usar tu celular como forma de llegar a más información de la localidad, de la historia del tren. Pueden ser audio­visuales, podcast, que no sea algo aburrido”.

Tras la firma del convenio con Fepasa.

CONVENIO

El pasado 17 de setiembre, Sendas Py dio un giro más de suma importancia para el desarrollo del proyecto. Se trata de un convenio fir­mado con Ferrocarriles del Paraguay SA (Fepasa) para la libre utilización del trayecto ferroviario propuesto, pero sin modificaciones mayores. “Ese convenio solamente nos permite ser usufructuarios, o sea, Fepasa nos ‘presta’ el trayecto del tren para usar como senda, pero sin cons­truir. Se puede poner ripio en los tramos que se nece­site, arreglar puentes, poner cartelería, hacer limpieza, pero no asfalto, por ejem­plo. Eventualmente se pro­yecta la venida del tren y para ese entonces el tramo volve­ría a quedar a disposición de Fepasa”, explica por su parte Lorena Colmán, coordina­dora del proyecto por Sen­das Py.

El anuncio por parte Gobierno de que el Tren de cercanías, entre Ypacaraí y Asunción, podría concre­tarse en los próximos años, plantea también una oportu­nidad para que la bicisenda sea incluida como parte de ese sueño. “Al princi­pio nuestro planteamiento era hacer el primer tramo (de la senda) de Ypacaraí a Luque, pero nos dijeron que no, justamente por ese pro­yecto. Por eso empezamos por Pirayú-Paraguarí. El siguiente tramo que quere­mos habilitar es Pirayú-Ypa­caraí, pero nuestro sueño es esa multipolaridad, que uno por ejemplo pueda subirse al tren en cualquier esta­ción, bajar y continuar en bici o retornar a Asunción usando el tren. Lo que noso­tros proponemos es que las sendas pasen al costado de la vía, eso quedó como pro­puesta. Que el tren tenga sus vagones especiales para transportar bicis, como hay en varias partes del mundo”, agrega la coordinadora.

Entusiastas ciclistas paraguarienses.

EN AUGE

Es innegable que el fenó­meno del ciclismo se ha ins­talado con fuerza en los últi­mos años en el país. Vemos hoy gente de todas las edades haciendo paseos en grupo o en solitario por calles y rutas de todas las ciudades. Incluso se han creado grupos de ciclistas en diversas locali­dades. “Fue lo único positivo que dejó la pandemia”, dice al respecto Lorena Colmán, al momento de destacar el aumento de compra de bici­cletas en los últimos años. “Pasa que en su momento era una de las pocas actividades al aire libre que se podían desarrollar”, agrega.

Si bien aún falta mucho por hacer en cuanto al ciclismo, especialmente para enten­derlo como una actividad cotidiana dentro de nues­tras vidas –recordemos, por ejemplo, el fallido proyecto de la ciclovía asuncena sobre la calle Iturbe–, las expec­tativas son grandes y desde Sendas Py tienen claro que el camino se inicia en gene­rar primero conciencia. “Es fundamental el trabajo de conciencia, por eso desde un principio se trabaja pri­mero con las comunidades, que sean ellas las que se orga­nicen, las que quieran, por­que es la única forma en que esto se va a cuidar y que per­dure”, afirma Colmán.

“Yo no me voy a cansar por­que amo hacer esto y, lo que quiero, lo único que me inte­resa es que la gente disfrute también de esto”, finaliza Jerónimo Buman.

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DE INTERÉS TURÍSTICO DEPARTAMENTAL

El 22 de setiembre se hizo pública la Resolución N° 10/2021 por parte de la Junta Departamental de Para­guarí, la cual resolvió declarar “De Interés Turístico Departamental el proyecto ‘Sendas del Tren’”.

Según señala el portal Pirayú y su gente, el pedido de declaración había sido presentado por el concejal departamental pirayuense Mario Godoy. “Este gran proyecto sin dudas significará un gran salto turístico nacional, revalorizando un patrimonio del Paraguay, las vías del tren, la estaciones, su entorno y la cultura de cada ciudad”, agrega el sitio.

“QUE SEA TIERRA DE TODOS”

“Nosotros planteamos la bicisenda más larga de Sudamé­rica primeramente porque no existe un tramo así tan largo y, segundo, por una cuestión de llamar la atención. En rea­lidad el proyecto es un parque lineal, uno no tiene que ser ciclista para usar la senda, puede ir a trotar, puede hacer mil metros, quinientos metros, ir a caminar con la familia. Es como un Ñu Guasu lineal. Mientras no tengas un motor a combustión para moverte, está todo bien. Nosotros busca­mos acompañar este proyecto y que sea el proceso natural y, que mientras no esté el tren, cuidemos ese espacio y que no se convierta en tierra de nadie, que sea tierra de todos”, señala Jerónimo Buman, cabeza de Sendas Py.

Sendas Py es una asociación sin fines de lucro dedicada a generar caminos naturales y desde la abundancia de recur­sos mostrar un lado único y diferente como país ante el mundo. Según los mismos, el proyecto pretende lograr la bicisenda más larga de Sudamérica, pasando por 39 ciu­dades y 5 departamentos. Busca promover la conexión entre las comunidades a través de la creación de caminos y la revalorización de los recursos naturales e históricos, a partir de las antiguas vías del tren y sus estaciones, que en el año 1999 dejaron de funcionar.

Los responsables destacaron también el gran apoyo que han recibido de muchas persones en estos años, de forma volunta­ria y desinteresada. Entre ellos el de Bruno Defelippe, quien posee una vasta experiencia en redes de emprendedores y proyectos sociales; y del arquitecto Luis Godoy, del estudio OCA, quien ofrece asesoramiento técnico a la organización.

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