El recuerdo de programas y gente de radio de antaño desarrollamos hoy como parte de nuestras historias.

• POR EDUARDO PALACIOS
• fepalacios@tigo.com.py

El papel que han cum­plido las emiso­ras y que lo siguen haciendo en cualquier parte del mundo está sustentado en el esquema de programa­ción que plantea, a partir de la decisión de quienes la han creado, sus propietarios, per­sonas físicas o jurídicas que optaron por el medio.

Para ello convoca al técnico especialista para determinar las características técnicas de la estación, los alcances de las emisiones, los tipos de equipos necesarios, la ubicación física del medio, y, actualmente, los trámi­tes para acceder a la licen­cia otorgada por el Estado y otros detalles que hacen a las dependencias, el relacio­namiento con otros medios.

Así también, los aspectos económicos y financieros sobre los que se asentará la estructura en ese orden y los profesionales que habrán de “poner al aire” la programa­ción, cerrándose el círculo sobre la decisión adoptada para abrir o poner en fun­cionamiento el medio radial.

En nuestra página quere­mos hoy referirnos y con ello rendir un homenaje a los cientos de profesionales que han pasado por las cerca del millar de emisoras que hoy están en el aire, desde la década de los años 20, y de otras que lamentablemente hoy ya han desaparecido del espectro radiofónico, luego de cumplir un papel impor­tante en nuestra sociedad.

Las notas periodísticas de los primeros años de la década del 20 informan que los señores Alfredo Stricker y Alfonso Sá fueron los prime­ros que realizaron las trans­misiones de onda corta entre San Bernardino y Asunción. En ese entonces, las emisio­nes eran de música y noticias en la estación identificada como Radio CXZ-27.

Las emisiones desde San Bernardino eran captadas en Asunción en la estación radial del señor Sá y retrans­mitida por la señal de su pro­piedad y creación con la iden­tificación de Radio Paraguay. Ernesto Stricker era un ciu­dadano suizo residente en la

villa veraniega de San Ber­nardino y permanente cola­borador de las iniciativas ciudadanas de aquella época.

Poco tiempo después, se sumaron a la actividad radio­fónica, desde el aspecto téc­nico, Salvador Guanes, Zaca­rías León y en los años 30, César M. Sacarello, como pio­neros en la novel generación de ondas radiales a partir de un aparato transmisor con diseño artesanal y unas ante­nas montadas en una torre de altura, fruto de la inventiva de talentosos hombres que estaban dando nacimiento a lo que sería la radiotelefo­nía y años más tarde la radio­fonía paraguaya. Las ciuda­des de Villarrica, San Pedro, Nueva Germania y Encarna­ción también se incorpora­rían como señales radioeléc­tricas a partir de 1924.

El diario El Orden, apare­cido en Asunción en el año 1923, dirigido cuando enton­ces por Gualberto Cardús Huerta y Félix Paiva, en su edición del 15 de marzo de 1926, se hizo eco de la naciente actividad radiote­lefónica de entonces, carac­terizada por su función de recepción y transmisión, publicando lo que consti­tuiría para la población de la ciudad de Paraguarí la instalación de una estación radial, en este caso. “Esta importante población es una de las que se va desta­cando en los progresos radio­telefónicos en el país, funcio­nando actualmente en ella una estación que es a la vez transmisora y receptora”, señalaba el periódico.

La información del medio escrito, uno de los más importantes de la época, agrega que “desde la semana anterior se ha instalado con el ahorro y contribu­ción voluntaria de los jefes y oficiales del Regimiento (de Artillería), un aparato cuyos ensayos de transmisión y recepción son bas­tante satisfactorios”.

Agrega también que “es muy plausible esta iniciativa que demuestra la relativa faci­lidad y modicidad con que hoy pueden hacerse insta­laciones de este género y el ejemplo de Paraguarí será imitado a lo que parece ser por otras ciudades y pobla­ciones del interior”.

El mismo diario El Orden, una de cuyas redactoras era Josefina Plá, en su edición de fecha 17 de marzo de 1926 anunciaba un concierto por radio. “La nueva Sociedad de Radio Cultura Paraguaya, de cuya reciente constitución están informados nuestros lectores, dará esta noche a las 9:00 una audición de radio­telefonía, la que será trans­mitida desde el domicilio del presidente, don Alfonso Sá, con el concurso del profesor Morosoli y otros”.

Son reseñas de la prensa escrita dando cuenta de la creciente actividad que se generaba en las dos o tres estaciones de radio, en la segunda mitad de los años 20, llegando hasta los hoga­res nacionales con progra­mas musicales clásicos y nacionales, con actuacio­nes en vivo de artistas nacio­nales, buscando acceder al privilegio de la audiencia, es cierto en medio de precarie­dad, pero con talento.

El martes 9 de junio se celebrara el Día de los Locuto­res como un homenaje a los fundadores del primer gre­mio de profesionales de la radio, la Asociación de Locu­tores del Paraguay (Alorpa), constituido un 9 de junio de 1950, en el antiguo local de Radio Charitas, en Herrera entre Caballero e Iturbe, cuyo primer presidente fue Dante Benedetti, locutor de gran prestigio cuando enton­ces, llegando a ser uno de los locutores del servicio infor­mativo de la Voz de América de los Estados Unidos.

Los locutores de antaño eran personas que con sobrado talento sustentaron el que­hacer radiofónico, poniendo a la radio como el centro de la diversión familiar y de promoción de las activida­des sociales y culturales de la comunidad asuncena, en una función de servicio, hoy reemplazada por el rol orien­tador de un periodismo de avanzada cumpliendo un papel sobresaliente en favor de la sociedad.

Entre esas voces de los pri­meros años de la radio sobre­sale doña Josefina Plá y Roque Centurión Miranda, iniciadores de la activi­dad como locutores condu­ciendo programas culturales y años después, formadores de generaciones de locutores y locutoras, en el rol de edu­cadores. Citamos también a Don Pedro García, el padre del periodismo deportivo paraguayo, también forma­dor de cientos de hombres y mujeres de radio. Celestino Álvarez, desde los años 30 como locutor en las emiso­ras de entonces.

Gerardo Halley Mora, Fruc­tuoso Mosqueira, Dr. Carlos Mersán, Ida Quintana de Barrios, María Luisa Arte­cona de Thomson, Sindulfo Martínez, Luis G. Benítez, J. Manuel Chamorro Damus, Ninica Segura, Papotin Recalde, Benigno Rojas Vía, Félix María Cáceres, Dora Gómez Bueno de Acuña, Jacinto Herrera, son nom­bres de personas que con mucho talento han sobresa­lido como locutores desde los años 30 a los 50 y más, que lo recordamos hoy y en nom­bre de ellos a muchos de los locutores que en esa etapa de la vida nacional han comen­zado a escribir las historias de la radio.­